Estados Unidos está “desesperado” por debilitar el “prestigio internacional” de Venezuela, aseguró ayer el presidente Hugo Chávez, quien desestimó las críticas de Washington a una reciente ley que otorga al mandatario poderes excepcionales para legislar.
“El imperio (Estados Unidos) está desesperado: que si dictadura, que si Chávez, que si la ley habilitante es la dictadura (...) Pero no van a poder debilitar el prestigio y la autoridad de Venezuela en el concierto internacional, en América Latina, en el mundo”, dijo Chávez en su programa dominical “Aló Presidente”.
El jueves, el subsecretario de Estado estadunidense para el hemisferio occidental, Arturo Valenzuela, consideró que la llamada Ley Habilitante, que le otorga a Chávez poderes extraordinarios para legislar durante 18 meses en diversas materias, es una “medida antidemocrática” que viola la Carta Interamericana de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Recientemente, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, también manifestó su preocupación por esta ley que, según él, “afecta las capacidades de actuación” del nuevo Congreso.
Chávez mencionó que dichas declaraciones formarían parte de una componenda de la OEA, así como del gobierno de los Estados Unidos y la oposición venezolana, pues buscan propiciar una “intervención” de la primera potencia mundial.
“Pero nadie podrá dividirnos de nuevo. ¡La unión sudamericana! Por ahí vamos”, agregó Chávez, informando que tiene planes para reunirse “pronto” con la nueva mandataria de Brasil, Dilma Rousseff, para seguir avanzando en la integración regional.
Los poderes legislativos otorgados a Chávez fueron aprobados por la anterior Asamblea Nacional, (antiguo Parlamento unicameral, de mayoría oficialista) a pocas semanas de que terminara su periodo legislativo, el 5 de enero, cuando la oposición pasó a ocupar 40 por ciento de los escaños.
Caracas. AFP, Milenio, 10 de enero.
“El imperio (Estados Unidos) está desesperado: que si dictadura, que si Chávez, que si la ley habilitante es la dictadura (...) Pero no van a poder debilitar el prestigio y la autoridad de Venezuela en el concierto internacional, en América Latina, en el mundo”, dijo Chávez en su programa dominical “Aló Presidente”.
El jueves, el subsecretario de Estado estadunidense para el hemisferio occidental, Arturo Valenzuela, consideró que la llamada Ley Habilitante, que le otorga a Chávez poderes extraordinarios para legislar durante 18 meses en diversas materias, es una “medida antidemocrática” que viola la Carta Interamericana de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Recientemente, el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, también manifestó su preocupación por esta ley que, según él, “afecta las capacidades de actuación” del nuevo Congreso.
Chávez mencionó que dichas declaraciones formarían parte de una componenda de la OEA, así como del gobierno de los Estados Unidos y la oposición venezolana, pues buscan propiciar una “intervención” de la primera potencia mundial.
“Pero nadie podrá dividirnos de nuevo. ¡La unión sudamericana! Por ahí vamos”, agregó Chávez, informando que tiene planes para reunirse “pronto” con la nueva mandataria de Brasil, Dilma Rousseff, para seguir avanzando en la integración regional.
Los poderes legislativos otorgados a Chávez fueron aprobados por la anterior Asamblea Nacional, (antiguo Parlamento unicameral, de mayoría oficialista) a pocas semanas de que terminara su periodo legislativo, el 5 de enero, cuando la oposición pasó a ocupar 40 por ciento de los escaños.
Caracas. AFP, Milenio, 10 de enero.
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