No hay blindaje contra choques externos: IMEF

La economía mexicana no está blindada contra choques externos dada su alta vulnerabilidad y gran dependencia con Estados Unidos, situación que por fortuna no sucede en el sistema financiero que opera en el país, afirmó el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF). Y sobre la reciente depreciación del peso frente al dólar, el instituto refiere que se trata de un evento coyuntural, temporal, que sólo evidencia el incremento de la aversión al riesgo, por lo que en fechas próximas puede regresar a niveles de 12 pesos por dólar. Sobre el tema, la encuesta con analistas financieros elaborada por Banamex pronostica que el tipo de cambio para el cierre de este año se ha modificado, al pasar de 11.90 a 12.05 pesos por dólar, mientras que para 2012 se espera que la paridad llegue a los 12.35 pesos por billete verde. El presidente nacional del IMEF, Enrique Flores, expuso que México es incapaz de encontrar alternativas de crecimiento económico más allá de sus exportaciones, además de que continúa sin fortalecer su mercado interno. Si bien no se espera un escenario tan drástico como en 2009, cuando se contrajo el producto interno bruto (PIB) del país 6 por ciento, lo que se percibe es que México es una de las naciones que tendrán las tasas de decrecimiento más pronunciadas en el mundo. El IMEF corrigió sus expectativas de crecimiento del PIB de México de 4.1 por ciento de agosto a 3.8 por ciento en el presente mes, lo que significa una menor generación de empleos, los cuales sumarán apenas 600 mil plazas formales. El consejero nacional del instituto, Ernesto O’Farril, comentó que la dependencia comercial de México con Estados Unidos se ha hecho más evidente a la luz de los problemas que enfrenta esa nación. Proyecto sin novedades El presidente del Comité técnico nacional de estudios fiscales del IMEF, Enrique Ramírez, reconoció que el paquete económico 2012 que envió el Ejecutivo al Congreso de la Unión no presentó mayores novedades y respondió a las necesidades de un presupuesto conservador y prudente. El experto dijo que en materia fiscal, la Ley de Ingresos no trae ningún cambio significativo, la cual se queda lejos de las necesidades del país. “El Ejecutivo debió presentar una propuesta, haya sido o no viable para aprobación; estamos condenados este y el siguiente año a vivir con el mismo sistema fiscal”, argumentó. Ramírez explicó que después de reunirse con el subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, José Antonio González Anaya, el gobierno dejó claro que los buenos datos macroeconómicos de México deben aprovecharse para sacar ventaja. Por ello, el proyecto que se envió mantuvo la prudencia fiscal, principalmente con un déficit público moderado, el cual puede ser bien visto por el mundo y dejar al país como un lugar atractivo para la inversión. México • Alberto Verdusco, Milenio, 21 de septiembre.