La absolución de Posada Carriles, una “desvergüenza”: cancillería cubana

La Habana, 10 de abril. La absolución del ex integrante de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos Luis Posada Carriles el viernes último en El Paso, es una “desvergüenza” y contradice “la política antiterrorista que dice profesar” el gobierno de Washington, declaró la cancillería cubana.

La reacción oficial al veredicto del jurado consideró el proceso una “farsa” y afirmó que el resultado es una muestra “adicional del apoyo y amparo que históricamente le han brindado las autoridades estadunidenses” a Posada Carriles.

“Cuba reitera que el gobierno de Estados Unidos es el responsable principal de este desenlace y lo emplaza a que asuma sus obligaciones en la lucha contra el terrorismo, sin hipocresías ni dobles raseros”, subrayó la cancillería.

En La Habana se seguía muy de cerca el proceso contra Posada, juzgado en Venezuela en 1976 por haber instigado el sabotaje a un avión civil cubano, en el que murieron sus 73 ocupantes y sentenciado en Panamá por intentar en 2000 el asesinato del entonces presidente Fidel Castro en ese país. Él mismo confesó públicamente, además, en una entrevista con The New York Times, que organizó los atentados contra objetivos turísticos en Cuba en 1997, en uno de los cuales murió un italiano.

“El gobierno de Estados Unidos conoce bien la participación de Posada Carriles” en esos casos, subrayó la cancillería. Ese historial sólo apareció parcialmente en el juicio, como parte de los alegatos, pero fue la primera ocasión en la que el acusado tuvo que responder por los hechos de 1997.

Posada, de 83 años, estaba acusado de 11 cargos de perjurio, obstrucción a la justicia y fraude migratorio, lo cual “es un insulto al pueblo de Cuba y a las familias enlutadas” por sus acciones, señaló la cancillería.

El comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores apuntó que Estados Unidos aún puede juzgar a Posada por terrorismo o extraditarlo a Venezuela, según la petición del gobierno de Caracas de hace más de cinco años, con base en el expediente de 1976.

Los cargos se basaban en que Posada mintió ante las autoridades migratorias al entrar ilegalmente en Estados Unidos en 2005, a donde llegó tras obtener el indulto en Panamá.

“Lo más paradójico es que, mientras se exonera a Posada Carriles, cinco luchadores antiterroristas cubanos permanecen injustamente en cárceles estadunidenses por buscar información sobre las acciones de los terroristas de origen cubano que, como Posada Carriles, se pasean libre e impunemente por las calles de Miami”, agregó la cancillería, en alusión a los agentes de la isla detenidos en 1998.

Ileana Alfonso, hija de una de las víctimas del sabotaje al avión en 1976, dijo que el fallo “es indignante” y en referencia a Estados Unidos añadió: “Dicen que son portadores de los derechos humanos. Al contrario, son los terroristas más grandes que tiene la humanidad, lo están demostrando”.

Gerardo Arreola, La Jornada, 11 de abril.