“¡Chávez, soy tu hijo!”


Nicolás Maduro oficializó ayer su candidatura a la presidencia de Venezuela, asegurando que el 14 de abril va a arrasar en las elecciones porque él es el heredero natural del presidente Hugo Chávez, fallecido la semana pasada.

“No soy Chávez, pero soy su hijo y todos juntos somos Chávez”, proclamó ante miles de chavistas, en un intento de convencer al electorado de que la revolución chavista puede continuar sin su fundador y él es la persona más indicada.

Maduro llegó al acto conduciendo un autobús, para mostrar así su orgullo por el empleo que tenía antes de iniciar una meteórica carrera política, a base de lealtad absoluta a Chávez. Allí, arropado por su esposa y su candidato a vicepresidente, el marxista Jorge Arreaza, casado con una hija de Chávez, declaró: “Puedo decir aquí, con su permiso comandante, que logré descifrar el alma de Hugo Chávez, el hombre al que logré conocer desde cerca y desde adentro. Yo puedo decirles cómo sentía, cómo pensaba, qué quería para su pueblo, cómo sufría por los humildes”.

Imitando al comandante. Maduro dejó claro ayer, en el que se puede considerar su primer mitin, que va a intentar imitar a Chávez en todo lo que pueda para que el pueblo lo identifique como una misma cosa. Apareció con la misma sudadera con los colores de Venezuela que lucía el presidente fallecido y lo imitó en su manera de hablar: dos horas en los que combinó discurso populista, insultos a su adversario, el gobernador Henrique Capriles y hasta se puso a cantar.

Durante la pasada campaña electoral, Capriles, cuya abuela materna era judía, fue blanco de ataques antisemitas y homofóbicos de los partidarios de Chávez. Y durante el discurso de ayer, Maduro hizo alusión a la sexualidad de su rival.

“Yo sí tengo mujer, oyeron, a mí me gustan las mujeres”, dijo Maduro abrazando a su pareja Cilia Flores, que dejará su cargo como procuradora general para enfocarse en la campaña electoral.

Diez millones de votos. Nombrando prácticamente en cada frase y emocionándose hasta las lágrimas al recordar a Chávez, Maduro aseguró que el 14 de abril logrará lo Chávez no pudo hacer realidad, diez millones de votos.

“Lo lograré, pero no por mí, sino por y para Chávez”, quien logró en los comicios presidenciales de octubre 8.1 de los 15 millones de votos emitidos.

“¿Podremos cumplir, ahora sí, la meta de los diez millones?”, preguntó a la multitud, que le respondió con un atronador “sí”.

Las encuestas pronostican que ganaría con comodidad.

“Voy a apoyar a Maduro porque él (Chávez) lo pidió. No importa quién es el candidato siempre que siga los dictados de

Chávez”, dijo Marliely López, estudiante de derecho de 22 años.

Desarmado ante criminales

Maduro admitió que “hay cosas que están mal todavía” y prometió atacar problemas tales como la inseguridad ciudadana, con “mano extendida y apretando el puño” si no es retribuido.

Aseguró que está dispuesto a visitar a los delincuentes sin armas en los barrios de Caracas para desarmarles y que cese la “matanza”.

“Me golpeó su muerte; Cuba perdió a su mejor amigo”: Fidel
Fidel Castro, de 86 años, dijo ayer que lo “golpeó” la muerte de Hugo Chávez, en su primer comentario sobre el deceso de su aliado.

“Una llamada por vía satelital comunicó la amarga noticia. El significado de la frase empleada era inconfundible. Aunque conocíamos el estado crítico de su salud, la noticia nos golpeó con fuerza”, escribió Castro en un texto titulado “Perdimos nuestro mejor amigo”.

Castro fue quien conminó a Chávez a someterse a un chequeo médico en La Habana ante la aparición de dolores en la zona pélvica, y fue él quien luego de los fatídicos resultados informó a mediados de junio al líder venezolano que padecía de cáncer.

“Ni siquiera él mismo sospechaba cuán grande era”, dice Fidel de quien fue el principal aliado de Cuba en el siglo XXI en un artículo en el que se despide de Chávez con un “Hasta la victoria siempre, inolvidable amigo”.

EU expulsa a dos diplomáticos venezolanos
Washington expulsó a dos diplomáticos venezolanos en respuesta a la decisión del Gobierno de ese país la semana pasada, de pedir que dos agregados militares estadounidenses abandonen Venezuela.

“En respuesta a las medidas de Venezuela, el Departamento de Estado informó a la embajada de la República de Venezuela el 9 de marzo que declaró al segundo secretario Orlando José Montañez y al funcionario consular Víctor Camacaro personas no gratas”, dijo un funcionario del Departamento que guardo el anonimato.

Horas antes de informar al mundo de la muerte de Hugo Chávez, el presidente interino de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció la expulsión de los dos agregados militares de Estados Unidos en el país, alegando que habían intentado provocar un golpe militar contra Chávez, y agregó que la enfermedad de Chávez era un ataque de los enemigos de Venezuela, una acusación que Washington califica como absurda.

La Crónica, 12 de marzo.

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