Exige 'cuota de paso' el crimen a migrantes

En la ruta migratoria por territorio mexicano, el crimen organizado impone a los indocumentados la "cuota de paso".

De acuerdo con activistas, la complicidad de autoridades y su protección a grupos de la delincuencia organizada ha detonado el aumento de violencia y la diversificación en extorsiones y engaños hacia migrantes.

Durante el encuentro "Ellos tienen la Palabra. Un diálogo con los defensores de los derechos humanos de los migrantes", coordinadores de albergues indicaron que es en Veracruz, Chiapas, Tabasco y el Estado de México donde se presenta con mayor notoriedad esta problemática.

En dichos sitios, advirtieron, se obliga el pago de 100 a 300 dólares a cambio de no secuestrarlos o tirarlos del ferrocarril.

"Existe la delincuencia organizada que opera en las vías del tren en contubernio con los maquinistas pues éstos se detienen en lugares que no corresponden y allí suceden los secuestros masivos. Ha habido secuestros de miles y miles de migrantes. ¿Dónde han quedado? No sabemos", dijo Nelly Ríos, del albergue El Caminante J' Tatic Samuel Ruiz García.

"Los que operan dentro del tren van viajando como migrantes, van amenazando con machetes y armas de alto calibre y les quitan lo poco que queda. Los que no tienen son golpeados y arrojados del tren", añadió durante el foro organizado por la Universidad Iberoamericana.

Según los activistas, se ha detectado que los delincuentes se hacen pasar como migrantes para abordar el tren e identificar a los indocumentados y posteriormente extorsionarlos.

También denunciaron que falsos pastores han llegado a los albergues para rezar con los extranjeros, pero, cuando el grupo deja el inmueble, son asaltados por éstos.

"El crimen organizado le da clases al Estado en cuanto a empresa. Ahora se corre el efecto cucaracha porque lo que está pasando de Tenosique a Coatzacoalcos pasa en Lechería. Los grupos del crimen organizado se suben a los trenes para cobrar el impuesto a los migrantes. Ya tenemos en Saltillo mutilados de las piernas porque ya el crimen organizado se sube", refirió el Padre Pedro Pantoja, de la Casa Migrante de Saltillo.

"Cuando secuestraron a unos migrantes en Sabinas, Coahuila, y fui con la Presidenta Municipal a solicitarle ayuda porque fueron los policías los que los secuestraron, me dijo: 'Los policías no son nuestros, los ponen Los Zetas'".

 
 
Critican oportunismo
 
 
Para los defensores de los derechos de migrantes, el Estado mexicano ha mostrado una doble moral y una simulación para atender el tema de personas indocumentadas y frenar los abusos.

El Padre Pedro Pantoja sostuvo que, aunque el marco normativo se amplió, los migrantes continúan sin acceso a la justicia y otros derechos fundamentales tomando en consideración particularidades como la edad y el género.

Acusó que a la desprotección emanada de las leyes se agrega las de autoridades que son omisas en materializar los ordenamientos, les infligen maltrato y se coluden con autoridades.

"No creemos en estas leyes. En el trasfondo de la Ley de Migración y el reglamento y la Ley de Víctimas hay una simulación política muy fuerte,y no podemos creer en esa trampa. Las dos leyes fueron improvisadas; a las dos leyes le corresponde un fantasma de seguridad restrictiva y autoritarismo y de oportunismo político", sostuvo el director de la Casa Migrante de Saltillo.

Abusos persistentes

Hasta enero de este año, la CNDH ha registrado 27 denuncias contra el INM:

DF	13
Veracruz	4
Chiapas	3
Oaxaca	3
Tamaulipas	2
Nuevo León	1
Quintana Roo	1

Henia Prado, Reforma, 6 de marzo.