Pide ahora Fox 'cese al fuego' contra el narco

WASHINGTON.- El ex Presidente Vicente Fox reiteró ayer en Washington que el Gobierno de México no debe negociar con los cárteles del narcotráfico, pero insistió en que puede buscar un "cese al fuego" para disminuir los altos niveles de violencia que viven algunas regiones del País. En un evento del Cato Institute sobre legalización de drogas, Fox dijo que eso puede lograrse siguiendo el ejemplo de lo ocurrido en 1995, cuando la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) dialogó con el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en Chiapas. "Negociar no es la palabra correcta, lo que sí se puede buscar un cese al fuego", dijo Fox, quien evadió una pregunta del auditorio sobre si el regreso del PRI a la Presidencia de México pudiera implicar un pacto con el narco. "Un cese al fuego es totalmente diferente a negociar. Estoy reiterando que lo que ocurrió en Chiapas fue obtener un cese al fuego sin negociar, sin ceder territorio, sin violar la Constitución o sin violar la ley", aseguró Fox en inglés. Insistió en que su llamado al "cese al fuego" y al diálogo con los cárteles no debe sorprender a nadie, pues en 1995 se negoció con el subcomandante Marcos, líder del EZLN, quien -aseguró- era un criminal. "Esto sucedió en el caso de Chiapas cuando se formó la Cocopa... aprobado en nuestras leyes, y se sentaron a hablar con un criminal, con el subcomandante Marcos. "Y a través de ese diálogo en tres meses lo que fue la idea de Marcos de derrocar un Gobierno, se convirtió en un movimiento social para representar a los indígenas. Entonces, hay modos. "Entonces no hay que romper la ley, no hay que dividir el territorio y sin embargo se puede avanzar con esas ideas. Lo que hay que buscar es cómo le bajamos (a la violencia), cómo (logramos) un cese al fuego. Nada más. No hay que negociar nada", dijo Fox. Cuestionado en torno a si criminales como Joaquín "El Chapo" Guzmán podrían participar en la mesa de diálogo, Fox contestó: "¡Claro!", pero dijo que él no formaría parte. "Yo no, porque yo soy un vulgar ciudadano", acotó. Fox puso también como ejemplo la propuesta del ex Presidente colombiano Alfonso López Michelsen, quien en 1984 ofreció amnistía a los narcotraficantes, no extraditarlos a Estados Unidos y respetar sus bienes y dinero a cambio de que abandonaran el negocio de la droga. "Claro, al final puede terminar como terminó la Cocopa, con una amnistía, como ofreció el Presidente Michelsen en Colombia. Él al final ofreció respetar los bienes de los cárteles si se sometían a la justicia. Puedes llegar a terminar con eso, con una amnistía de algún tipo", puntualizó el ex Mandatario. La ponencia de Fox en el Cato Institute estuvo centrada en demandar el fin a la política de prohibición al consumo y comercio de las drogas ilegales, por considerar que sólo causa estragos en países como México. Cuestionado sobre qué hizo durante su administración contra la violencia del narco, Fox aseguró que dicho problema tenía una dimensión menor. "Todas las estadísticas y datos están ahí: no teníamos el problema que tenemos hoy, y en mi mandato reducimos el número de homicidios por cada 100 mil habitantes. Hoy creció fuera de control. Entonces es una situación completamente diferente", dijo. Interrogado por un miembro del auditorio sobre por qué no había impulsado una política de legalización, Fox reconoció haber cambiado de opinión una vez dejado el puesto de Presidente de México en 2006, lo que atribuyó, entre otras cosas, a la edad. José Díaz Briseño corresponsal, Reforma, 19 de octubre.