Atacar al narco, “un desastre para todo el país”


Minados, intimidados, amenazados. A este orgulloso chihuahuense, rostro visible del Movimiento por la Paz, el miedo no lo doblega. Ni lo callará:
¿Para ser mormón hay que leer La Biblia?
Todas las personas buenas, como yo lo entiendo, son mormonas en todo el mundo.
¿Usted ya la leyó?
Sí. Tal vez no toda, pero sí.
Es una lectura que sí le transformó la vida.
Pues mi filósofo favorito es indudablemente Jesucristo.
Por cierto, ¿en qué pasaje de las sagradas escrituras se aprende cómo llegar a ser Presidente?
Creo que si se leen las sagradas escrituras no se llega fácil a ser Presidente, menos en México.
¿Y a respetar a la prole?
¿A la prole?, estoy en contra del abuso de cualquier tipo de violencia.
¿Usted cuántos hijos tiene, don Julián?
Tengo 11.
¿Y a todos les ha inculcado la tolerancia o apenas piensa hacerlo?
El ejemplo es la mejor forma de educar a las personas, es la única manera. Yo espero que mi ejemplo sea el que eduque.
Un político que no ha sabido inculcar esos valores en familia, ¿cómo cree que pueda gobernar un país?
Creo que nosotros tenemos autoridad natural sobre nuestros hijos, pero si se abusa de esa autoridad, no es legítima.
Se lo pregunto directo, ¿es confiable Peña Nieto?
No lo conozco. Creo que el poder que hemos entregado a nuestros políticos es un poder criminal y ese poder, en manos del que sea, hace mucho daño.
¿Tendría madera Peña Nieto para negociar con el crimen?
Yo creo que es una autoridad criminal, vuelvo a lo mismo.
¿No es una de las propuestas del movimiento: pactar con el crimen?
Creo que el narcotráfico y el crimen son dos cosas distintas. Hay veces que están en la misma persona, como también tenemos gobernantes que son criminales.
¿De eso habló con AMLO?
Bueno, más bien tuvimos una conversación de su proyecto de Morena y me habló de la posibilidad de participar en la política.
¿Y qué le propuso?, ¿una senaduría?
Sí, ser un senador. Respeto mucho a las personas, pero mi lucha es con las malas ideas.
¿El Peje sí podría negociar con el crimen?
Creo que, como lo dijo —creo que fue Porfirio Díaz—, que nadie resiste un cañonazo de no sé cuánto dinero. Creo que todos somos corrompibles.
Difícil para un mormón darle su voto a una mujer, ¿no?
Quiero decirte que los mormones fueron los que dieron el sufragio a las mujeres antes que cualquiera en los Estados Unidos.
¿A Josefina la ve como Presidenta?
Yo quisiera ver que fuéramos 112 millones de presidentes, legisladores y todo eso. Porque no creo en centrar en las manos de una sola persona el poder.
A ver, tiene a Peña Nieto frente a sí, ¿qué le dice?
¿Usted cree que tiene autoridad legítima para quitarme a mí o a otras personas los frutos de sus esfuerzos sin su consentimiento?
Ahora tiene AMLO, ¿qué le dice?
Exactamente la misma pregunta.
¿Y a Josefina?
Lo mismo. Y si dicen que sí, mi respuesta es que están jodidos.
¿A Cordero?
Le pregunto: ¿qué vamos a hacer con 6 mil pesos? Es un principio criminal y por eso hay tanta pobreza.
¿Se están burlando de nosotros?
Lo seguirán haciendo. Pero la dignidad es un poder muy contagioso y muy poderoso. Y yo tengo la esperanza de que México va tirar el miedo a un lado y va a decir: ‘de este día en adelante yo soy soberano de mi existencia’.
Hay que seguir levantando la voz.
Por eso estoy aquí precisamente. Porque yo tengo una filosofía de ética, de no coerción y de libertad, que me gustaría se sembrara cuando menos en los corazones de unos cuantos.
Vámonos a Chihuahua, ¿es verdad que ahí saben dónde se encuentran los criminales?
La sociedad misma, de cierta manera, ha hecho aceptable el narcotráfico por muchas décadas, porque nuestra economía formal no permite que las personas prosperen.
¿César Duarte qué ha hecho por Chihuahua?
Pues sé que es el gobernador…y que tiene pancartas en cada kilómetro en las carreteras.
¿Debemos armarnos?
Creo que un individuo tiene precisamente el mismo derecho, de estar armado, con las mismas armas que las que cuidan al Presidente.
Sigamos hablando directo y del Presidente, ¿qué ha hecho Calderón con este país?
