Arrasan con plantón en Xalapa

Los 300 maestros que mantenían un plantón en la plaza Lerdo de Xalapa en protesta por la reforma educativa fueron desalojados a golpes por granaderos del Gobierno del estado.

Los uniformados irrumpieron en el lugar a las 2 de la madrugada de ayer, cuando los docentes se alistaban para desocupar el sitio tras un acuerdo que habían hecho con un funcionario del Gobierno estatal.

Ni media hora tenía que los maestros habían acordado el desalojo de la plaza con un funcionario identificado por el apellido Cerecedo, cuando el centro histórico se llenó de uniformados con escudos y toletes, que ingresaron en formación por las calles Lucio Blanco, Enríquez y por la escalinata del parque Juárez.

"No los confronten, sólo desalojen", gritó uno de los maestros, pero en seguida fueron acorralados y comenzaron enfrentamientos a golpes en varios puntos de la explanada y de la avenida Enríquez.

Los toletazos alcanzaban lo mismo a estudiantes, profesores, reporteros y se rodeaba a todo aquel que tomaba imágenes del incidente.

Mujeres corrieron tomadas de las manos hacia el callejón del Diamante, otras fueron protegidas por los maestros para que corrieran por la pendiente de Lucio.

Durante el operativo se detuvo a un número no determinado de personas, a quienes subieron a camionetas.

"Los maestros hablamos con un tal Cerecedo, nos dijo que era de Política Regional y que habría opción al diálogo, pero luego se fue y minutos después entraron muchísimos policías, nos dieron con todo, salimos como una estampida", dijo uno de los maestros que libró el cerco.

Confirmó que al momento de la incursión policiaca los maestros decidían en asambleas la forma en que se tomaría la oferta de diálogo del funcionario estatal.

"Pero nos traicionó, nos dijo una cosa y nos mandaron a la fuerza pública. Así actúan", contó el docente.

El profesor señaló que alcanzó a ver que jóvenes con cámaras fotográficas eran cercados por los uniformados, mientras que algunos maestros se atrincheraban en los cajeros de una institución bancaria sobre la plaza Lerdo.

Otro maestro que se corrió hacia el parque de Los Tecajetes, a unas once cuadras cuadras del primer cuadro, contó una historia similar.

"Ya habíamos accedido a retirarnos, cuando de repente sin ton ni son llegaron los uniformados y se fueron contra nosotros. Ni siquiera esperaron el diálogo, había mujeres y niños. Da tristeza ver que el grupo de choque del gobierno haya hecho una salvajada con los compañeros que estábamos ahí, no midieron la fuerza, había jubilados, había mujeres", dijo.

Tras el desalojo, unos 200 jóvenes con playeras negras que tenían la leyenda "Logística", instalaron vallas metálicas para cercar el Palacio de Gobierno.

Lev García corresponsal, Reforma, 15 de septiembre.