Los gobiernos de Guatemala, El Salvador y Honduras pedirán a México la creación de una fiscalía federal que investigue los delitos que se cometan contra migrantes que cruzan el territorio nacional rumbo a Estados Unidos, informó el viceministro guatemalteco, Érick Maldonado Ríos.
En entrevista telefónica con EL UNIVERSAL, el encargado de la agenda migratoria del Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala consideró que los ataques contra los migrantes en México se han convertido en acciones sistemáticas y han dejado de ser hechos aislados, por lo que, en el próximo encuentro diplomático entre los cuatro países, pedirán a la administración del presidente Felipe Calderón que indague a fondo el secuestro de 50 centroamericanos en Oaxaca cometido en diciembre.
“Pediremos el abordaje regional del fenómeno migratorio y la necesidad de abrir una fiscalía a nivel federal que investigue los delitos que se cometen contra la comunidad migrante”.
Maldonado Ríos explicó que aunque el gobierno de Guatemala no tiene una cifra exacta de ciudadanos que han sido víctimas de extorsión o secuestro por parte de las bandas del crimen organizado en México, sus consulados poseen cifras similares a las presentadas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) que tiene registrados 214 secuestros masivos durante 2010 en contra de aproximadamente 10 mil migrantes.
El diplomático señaló que solicitarán que la entidad que se encargue de perseguir los delitos contra migrantes tenga como base a la fiscalía estatal de Chiapas, estado en donde, considera, “se han notado avances muy completos” para disminuir los crímenes contra este grupo vulnerable.
La propuesta de crear una fiscalía especial será discutida la próxima semana durante el encuentro diplomático entre los representantes de las tres naciones centroamericanas y México, donde se presentará el tema como una estrategia de aplicación conjunta.
Relaciones estables
De acuerdo con el viceministro, la relación diplomática con México no se ha visto afectada a raíz de la denuncia que realizaron los gobiernos de El Salvador y Honduras por el secuestro múltiple en Oaxaca en diciembre.
En esa ocasión el gobierno mexicano informó que las versiones sobre el presunto asalto y secuestro de 50 migrantes carecían de sustento.
“No hay tensión diplomática, Guatemala protestó por derecho legítimo y el haberlo hecho en conjunto con El Salvador y Honduras lo validan”, afirmó el diplomático.
Agregó que su país siempre ha sido respetuoso de las formas diplomáticas y que se ha expresado en los mejores términos sobre la situación, por lo que la visita que las cancillerías de los tres países planean hacer a México será para reiterar sus peticiones.
El viceministro reconoció los esfuerzos del Instituto Nacional de Migración (INM) y las policías estatales y municipales en la defensa migratoria, pero agregó que la corrupción sigue latente en los niveles medios y altos de esta institución, por lo que la tarea en pro de quienes cruzan el territorio nacional es difícil.
Para Guatemala, dijo, es importante reforzar la presencia de los agentes policiacos en las zonas de mayor riesgo, pero insistió en la exigencia que su país ha emitido para que el INM deje de realizar sus operativos nocturnos en la ruta migratoria hacia Estados Unidos.
“Hemos sido tajantes al rechazar cualquier operativo que realice el INM en horario nocturno y que tiende a estar en contra de la comunidad de migrantes”, reiteró Maldonado.
Consideró que el panorama migratorio en México es complicado y se ha agravado. “Los migrantes tienen un amplio abanico de riesgos y en los últimos cinco o seis años el crimen organizado los ha tenido como objetivo”.
El viceministro advirtió que los crímenes contra centroamericanos en México los afectan a ellos y a la sociedad mexicana, por lo que confió en lograr acuerdos conjuntos.
En entrevista telefónica con EL UNIVERSAL, el encargado de la agenda migratoria del Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala consideró que los ataques contra los migrantes en México se han convertido en acciones sistemáticas y han dejado de ser hechos aislados, por lo que, en el próximo encuentro diplomático entre los cuatro países, pedirán a la administración del presidente Felipe Calderón que indague a fondo el secuestro de 50 centroamericanos en Oaxaca cometido en diciembre.
“Pediremos el abordaje regional del fenómeno migratorio y la necesidad de abrir una fiscalía a nivel federal que investigue los delitos que se cometen contra la comunidad migrante”.
Maldonado Ríos explicó que aunque el gobierno de Guatemala no tiene una cifra exacta de ciudadanos que han sido víctimas de extorsión o secuestro por parte de las bandas del crimen organizado en México, sus consulados poseen cifras similares a las presentadas por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) que tiene registrados 214 secuestros masivos durante 2010 en contra de aproximadamente 10 mil migrantes.
El diplomático señaló que solicitarán que la entidad que se encargue de perseguir los delitos contra migrantes tenga como base a la fiscalía estatal de Chiapas, estado en donde, considera, “se han notado avances muy completos” para disminuir los crímenes contra este grupo vulnerable.
La propuesta de crear una fiscalía especial será discutida la próxima semana durante el encuentro diplomático entre los representantes de las tres naciones centroamericanas y México, donde se presentará el tema como una estrategia de aplicación conjunta.
Relaciones estables
De acuerdo con el viceministro, la relación diplomática con México no se ha visto afectada a raíz de la denuncia que realizaron los gobiernos de El Salvador y Honduras por el secuestro múltiple en Oaxaca en diciembre.
En esa ocasión el gobierno mexicano informó que las versiones sobre el presunto asalto y secuestro de 50 migrantes carecían de sustento.
“No hay tensión diplomática, Guatemala protestó por derecho legítimo y el haberlo hecho en conjunto con El Salvador y Honduras lo validan”, afirmó el diplomático.
Agregó que su país siempre ha sido respetuoso de las formas diplomáticas y que se ha expresado en los mejores términos sobre la situación, por lo que la visita que las cancillerías de los tres países planean hacer a México será para reiterar sus peticiones.
El viceministro reconoció los esfuerzos del Instituto Nacional de Migración (INM) y las policías estatales y municipales en la defensa migratoria, pero agregó que la corrupción sigue latente en los niveles medios y altos de esta institución, por lo que la tarea en pro de quienes cruzan el territorio nacional es difícil.
Para Guatemala, dijo, es importante reforzar la presencia de los agentes policiacos en las zonas de mayor riesgo, pero insistió en la exigencia que su país ha emitido para que el INM deje de realizar sus operativos nocturnos en la ruta migratoria hacia Estados Unidos.
“Hemos sido tajantes al rechazar cualquier operativo que realice el INM en horario nocturno y que tiende a estar en contra de la comunidad de migrantes”, reiteró Maldonado.
Consideró que el panorama migratorio en México es complicado y se ha agravado. “Los migrantes tienen un amplio abanico de riesgos y en los últimos cinco o seis años el crimen organizado los ha tenido como objetivo”.
El viceministro advirtió que los crímenes contra centroamericanos en México los afectan a ellos y a la sociedad mexicana, por lo que confió en lograr acuerdos conjuntos.
Fernando Rodríguez, El Universal, 8 de enero.
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