Es hora de romper con el pasado: Peña Nieto

Es la hora de romper con el pasado", proclamó ayer el candidato priista a la Presidencia de la República, Enrique Peña Nieto, al señalar que en este PRI "no cabe la corrupción, el encubrimiento ni la impunidad.

"Quien no lo asuma así, quien no esté dispuesto a hacer un compromiso con la libertad y la democracia, no tiene cabida en este proyecto", advirtió.

Orador único en la sesión extraordinaria del Consejo Político Nacional del PRI, Peña Nieto exigió a la militancia y a sus seguidores en todo el país, "transcurrir los 33 días de campaña que restan sin violencia, sin caer en las provocaciones de los adversarios", y garantizó a la ciudadanía que "nosotros no vamos a dividir a México".

En la sede nacional del tricolor, ante 862 consejeros políticos, en un discurso breve, pero uno de los de mayor calado en los 57 días que lleva la campaña, Peña Nieto dijo que "en el PRI, que está a unos días de la victoria, no hay espacio para dudas: Juntos y unidos vamos a cambiar a México.

"Estamos a 37 días de la victoria; he recorrido todo el país, me he reunido con priistas y con no priistas; con organismos de la sociedad civil, con actores políticos, económicos y sociales. He escuchado a estudiantes, indígenas, campesinos, trabajadores, amas de casa profesionistas, empresarios, maestros, adultos mayores, personas con discapacidad.

"En todos ellos, en todo México hay una exigencia común: el cambio", subrayó.

Y por ello, dijo claramente a quienes aspiran a cargos de elección popular: "tienen todos una enorme responsabilidad: no le podemos fallar a los mexicanos".

Pero a aquellos que ejercen un cargo público, les pidió "responsabilidad, honestidad, transparencia y resultados, para ganarnos y refrendar la confianza de la gente, hay que poner ejemplo, hay que empezar en casa. El PRI tiene que asumir el papel que le corresponde. No inspirado en la nostalgia del ayer, sino en los retos del presente, para ganar el futuro", demandó.

En un Auditorio Plutarco Elías Calles repleto, celebró que la pluralidad de los mexicanos esté más viva que nunca, y aprovechó entonces para poner el dedo en la llaga:

"Qué bueno que los jóvenes universitarios se expresen y manifiesten en libertad. El suyo es un movimiento respetable y genuino, que fortalece nuestra democracia. Es un movimiento que abandera la libertad, que debe ser respetado y escuchado, tanto por los gobiernos, los partidos políticos y por supuesto, por quienes somos candidatos. Como ellos mismos lo han exigido, bajo ningún argumento debe de partidizarse este movimiento", exigió.

Pidió a su partido, el PRI, que además de respetar, escuche e incorpore el deseo de los jóvenes de profundizar nuestra democracia. Soy el primer convencido de que es momento de superar viejos paradigmas y plantearnos nuevas formas de hacer las cosas, de asumir las tareas y nuestras responsabilidades para cumplirle a los mexicanos", sentenció.

Más tarde, durante el acto "Proyecto de Nación: Los Líderes Universitarios proponen", dijo que hoy el clamor de es por lograr un cambio y transformación del México que vivimos.

Recibió un documento que sintetiza la propuesta de jóvenes de 430 universidades del país, que exigen un cambio, pero que no sólo lo exigen en una voz aislada, sino, además, plantean cómo contribuir a este cambio que México necesita.

Peña Nieto convocó a los priistas a que hagan suyo el "Manifiesto Por una Presidencia Democrática", y que lo asuman como su código de conducta política y pidió que a cada ataque de los adversarios se responda con una propuesta: "Quedan 33 días de campaña, la sociedad exige que transcurran sin violencia. México quiere vivir en paz. México dice No a la violencia", concluyó.


Luciano Franco, La Crónica, 26 de mayo.