El Presidente Felipe Calderón afirmó ayer que no hay justificación alguna para violar los derechos humanos a la hora de procurar la seguridad de la población.
Calderón atestiguó en Los Pinos la presentación del primer informe de actividades del ombudsman Raúl Plascencia al frente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Luego de que el portavoz gubernamental en materia de seguridad, Alejandro Poiré, chocara con la Comisión por las cifras sobre los migrantes centroamericanos, fue notorio cómo el Ejecutivo acogió el Informe que presentó Plascencia, a quien de hecho le formuló "un reconocimiento muy especial" por su desempeño al frente del organismo.
"Es indispensable esta información, que estoy seguro está contenida en el Informe, porque es información crítica, es información clara sobre el estado de los derechos humanos en el País.
"Eso permitirá, además de darle la difusión que la defensa de los derechos humanos necesita, permite también al Gobierno federal que podamos actuar con urgencia y con determinación en todas aquellas áreas o dependencias en donde es más necesario fortalecer, precisamente, la política de protección de derechos humanos", externó el primer Mandatario.
Ante su esposa Margarita Zavala y titulares de comisiones estatales de derechos humanos, el Jefe del Ejecutivo salió al paso de las quejas que en contra de elementos de las Fuerzas Armadas por presuntos abusos cometidos en la batalla contra el crimen organizado.
"No existe justificación para que, al cumplir con la obligación de garantizar la seguridad pública se violen los derechos humanos", sostuvo.
"Somos los primeros en reconocer esta realidad, esta premisa fundamental, como única fuente de autoridad, de credibilidad, de legitimidad y de fuerza moral para aplicar la ley; es precisamente hacerlo en el marco de la ley; es hacerlo en el marco de la protección de los derechos humanos", agregó.
El Presidente Calderón insistió en la tesis que ha manejado durante meses: el principal obstáculo para que los ciudadanos puedan disfrutar y ejercer sus derechos es la acción de los grupos criminales.
"Debemos reconocer también que la demanda ciudadana de protección ante quienes pretenden atentar contra los mexicanos, requiere de atención urgente y que no ha sido todavía resuelta", expuso.
"La responsabilidad de hacer cumplir la ley y de proteger a los ciudadanos es del Estado en su conjunto, es de todos los órdenes de Gobierno, no sólo del Gobierno Federal, y a cada Poder: Ejecutivo, Legislativo y Judicial, toca una parte medular", externó el Ejecutivo.
Calderón atestiguó en Los Pinos la presentación del primer informe de actividades del ombudsman Raúl Plascencia al frente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Luego de que el portavoz gubernamental en materia de seguridad, Alejandro Poiré, chocara con la Comisión por las cifras sobre los migrantes centroamericanos, fue notorio cómo el Ejecutivo acogió el Informe que presentó Plascencia, a quien de hecho le formuló "un reconocimiento muy especial" por su desempeño al frente del organismo.
"Es indispensable esta información, que estoy seguro está contenida en el Informe, porque es información crítica, es información clara sobre el estado de los derechos humanos en el País.
"Eso permitirá, además de darle la difusión que la defensa de los derechos humanos necesita, permite también al Gobierno federal que podamos actuar con urgencia y con determinación en todas aquellas áreas o dependencias en donde es más necesario fortalecer, precisamente, la política de protección de derechos humanos", externó el primer Mandatario.
Ante su esposa Margarita Zavala y titulares de comisiones estatales de derechos humanos, el Jefe del Ejecutivo salió al paso de las quejas que en contra de elementos de las Fuerzas Armadas por presuntos abusos cometidos en la batalla contra el crimen organizado.
"No existe justificación para que, al cumplir con la obligación de garantizar la seguridad pública se violen los derechos humanos", sostuvo.
"Somos los primeros en reconocer esta realidad, esta premisa fundamental, como única fuente de autoridad, de credibilidad, de legitimidad y de fuerza moral para aplicar la ley; es precisamente hacerlo en el marco de la ley; es hacerlo en el marco de la protección de los derechos humanos", agregó.
El Presidente Calderón insistió en la tesis que ha manejado durante meses: el principal obstáculo para que los ciudadanos puedan disfrutar y ejercer sus derechos es la acción de los grupos criminales.
"Debemos reconocer también que la demanda ciudadana de protección ante quienes pretenden atentar contra los mexicanos, requiere de atención urgente y que no ha sido todavía resuelta", expuso.
"La responsabilidad de hacer cumplir la ley y de proteger a los ciudadanos es del Estado en su conjunto, es de todos los órdenes de Gobierno, no sólo del Gobierno Federal, y a cada Poder: Ejecutivo, Legislativo y Judicial, toca una parte medular", externó el Ejecutivo.
Mayolo López, Reforma, 9 de febrero.
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