Acusan desperdicio de remesas

Cada año llegan a México más de 22 mil millones dólares por concepto de remesas, sin embargo, estos recursos se reciben en poblaciones en donde el gobierno no ha implementado políticas de desarrollo, por lo que la pobreza se mantiene advirtió Rodolfo García Zamora, especialista en migración.

En los últimos 40 años el gobierno mexicano no ha implementado verdaderas políticas de desarrollo económico y social en las regiones migrantes, particularmente en las indígenas, señaló el investigador de la Universidad Autónoma de Zacatecas.

"Las remesas por sí mismas no generan desarrollo (...) no puede haber desarrollo en las comunidades migrantes si no hay políticas de desarrollo.

"Las remesas no tienen carácter mágico.

"Hay experiencias de estados como Michoacán y Zacatecas que tienen 100 años migrando y tienen 70 años dependiendo de las remesas y siguen igual de pobres o más pobres", expresó.

Durante el Simposio "remesas, migración y desarrollo en las comunidades indígenas del México actual", realizado en la UNAM, el académico indicó que no se incentiva el empleo ni el aprovechamiento del campo.

Por ello Michoacán cuyas remesas indígenas en 2011 ascendieron a 2 mil 338 millones de dólares; Puebla, con mil 465; Oaxaca, con mil 427; Guerrero, con mil 262; Hidalgo, con 726 y Chiapas, 594, son las entidades que presentan mayores índices de pobreza a nivel nacional.

"Las políticas son tardías, parciales y reactivas (...) Hay incoherencia: los migrantes refuerzan y mantienen a este país y hay falta de reciprocidad del Gobierno", reprochó.

Muestra de esta realidad es la reducción -el año pasado- del 40 por ciento del presupuesto destinado a 20 programas de beneficio a paisanos. Mientras los connacionales enviaron 22 mil millones anuales, la federación erogó sólo 525 millones de pesos al programa 3 por 1 que impulsa iniciativas de mexicanos que viven en el exterior para que canalicen sus recursos a obras de impacto social en sus comunidades de origen.

Genoveva Roldán Dávila, académica del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, expuso que los migrantes indígenas sufren doble vulneración pues reciben los tratos más hostiles y discriminatorios.

"Algunos hablan solamente su lengua, se encuentran en situaciones económicas difíciles y están sujetos al racismo de los mexicanos y norteamericanos, son excluidos como migrantes y como indígenas en términos económicos, sociales y políticos", sostuvo.

Henia Prado, Reforma, 19 de septiembre.