Es un hombre de familia y tiene mi admiración de cierta forma, pero creo que su decisión de atacar el narcotráfico ha sido un desastre para el todo el país.
Acaba de decir que capturó a 21 de los 37 criminales.
Yo siento que de cada uno que agarramos, brotan cinco. La pobreza que existe en México por las políticas económicas es algo que genera criminales y más inseguridad. La raíz del problema es que los ciudadanos somos tratados como si fuéramos ganado por parte de nuestros gobernantes.
¿Es una burla, entonces, la nueva Procuraduría?
Sí. Es atacar efectos y yo quiero participar donde están las causas.
¿En verdad, don Julián, ha sido un error meterse con los criminales?
Declararle la guerra sin considerar la razón por la cual el narcotráfico existe es poner en peligro a toda la gente inocente.
¿No se estará volviendo el mejor defensor del narcotráfico?
Estoy en contra del crimen. Y no creo que el narcotráfico sea un crimen. Lo hemos criminalizado, pero no veo la diferencia moral entre el que hace tequila, el que tiene una licorería, el que fuma cigarros.
¿Y ha fumado mariguana?
Nunca he fumado ni siquiera un cigarro, jamás.
¿El dolor que siente usted lo sentirá Calderón?
Pues yo no puedo hablar por él, pero espero que sí.
¿En verdad cree que somos más fuertes unidos?
Eso tenemos que hacer: unirnos. Que no decida por nosotros alguien que no nos representa.
Nepomuceno, Julia Marichal… ¿están intimidando al movimiento?
No lo sé si ése es el propósito que tienen. Pero nosotros tenemos que dejar de someternos a las cosas que nos asustan. Si usamos el miedo como forma de gobernar nuestras vidas, pues la vida no tiene valor viviendo constantemente en el temor.
¿Y cómo se vive en el temor?
Se vive total y absolutamente limitado en todas las formas de la expresión de la vida.
De Nepomuceno se dijo que quizá estaba metido con el crimen, ¿es correcto?
Creo que la autoridad que hace ese tipo de declaraciones es una autoridad criminal que no entiende su responsabilidad. Es muy irresponsable decir ese tipo de cosas.
Y sobre todo cuando ya murió, ¿no?
Siento que es el crimen más corriente que pueden hacer los políticos.
El movimiento vive amenazado, ¿usted qué tiene que decir en caso de que saliendo de aquí lo maten?
El poder de la verdad trasciende la vida. Creo que cada miembro de este movimiento que es asesinado hace más poderosas las razones por las cuales vivir.
¿Es usted narcotraficante?
Pues ni siquiera conozco las drogas. Bueno, sí, he visto gente fumando mariguana.
Que no lo acusen, entonces, de estar involucrado.
Pues yo siento que si ladran los perros es que vamos cabalgando…
¿Y la impunidad?, ¿no temería que su crimen quede impune?
En realidad eso no es lo que me interesa. Lo que me interesa es ser un actor y una voz que convoque a la conciencia a todos para no someternos jamás a las cosas que nos humillan como individuos.
Supongo que ha hablado con sus familiares por si le pasara algo
No me preocupo mucho de eso. Yo tengo una familia que nos queremos mucho y siento que mi familia está en muy buenas manos, porque yo sí tengo una comunidad.
¿Hay que tener esperanzas todavía en este país?
Este país puede ser la esperanza del mundo. Porque creo que por primera vez se dan las circunstancias para que los individuos empecemos a cuestionar a la autoridad.
Usted ha dicho que quiere mucho a México.
Es correcto. No sé, lo tengo en la sangre, lo siento.
¿Y los mexicanos amamos a nuestro país?
Yo creo que muy profundamente. Sí, la gran mayoría.
¿Y así se trata a lo que se ama, como tratamos a México?
Ésa es la gran contradicción, creo que nos confundimos, pero esa confusión no significa que haya ausencia de amor.
¿A usted cómo le gusta que lo perciban: como víctima, mártir, héroe?
Ninguno de esos. Uno es víctima cuando se asume como víctima, pero si uno comprende que tiene poder para que las cosas sean muy diferentes y de aceptar su responsabilidad de vivir, pues uno no tiene que ser jamás una víctima.
¿Y ha sentido ese poder?
En mí no lo he visto todavía. Lo he visto en miembros del movimiento, gente que ha perdido totalmente el temor y creo que eso es vivir plenamente.
¿Y eso lo tiene tranquilo?
Pues sí. Está la duda de qué es lo que está más allá, pero creo que es mucho más temeroso vivir como un esclavo.
Fernando del Collado, Milenio, 11 de diciembre.

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