Debaten sobre corrupción

El priista Eruviel Ávila evitó confrontarse en prácticamente todo el segundo debate entre candidatos a la Gubernatura del Estado de México.

Durante el 95 por ciento del tiempo que tuvo para hacer llegar su mensaje, el candidato de la coalición "Unidos por ti" repitió el discurso de sus más de 70 actos de campaña.

En resumen, se apartó del debate e ignoró los cuestionamientos y ataques que le propinaron sus contendientes.

A pesar de la petición de la moderadora Adriana Pérez Cañedo de explicar cómo concretar sus propuestas, el priista enlistó las acciones que ejecutará en caso de llegar a la gubernatura.

Mientras sus contrincantes criticaban la gestión de Enrique Peña Nieto, el priista mantuvo la mirada baja y en algunos momentos sonrió, cumpliendo su autodefinición: "el candidato de las propuestas".

Fue casi al final del debate, cuando Ávila reviró los ataques de sus contendientes, quienes le cuestionaron la falta de creatividad en su propuesta del transporte rosa, la construcción del sistema de metro para la zona oriente y la propuesta de medicinas y pensión alimenticia.

Encinas le reprochó que se trataban de propuesta que desde hace 15 años ejecuta el PRD en la Ciudad de México.

"Más que señalar yo creo que debemos construir, debemos aportar y con respecto al transporte rosa, efectivamente, desde que inicie mi campaña a las cero horas, el 16 de mayo, referí que había una legislación en la materia, nada más que era necesario hacerla vigente, hacerla cumplir para que las mujeres tengan un transporte insisto cómodo", reviró Eruviel.

Al panista Luis Felipe Bravo Mena le contestó cuando criticó los altos niveles de inseguridad y pobreza en Ecatepec, municipio que ha gobernado en dos ocasiones.

"Ecatepec es el Municipio más poblado del País, somos el número uno en muchas cosas, somos el Municipio con más lecherías, somos el Municipio con más escuelas primarias, con más universidades, con más desayunadores escolares", defendió.

En esta ocasión, al priista le faltó color, pues salió sin las chapas coloreadas que lo destacaron en el primer debate.





Ataca Encinas al puntero

Tania Hernández

El perredista Alejandro Encinas sabe quién es el candidato a vencer y, durante su participación en el segundo debate organizado por el IEEM, enfocó sus baterías contra el priista Eruviel Ávila.

La mayor parte del tiempo ignoró al panista Luis Felipe Bravo Mena, y ni siquiera atendió la acusación de ser responsable de haber echado abajo la alianza de Oposición para la elección en curso.

Encinas llamó lo mismo a panistas que a priistas para emitir un voto útil en su favor.

En ese momento fue interrumpido por Bravo Mena: "Tú impediste que se unieran las fuerzas (de Oposición) para cambiar las cosas en el Estado de México".

"Es una convicción personal; no se deben mezclar el agua y el aceite, representamos proyectos tan distintos que el electorado merece respeto", respondió Encinas a su contrincante del blanquiazul.

Desde el principio Encinas se fue directo contra el PRI, y pasó por alto la alusión de que el Distrito Federal, gobernador por su partido, es uno de los últimos lugares en competitividad a nivel nacional.

Ataviado con traje oscuro y corbata amarilla, el perredista habló directo a la audiencia y sólo sacó en una ocasión sus lentes, omitiendo leer cifras o citas de discurso contra sus adversarios, como lo hizo en el primer debate.

En reiteradas ocasiones acusó al priista Eruviel Ávila de copiar las propuestas que el PRD ha implementado en el Distrito Federal, como la ampliación de líneas del metro y la implementación de una política social dedicada a los grupos vulnerables como las mujeres y los adultos mayores.

El abanderado de la alianza PRD, PT y Convergencia subrayó que la corrupción que ha solapado el PRI ha hecho que no se pueda controlar a los miembros del transporte público en esa entidad.

"En este debate sólo se han confrontado dos proyectos absolutamente distintos y contrapuestos, el de la continuidad, el que ha llevado a la pobreza y a la marginación a la inmensa mayoría de los mexiquenses, y aquel proyecto que nosotros representamos", señaló Encinas, enfatizando quién es su adversario a seguir.




Acusa Bravo deshonestidad

Arturo Espinosa

El panista Luis Felipe Bravo Mena privilegió el diagnóstico frente a las propuestas, durante el segundo debate organizado por el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM).

Siempre con el rictus severo, voz firme y ademanes estudiados, el panista resumió que todos los males de la entidad se deben a la corrupción.

"El Estado de México ha perdido la capacidad para atraer y retener la inversión y la razón es porque en índice de competitividad estamos en el número 28 y afecta al Desarrollo Económico, somos el segundo lugar en corrupción y hay que actuar en esta materia", dijo en su primera intervención.

Cuando se decidió por las propuestas, sus planteamientos fueron generales: economía con "rostro humano", protección de derechos humanos, mejores salarios, apertura de negocios y cero tolerancia a la corrupción, además de apoyar a las mujeres y jóvenes.

En el bloque de Desarrollo Sustentable, Bravo Mena mantuvo la misma orientación: el problema del medio ambiente es por la corrupción que permite la tala de los bosques y el crecimiento de la mancha urbana.

Su estrategia lo acercó por momentos a las propuestas de Alejandro Encinas: uno de los problemas del transporte público es el manejo político que se le ha dado y la necesidad de recomponerlo.

"Ellos (los transportistas) manifiestan disposición, pero me han dicho que son las mismas autoridades las que los ponen a pelear", dijo el panista.

Sobre el manejo de los programas sociales, Bravo Mena dijo que éstos se han empleado de forma electorera y sus objetivos han fallado.

Su guiño más específico hacia las minorías fue cuando propuso que el 7 por ciento de las plazas de su eventual administración corresponderían a personas con alguna discapacidad.

Vestido con traje negro y una corbata azul cielo, el panista nunca empleó los 2 minutos y medio que tenía para cada una de sus intervenciones.

Y rondando el fantasma de la declinación en torno a su candidatura, interrumpió a Encinas, casi al final del debate, quien pedía a los panistas no desperdiciar su voto.

"Alejandro, tú no tienes autoridad moral porque eres enviado de Andrés Manuel (López Obrador)", atajó.

Sandra García, Arturo Espinosa y Tania Hernández, Reforma, 23 de junio.

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