Avalan cláusula de exclusión

Cuatro meses antes de que el Presidente Felipe Calderón enviara al Congreso su propuesta de reforma laboral, el entonces candidato Enrique Peña Nieto adelantó su rechazo a algunos de los planteamientos contenidos en el proyecto que hoy se discute en la Cámara de Diputados, como la eliminación de la cláusula de exclusión.

El ahora Presidente electo fijó su posición sobre ciertas modificaciones legales que pretenden impulsar la transparencia, rendición de cuentas y democratización de los sindicatos.

La iniciativa preferente de Calderón propone suprimir la denominada "cláusula de exclusión por separación", en consonancia con los criterios emitidos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en la materia.

Actualmente, la ley permite establecer esa "cláusula" en los contratos colectivos de trabajo, lo que faculta a los sindicatos para solicitar el despido de un trabajador que ha sido expulsado del gremio.

Sin embargo, el Presidente electo se pronunció ya en contra de esa reforma, por considerar que ese mecanismo es clave para mantener la unidad interna de los sindicatos.

Según el mexiquense, eliminar esa "cláusula" podría debilitar a los propios trabajadores.

"No apoyo la desaparición de la cláusula de exclusión sindical, ya que la fuerza de toda organización de trabajadores, así como sus derechos laborales, se da en función de la unidad misma de sus agremiados y no de su fragmentación.

"Esto sería debilitar la fuerza de la unión de los trabajadores en favor de los patrones", aseguró Peña Nieto.

El priista se refirió al tema al responder el cuestionario "Preguntas cuyas respuestas podrían transformar a México", elaborado por un grupo de intelectuales y entregado a todos los candidatos presidenciales que participaron en la contienda.

Por otro lado, el proyecto de Calderón contempla la obligatoriedad para el voto libre, directo y secreto en la elección de las directivas sindicales.

En ese sentido, Peña Nieto se limitó a expresar que está a favor de "profundizar en la democratización" de los sindicatos, siempre y cuando se respete la autonomía de las organizaciones.

La iniciativa preferente del Ejecutivo federal establece nuevas obligaciones en materia de rendición de cuentas a los trabajadores afiliados, pero también para transparentar el manejo de los sindicatos.

La propuesta clasifica como información pública la relacionada con registros sindicales, contratos colectivos y reglamentos interiores.

Para Peña Nieto, también debe impulsarse la rendición de cuentas, pero únicamente hacia los miembros de la organización.

"Hacia los agremiados sindicales, del uso de recursos sindicales", expresó.

Claudia Guerrero, Reforma, 24 de septiembre.