REYNOSA, Tamps.- En medio de las indagatorias contra sus correligionarios tamaulipecos, Enrique Peña Nieto procuró evitar el contacto con algunos de los cuadros priistas vinculados a escándalos.
Durante su segunda visita a esta entidad, en lo que va de la campaña presidencial, el candidato de la coalición PRI-PVEM fue orador único en un acto masivo, realizado en el Parque Cultural de Reynosa.
Peña Nieto no compartió el templete con otros aspirantes. Abajo, sentados en la primera fila, estaban los candidatos al Senado, Guadalupe Flores y Manuel Cavazos Lerma.
La primera, quien se desempeñó como diputada local durante el sexenio del ex Gobernador Tomás Yarrington, hoy bajo investigación en México y Estados Unidos por presunto lavado de dinero.
El segundo, Cavazos, quien convirtió al polémico priista -con derechos suspendidos tras darse a conocer una investigación en Estados Unidos- en su sucesor al Gobierno del estado.
Sin embargo, este último candidato a la senaduría se aseguró de tener presencia en el lugar: colocó pendones de plástico en los postes, repartió sombreros de palma, playeras y hasta cartones con la forma de su silueta y el letrero "vamos a ganar".
Cuando llegó el momento de hacer contacto con el candidato presidencial, Cavazos sólo logró saludar brevemente al candidato y no pudo permanecer al lado suyo.
Al terminar su discurso, pidió a los aspirantes al Congreso que lo acompañaran para la firma ante notario. Fue entonces cuando Cavazos subió al templete.
El candidato presidencial posó en por lo menos seis ocasiones para los fotógrafos, levantando la mano de los candidatos priistas en señal de victoria.
Sólo en una logró colarse el candidato al Senado, quien también ha sido señalado en indagatorias de la Procuraduría General de la República (PGR).
La seguridad
A pesar de la violencia que azota a esta región del País, Peña Nieto no realizó ningún pronunciamiento o compromiso concreto relacionado con el combate al crimen organizado o el narcotráfico.
En su discurso, sólo refirió que pretende llegar a la Presidencia para cambiar el escenario "crítico y desfavorable, que ha llevado al País a un clima de miedo y parálisis".
No obstante su discurso, lejano a uno de los principales problemas de los tamaulipecos, la seguridad del candidato presidencial sí estuvo garantizada.
Durante las tres horas que permaneció en esta ciudad fronteriza, las actividades de Peña Nieto estuvieron vigiladas por policías federales, estatales y militares en función de municipales.
Estos últimos, equipados con armas largas, realizaron rondines en las inmediaciones del parque incluso después de que el candidato abandonó el lugar.
Al interior del sitio, cientos de elementos de seguridad de la campaña del mexiquense reforzaron las vallas de metal instaladas para el mitin.
Los simpatizantes -que ingresaron paulatinamente desde las 8:00 horas- fueron revisados entre filtros de seguridad en los que les fueron retenidas algunas de sus pertenencias.
Además, la escolta personal del candidato permaneció alerta y colocó cuatro camionetas blindadas pegadas al templete para garantizar la rápida evacuación del aspirante.
Fuentes del equipo de campaña del mexiquense explicaron que incluso fue necesario "escoltar" algunos camiones que transitaron sobre la carretera ribereña que comunica al municipio de Nuevo Laredo con Reynosa.
"Desde hace años, la gente de la frontera prefiere circular por el lado de Estados Unidos, porque sabe que esa carretera es intransitable por los levantones y los cerrones de los malos que salen de las brechas. Pero para el mitin sí se vinieron por esa carretera, pero escoltados por policías", relató el priista.
Compromiso por México
Aporte al tricolor
Éstas son las cuentas que ha entregado el priismo en Tamaulipas
| 00 | 493,532 |
| 03 | 386,914 |
| 06 | 421,378 |
| 09 | 502.493 |
Claudia Guerrero enviada, Reforma, 19 de junio.
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