Rechaza el IFE retirar espectaculares del PT

La Comisión de Quejas y Denuncias del Instituto Federal Electoral (IFE) rechazó la solicitud del Partido Revolucionario Institucional de aplicar medidas cautelares para el retiro de los espectaculares de Andrés Manuel López Obrador. El argumento, avalado por la mayoría de la comisión, es que no trasgreden la legislación, pues sólo se trata de propaganda de un precandidato.

El consejero, Alfredo Figueroa, dio a conocer que tras una reunión para analizar la solicitud, la mayoría se pronunció en favor del proyecto que les envió el área ejecutiva. Explicó que en esa propuesta se consideraba que los espectaculares que fueron colocados por el Partido del Trabajo son propaganda permitida a un precandidato.

Sin embargo, los consejeros que aprobaron el proyecto consideraron añadir un agregado en el que se plantea que la negativa a aplicar las medidas cautelares y retirar los siete anuncios que fueron denunciados toma en cuenta los criterios adoptados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y los que el propio Consejo General del IFE incluyó en su respuesta a López Obrador en la solicitud de aclaración de los alcances de las precampañas de partidos o coaliciones con precandidatos únicos.

Figueroa precisó que fue el único consejero que se pronunció en favor del retiro de los promocionales, pero perdió la votación. En su opinión los espectaculares son mensajes dirigidos a la población abierta y no a los militantes o las instancias partidistas que validarán la candidatura.

Agregó que en este periodo, la legislación permite promocionarse a los precandidatos, pero no a los partidos políticos, como es el caso de los espectaculares del PT, si bien contienen la figura de López Obrador.

Sin embargo, apuntó, prevalecerá el criterio de la mayoría de los consejeros electorales y no se retirarán los espectaculares. El recurso del PRI seguirá su curso y en su momento se resolverá el fondo de la inconformidadtricolor.

Alonso Urrutia, La Jornada, 6 de enero.