El equilibrista

BAHÍA DE BANDERAS.- Enrique Peña Nieto estuvo ayer a punto de caer.

El candidato que es hoy el centro de la polémica, por los resultados de su gestión en el Estado de México y por el despliegue de aeronaves privadas que utiliza en sus giras de campaña, hizo ayer las veces de un equilibrista.

El aspirante arribó con minutos de retraso a un acto masivo con la estructura del PRI en Nayarit.

Y la plaza en la que fue organizado el encuentro no le gustó.

Apenas al iniciar su discurso, se quejó por el templete que habían instalado para la ocasión, porque quedaba muy bajo y no le permitía tener contacto visual con los miles de priistas que fueron movilizados hasta un llano de la Colonia Valle Dorado.

Fue entonces cuando decidió interrumpir su propio mitin.

"Voy a saludar a los que están en el kiosco. Saludo y vengo aquí de regreso, no se muevan, me tardo cinco minutos", anunció, ante la sorpresa de los presentes, especialmente de su equipo de seguridad.

La decisión implicaba, literalmente, atravesar una multitud para llegar hasta el centro de la plaza que se había puesto como meta.

Entre empujones y jaloneos, su equipo logró llevarlo hasta el kiosco.

Con el cabello y la camisa mojados, Peña Nieto trepó hasta uno de los barandales y desde ahí pronunció su discurso.

De pie sobre la viga metálica, el priista se inclinaba para balancearse.

Los ojos de sus cuatro guardias no lo perdían de vista.

Las manos de los escoltas le apretujaban las pantorrillas, los muslos y, si alcanzaban, por momentos, lo "enganchaban" del cinturón para que no se fuera se bruces sobre la multitud.

"¡No estamos conformes con la situación!", gritaba con el micrófono en mano.

"Peeérame, me recargo en la columna", exclamaba de inmediato para avisar que su permanencia en el "pedestal" se veía amenazada.

"Esta es una gran concentración", elogiaba, visiblemente emocionado.

"¡Aguántame tantito!", insistía cuando su guardias lo sujetaban de más.

Desde ahí arriba, Peña Nieto se lanzó en contra de sus adversarios políticos.

Aunque no mencionó al PAN por su nombre, advirtió que hay intenciones de llevar a México al mismo escenario de polarización que vivió en la contienda presidencial de 2006.

Condenó la campaña en su contra, pero advirtió que seguirá con su idea de firmar todos los compromisos que pretende cumplir.

Al terminar la primera "etapa" de su mitin, el mexiquense decidió regresar al templete oficial, donde prometió terminar con la construcción de la carretera Jala-Compostela-Bahía de Banderas, en Nayarit.

Lo mismo había hecho pasado el mediodía, durante un acto con estructuras del PRI en Puerto Vallarta, en Jalisco, donde prometió la ampliación de la terminal portuaria, para recibir más cruceros, y la construcción de un libramiento para impedir la entrada del transporte pesado a la ciudad.

Y justo ahí, los priistas se animaron a darle consejos a Peña Nieto sobre lo que debe cuidar en los días que le quedan para hacer campaña.

Reunidos en una esquina del Salón Real del Oro, un grupo de taxistas conversaba sobre sus preocupaciones porque los gobiernos del PAN -decían- no les han autorizado los permisos para trabajar, nada más porque están afiliados a la CTM y, por lo tanto, al tricolor.

Todos coincidieron en que el País y Jalisco necesitan un cambio, pero en su conversación salió una voz de alerta sobre lo que puede pasar de aquí al 1 de julio.

"Ojalá que llegue Peña, para que nos den trabajo. Pero que no afloje, que se porte bien, que se ponga listo porque le pueden meter una zancadilla.

"Y portarse bien incluye no andar de chirote, de padrote, pues, de enamorado, porque se le puede caer el 'cantón' con 'La Gaviota', y eso quita puntos", le recomendó Fabián.

Héctor, otro trabajador del volante, corrige a su compañero y advierte que lo más importante para no perder es otra cosa.

"Pues que los compromisos que haga, que los cumpla, porque estamos hartos de promesas", planteó.

 
 
 
Oferta tricolor
 
Compromisos de Peña Nieto firmados en sus mítines en Puerto Vallarta, Jalisco, y Bahía de Banderas, Nayarit:
 
· Terminar con la construcción de la carretera Jala-Compostela-Bahía de Banderas, Nayarit.

· Una alianza del Gobierno federal con la administración estatal.

· Trabajar en proyectos conjuntos entre ambos gobiernos.

· Dar apoyo constante al gobierno local para mejorar la calidad de vida de los nayaritas.

· Ampliar la terminal portuaria en Puerto Vallarta, para recibir más cruceros.

· Construir un libramiento para impedir la entrada del transporte pesado a la ciudad.


Claudia Guerrero, Reforma, 18 de abril.