“PAN y PRD han repetido los errores del priismo”

Jesús Murillo Karam asegura que lo preocupante en la política mexicana es la repetición de los mismos errores por otros partidos.

PAN y PRD, dice, han cometido exactamente los mismos y han replicado prácticas que le condenaban al tricolor.

La experiencia dice, debió haber transformado las acciones si eran tan condenables. Adjudica la derrota del PRI a los errores cometidos en el gobierno y al tiempo que se permaneció en éste.

“A mí lo que me preocupa es que si ellos (la oposición) las vieron
desde afuera, ¿por qué las repiten ahora? Yo siempre he dicho que la
manera de gobernar de PRD y PAN se parece mucho a la del PRI en los años 50 y 60”, explica el secretario de procesos internos del tricolor.

Murillo afirma que, “por desgracia”, los dinosaurios ya no existen. Lo dice con cierta sorna y acusa que los partidos de
oposición han adoptado las mismas prácticas priistas por las que se
le criticaba anteriormente, las que ejercían este grupo de políticos
que se ubica en una generación, pero han dejado de lado los aciertos
que tuvieron.

“El PRI tiene una ventaja que otros partidos no tienen: aprendimos de muchas de las cosas, de los errores, y se mejoró lo que estaba mal, además había liderazgo. Hoy muchas de las acusaciones graves que tuvimos en nuestro momento como partido son costumbre de todos los partidos. Aprendimos que era verdaderamente errado, pero también aprendimos cuáles son nuestros aciertos”, explicó.

Hace una pausa en la entrevista y un breve recuento de las transformaciones del partido. Considera que el partido evolucionó y cambió sin comparación posible con los otros.

Murillo ha ocupado cargos públicos y partidistas que van desde la gubernatura de Hidalgo, la secretaría general del PRI en una época de recuperación, y formó parte de la campaña de Francisco Labastida, candidato con el que el PRI perdió su primera elección presidencial.

Para el priista de 64 años de edad, la derrota de 2000 los obligó a encontrar mecanismos para ubicar a sus líderes y dice que esa es una de las virtudes de las que ahora goza el partido.

“No hay un líder político en el PRI que esté encima de nadie. Tuvimos una transición de dirigencia sin sobresaltos. Si me hubieran elegido como presidente, se hubiera pensado que el líder era Peña Nieto. Pero no es así”, explica.

Celebra que el partido exista pese a sus liderazgos. “El PRI existe independientemente de quien lo dirija.

“Esa es la virtud que tiene el partido. Si nos sale un líder malo, perdemos mucho, porque eso creo que hemos aprendido. Por ejemplo, Morena no existiría sin López Obrador En todo el mundo, en todas las organizaciones se hacen elecciones para crear un líder. De eso se trata el juego, el chiste es que el líder no dure para siempre”, detalla.

Como un personaje cercano a Enrique Peña Nieto opina acerca de su candidatura y expresa que su confianza está en que tiene capacidades suficientes para una buena conducción de país, pese a que, dice, se “acentúan” ciertos rubros en la opinión pública.

“Tuvo una buena gestión como gobernante, demostró que sabe lo que necesita y resolverlo. Tiene mayor visión que quien piensa que con seis mil pesos se puede vivir cómodamente... No es muy amoroso, eso sí”, señala, y no puede evitar reírse.

Luego de apariciones públicas que se tuvieron con personajes como Mario Marín y Arturo Montiel, opina acerca de la cercanía con los ex gobernadores y los defiende al asegurar que Enrique Peña Nieto no carga con los ex mandatarios y la gestión de cada uno sólo puede ser juzgada con los hechos.

“El candidato ha sido respetuoso de sus antecesores y capaz de superar lo que en su momento no se le dio y se le tenía que dar. Además, en su gestión nunca gobernó con ellos; los respeta, pero no los carga”.

Miriam Castillo, Milenio, 13 de marzo.