Ventilan candidatos pasado incómodo

TOLUCA.- El primer debate por la gubernatura del Estado de México resultó un intercambio de acusaciones entre los tres candidatos al cargo.

Mientras el priista Eruviel Ávila intentó mantenerse al margen de las acusaciones, el panista Luis Felipe Bravo Mena y el perredista Alejandro Encinas intercambiaron acusaciones por sus vínculos políticos.

Al priista se le cuestionó su relación con el ex Gobernador Arturo Montiel, al panista su filiación con "El Yunque" y al perredista su subordinación al ex candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador.

El encuentro se llevó a cabo en las instalaciones del IEEM, en Toluca, siendo Encinas quien se propuso lanzar el mayor número de estocadas a sus contrincantes, pues denunció el desvío de mil 500 millones de pesos del Gobierno de Enrique Peña Nieto al SNTE, durante 2009.

En el segundo bloque, enfocado a la democracia, el blanquiazul Bravo Mena arreció el ataque contra Encinas, al cuestionar que sigue las instrucciones de López Obrador y al tolerar que Julio Cesar Godoy asumiera el cargo como diputado a pesar de estar vinculado con la organización delictiva de "La Familia Michoacana".

Encinas reiteró su amistad con López Obrador y se deslindó del caso Godoy con el argumento de que el michoacano logró ocupar su curul al amparo de la resolución de un juez federal; en el revire, el perredista parafraseó al extinto panista Carlos Castillo Peraza para aplacar los argumentos de Bravo.

"Apostar al miedo es el único argumento que le queda a quienes no pueden resistir la memoria del pasado, ni son creíbles cuando hablan del futuro, es el recurso del que se sabe derrotado", remató Encinas.


CONTRA PRIISTAS

Con la artillería desplegada, el perredista apuntó al priista Eruviel Ávila, al retomar un discurso que éste dedicó al ex Gobernador Arturo Montiel el 6 agosto de 2005, cuando rindió su segundo informe como Alcalde de Ecatepec.

"Montiel fue siempre como el árbol fuerte y frondoso, al que acudimos para protegernos bajo su sombra del inclemente sol; Arturo Montiel brilla con luz propia y con gran intensidad, pero en su sencillez, en lugar de elevarse e iluminarnos desde lejos como una estrella, prefirió convertirse en antorcha y quedarse entre nosotros", leyó el perredista.

Ávila, como en la mayor parte del encuentro, rehuyó las estocadas de sus contrincantes.

"Ante un ataque, una propuesta, porque yo soy el candidato de las propuestas, yo soy el candidato que quiere mejorar, continuar con este desarrollo que tenemos en el Estado de México.

"Por eso desde ahorita como candidato seguiré llevando a cabo estas asambleas para que la gente decida qué obras necesita", aseveró.

Bravo también apuntó contra Ávila al argumentar que en Ecatepec prometió agua para todos.

El priista nuevamente evadió el ataque al argumentar que en dicho municipio hay retos como en todo el País.

Los dardos no sólo iban dirigidos hacia el priista, pues Encinas enunció la relación de Bravo con la organización denominada "El Yunque", aunque éste dijo no saber de lo que le hablaban.

En la parte final del debate, Ávila reviró algunas de las críticas lanzadas por Encinas, al recordarle al perredista que había llegado a la jefatura del Distrito Federal gracias a López Obrador, le mostró las encuestas donde su gestión fue reprobada.

Quizá el único acuerdo entre los candidatos fue que estarían dispuestos a realizarse una prueba de antidoping y transparentar sus cuentas bancarias.

Éste fue el primer debate organizado por el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM) en una elección de Gobernador.

El próximo encuentro será el 22 de junio.



Enrique I. Gómez, Reforma, 9 de junio.

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