Prevén distensión con Venezuela

 El Presidente Enrique Peña Nieto tuvo un gesto de audacia al asistir a los funerales de Hugo Chávez, dentro del pragmatismo que caracteriza su gobierno, en lo que puede ser el inicio de un relanzamiento de las relaciones entre México y Venezuela, deterioradas durante las administraciones panistas, consideró el especialista José Luis Valdés.

"Esta coyuntura puede representar la oportunidad para México de remontar una situación de estancamiento que tuvo la relación desde los tiempos de (Vicente) Fox y que siguió de alguna manera durante el gobierno de Felipe Calderón", comentó en entrevista el politólogo e internacionalista de la UNAM.

"Durante dos sexenios completos tuvimos que mantenernos pasivos frente a un actor predominante en la región, sobre todo en la región andina, y desde luego también en el Mercosur", agregó.

No se trata de llenar un vacío, remarcó, sino de aprovechar el momento para compartir el liderazgo político en la región, lo que pasa, inevitablemente, por una alianza política y económica con Brasil.

"México puede entrar en coadyuvancia para contribuir a que haya un debate más constructivo frente a temas comunes, que hoy son muchísimos; no solamente son seguridad e integración, sino también son derechos humanos, democracia política, distribución del ingreso, el problema de la pobreza", apuntó.

"El pragmatismo de México se va a demostrar en el momento en que Peña Nieto y su canciller estén dispuestos a plantearse defender intereses más que principios, o en combinación con los principios".

La administración de Peña Nieto, insistió, enfrenta la oportunidad de replantear la política exterior y buscar mayor presencia de México en América Latina.

"Me parece que le darán la oportunidad a México de reposicionarse (...) por lo menos desde el discurso y con la perspectiva de poder plantearse una estrategia de política exterior distinta, nueva, acorde a los nuevos tiempos de relación con todos los actores", indicó.

Guadalupe Irízar, Reforma, 10 de marzo.