Desaprueban PRI y el CEESP el paquete económico 2012

La cúpula del PRI y 16 de 19 gobernadores calificaron anoche el proyecto de presupuesto para el 2012 como un paquete de “centralismo asfixiante”, por lo cual acordaron cerrar filas para luchar de manera coordinada por más recursos para los estados, sin que ello signifique caer en “la trampa económica” de la Secretaría de Hacienda de cobrar más impuestos. Y es que el paquete presupuestal plantea que los estados puedan aplicar un gravamen a las ventas con una tasa máxima de 5 por ciento como una manera de obtener más recursos, pero anoche los priistas atajaron y advirtieron que ellos no promoverán más impuestos para el 2012 como propone la Secretaría de Hacienda. “El paquete del señor Presidente es el más centralista de los últimos cinco años, es el único paquete que en término reales, muy por debajo del crecimiento estimado para este año, le quita recursos a estados y municipios. Y acudiendo a aquel viejo adagio de ‘hágase la voluntad de los bueyes de mi compadre…’, le traslada la carga de que cobren impuestos las entidades federativas sin enfrentar las propias”, acusó el tricolor a través de su vocero, David Penchynna. Después de una reunión de más de tres horas, los mandatarios priistas, los coordinadores parlamentarios y la dirigencia nacional del tricolor desmenuzaron el paquete presupuestal y no descartaron la posibilidad de impulsar la modificación a la Ley de Coordinación Fiscal para obtener más recursos hacia los estados y municipios, aunque precisaron que no es la única forma de hacerlo. Lo que sí descartaron es la posibilidad de que los estados cobren más impuestos como una forma de enfrentar la reducción en las participaciones federales que plantea el paquete presupuestal para el 2012. “Sería torpe aprobar una medida de ésas”, dijo Penchynna, al referirse al impuesto a ventas de hasta cinco por ciento que podrían cobrar los estados. El vocero tricolor manifestó la preocupación de su partido porque se intenta “denigrar a las entidades federativas, como si se trataran de otro país”, pero aseguró que no permitirán que se imponga ese “centralismo asfixiante” que intenta el Ejecutivo. “Es la última herencia maldita de Cordero”, dijo Penchynna en referencia al ex secretario de Hacienda, y aseveró que el tricolor buscará bajar el gasto corriente del gobierno federal para compensar recursos y canalizarlos a infraestructura carretera y desarrollo social. Alejandro Páez, La Crónica, 12 de septiembre.