“En México no estamos en guerra”, respondió el gobierno federal al organismo

“En México no estamos en guerra”, respondió ayer el gobierno federal al organismo internacional Human RightsWatch, que reprobó su lucha contra el crimen organizado y sostuvo que en el país el combate a la delincuencia se realiza “con estricto apego y observancia a los derechos humanos”. En un mensaje conjunto de las secretarías de Gobernación y de Relaciones Exteriores, la Federación resaltó su lucha en favor de los derechos humanos, que ha materializado en leyes, y resaltó que los casos de violaciones en esta materia por parte de elementos del Estado, es castigado conforme a las leyes vigentes. El subsecretario de Asuntos Jurídicos de la Secretaría de Gobernación, Felipe de Jesús Zamora, acompañado por el subsecretario de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la cancillería, Juan Manuel Gómez Robledo, leyó el comunicado luego de que HRW divulgó su informe en el que asienta que la política de seguridad del presidente Felipe Calderón “ha fracasado”. Pero no sólo eso, advirtió el organismo, sino que esa “guerra ha generado un incremento drástico de violaciones a los derechos humanos”. Zamora Castro afirmó que el combate a la criminalidad que encabeza el gobierno federal tiene como fin restablecer el Estado de Derecho que garantiza los derechos y libertades de todos. Subrayó que el Estado mexicano ha asumido “un compromiso sin precedentes en materia de derechos humanos”, lo mismo que “una total apertura a la observación y recomendaciones de organismos nacionales e internacionales defensores y promotores de los derechos humanos”. En la sede de la Secretaría de Gobernación, en una lectura del comunicado que le llevó apenas siete minutos, el funcionario de esa dependencia fijó la postura del gobierno federal y aclaró que “México no está en guerra”, sino que se trata de “un combate a la criminalidad”. Dicho “combate”, aseguró, “se realiza con estricta observancia a la ley, allí donde los derechos y libertades de los mexicanos han sido perturbados y atropellados por la violencia delincuencial”. “Por eso estamos haciendo todo lo necesario para llevar ante la justicia a los criminales que torturan, que secuestran, que asesinan y que corrompen a nuestras instituciones”, agregó. Reiteró que la participación de las Fuerzas Federales para restablecer la seguridad y el orden se ha dado a petición de las autoridades locales y se trata, explicó, de una colaboración “temporal y subsidiaria”, hasta que las autoridades e instituciones locales restablezcan sus capacidades para cumplir con la responsabilidad que tienen. En este sentido, puntualizó, el gobierno fortalece los mecanismos de justicia e investigación en los casos de violaciones de derechos humanos en que participan elementos del Estado, para lo cual se impulsaron reformas legislativas ordenadas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, particularmente la Reforma al Código de Justicia Militar, finalizó. Luciano Franco, La Crónica, 10 de noviembre.