Confiesan jóvenes no saber por quién votar

Apenas así. Enrique Peña Nieto llegó muy seguro al Hotel St. Regis, donde tendría lugar un encuentro a puerta cerrada con un puñado de universitarios de la iniciativa Proyecto de Nación, organizada por la revista Líderes, Santander y Universia.

El aspirante presidencial venía de su participación por la mañana en la edición 30 del Consejo Político Nacional del PRI. Más tarde diría que se mostró "muy duro" con sus correligionarios de partido al pedirles honestidad y transparencia.

Antes del arribo del candidato al hotel, la seguridad estaba a todo lo que daba. Arcos detectores, dos revisiones de bolsos, seguridad por aquí y por allá.

Ahí, en un escenario, sentaditos lo esperaban alumnos de la Universidad Autónoma del Edomex, del Claustro de Sor Juana, de la Universidad de Guadalajara y de La Salle, entre otras. Peña saludó a los organizadores, que recabaron mil 800 propuestas para los candidatos. Faltan Andrés Manuel López Obrador y Gabriel Quadri. Josefina Vázquez ya fue.

Empezó el evento y la sorpresa fue el mensaje de Julio César Ruiz, de la Universidad Autónoma de Yucatán, quien destacó el papel de la sociedad civil.

"Como yo, muchos otros jóvenes no han decidido por quién votarán, y es que bien lo dice Denise Dresser: 'encontrar la fruta menos podrida es una labor complicada, sobre todo si ya estás hastiado de tanta podredumbre'", señaló.

El priista dio un trago a una botella de agua cuando el chico dijo, con buena dicción y énfasis, que hoy se vive una era en la que nada debe callarse y que la sociedad mexicana se ha puesto en pie.

El joven afirmó que quien gane, tendrá que luchar contra sí mismo, contra sus temores, tentaciones y presiones, y tendrá una vez la oportunidad de ser el líder que México necesita. "Porque hasta de las semillas de la fruta más podrida puede brotar un gran árbol", dijo el chico al parafrasear de nuevo a Dresser, analista política y crítica de Peña.

El priista aplaudió con sonrisa congelada y recibió del muchacho las mil 800 propuestas. Ya en el uso de la palabra, mencionó que la juventud es para él la voz del presente.

Muchos de esos jóvenes dirían, al término, que están de acuerdo con las recientes marchas estudiantiles.

Cuando el priista salía del hotel, una veintena de peatones que se percataron de su presencia le gritaron: "¡fuera!, "¡títere!" y "¡es un honor estar con Obrador!".


Daniel de la Fuente, Reforma, 26 de mayo.

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