La iniciativa de reforma hacendaria no contempla IVA en alimentos y medicinas, mantiene en 16 por ciento la tasa de este impuesto, crea la pensión universal, el seguro de desempleo, la promoción de becas para la educación media superior y superior al tiempo que se impulsará la inversión en infraestructura.
Además se propone eliminar el régimen de consolidación fiscal bajo la premisa de que “todos los contribuyentes, sin excepciones y sin ventajas para nadie, aportemos al país en la medida de nuestras posibilidades”.
En estos términos se expresó el presidente Enrique Peña Nieto al explicar el contenido de su propuesta enviada al Congreso de la Unión a la cual calificó de “justa porque es altamente progresiva, ya que pagarán más los que más ganen”.
Explicó que al enviar al Congreso de la Unión una reforma hacendaria sin IVA a alimentos y medicinas se trata de “una decisión socialmente justa y económicamente responsable en esta coyuntura”.
Destacó que con la reforma hacendaria se incrementarán los recursos económicos en 1.4 por ciento del PIB para el 2014 y con ello llegar al tres por ciento para 2018.
Con ello, detalló, se destinará un punto porcentual para estados y municipios que sería utilizado en educación, infraestructura y salud.
Dejó en claro que la propuesta considera que continúen las exenciones de IVA en servicios médicos, transporte urbano, libros y revistas.
Prevé la creación de un impuesto a las bebidas azucaradas, a los plaguicidas, y se reducirá de manera gradual el subsidio a los combustibles, para eliminarlo por completo.
El mandatario abundó en que la reforma propone desaparecer el Impuesto Empresarial a Tasa Única, mejor conocido como el IETU (gravamen aprobado durante la legislatura que coincidió con el periodo de gobierno de Felipe Calderón) así como el Impuesto a los Depósitos en Efectivo conocido como el impuesto IDE.
Desde la perspectiva presidencial “para realmente simplificar el sistema tributario es necesario eliminar los impuestos que lo hacen particularmente costoso y complejo”.
De igual forma, se propone cobrar impuestos sobre las ganancias que las empresas pagan a sus dueños así como las utilidades obtenidas de la Bolsa de valores.
De acuerdo con el Ejecutivo federal, se propone eliminar tres cuartas partes de los tratamientos preferenciales y prácticamente la mitad de los regímenes especiales, sólo se mantendrán los que representan amplios beneficios sociales y los de probada eficacia para apoyar el crecimiento de la economía.
“Con la reforma hacendaria se acabarán los privilegios que no tienen justificación ni razón de ser”, aseguró el presidente Peña Nieto desde el salón Adolfo López Mateos de la residencia oficial de Los Pinos.
En presencia de los integrantes del Pacto por México, la mayoría de gobernadores del país y el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, empresarios, gabinete legal, los líderes del PAN, PRI y PRD, académicos y empresarios, aseguró que se facilitará el pago de los impuestos, por lo que se propone que una nueva Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) sea sencilla, corta y clara, además de que se reducen los 295 artículos de la ley actual a solo 186.
Peña Nieto expresó que la reforma hacendaria es, también, una reforma que fortalece a Petróleos Mexicanos pues tendrá un nuevo régimen fiscal como el de cualquier otra empresa petrolera del mundo, lo que le permitirá hacer mayores inversiones en favor del desarrollo nacional.
Insistió que su propuesta es responsable, promueve finanzas sanas y el ejercicio eficiente y transparente del gasto, ya que “con ella, se fortalece el manejo responsable de las finanzas públicas como política de Estado al establecerse límites al gasto de la burocracia”.
Se establecerán nuevos mecanismos institucionales para transparentar y asegurar la eficacia del gasto público, especialmente de aquél destinado a educación y salud en las entidades federativas y se fortalece la protección de los derechos de los contribuyentes.
El Jefe del Ejecutivo aseguró que la iniciativa de reforma hacendaria, que envió a la Cámara de Diputados, trae muy buenas noticias para los mexicanos, porque en primer lugar, la reforma hacendaria es una reforma social, con ella se propone reformar los artículos 4 y 123 de la Constitución, para incluir el derecho a una pensión universal y a un seguro de desempleo para los trabajadores formales.
Citó que se sumarán las medidas para garantizar el acceso efectivo a los servicios de salud, mediante la portabilidad de coberturas y la convergencia en la calidad de las instituciones del sector que pondré a consideración del Congreso en los próximos meses.
Aseguró que la reforma se presenta en cumplimiento al compromiso 72 del Pacto por México.
Además se propone eliminar el régimen de consolidación fiscal bajo la premisa de que “todos los contribuyentes, sin excepciones y sin ventajas para nadie, aportemos al país en la medida de nuestras posibilidades”.
En estos términos se expresó el presidente Enrique Peña Nieto al explicar el contenido de su propuesta enviada al Congreso de la Unión a la cual calificó de “justa porque es altamente progresiva, ya que pagarán más los que más ganen”.
Explicó que al enviar al Congreso de la Unión una reforma hacendaria sin IVA a alimentos y medicinas se trata de “una decisión socialmente justa y económicamente responsable en esta coyuntura”.
Destacó que con la reforma hacendaria se incrementarán los recursos económicos en 1.4 por ciento del PIB para el 2014 y con ello llegar al tres por ciento para 2018.
Con ello, detalló, se destinará un punto porcentual para estados y municipios que sería utilizado en educación, infraestructura y salud.
Dejó en claro que la propuesta considera que continúen las exenciones de IVA en servicios médicos, transporte urbano, libros y revistas.
Prevé la creación de un impuesto a las bebidas azucaradas, a los plaguicidas, y se reducirá de manera gradual el subsidio a los combustibles, para eliminarlo por completo.
El mandatario abundó en que la reforma propone desaparecer el Impuesto Empresarial a Tasa Única, mejor conocido como el IETU (gravamen aprobado durante la legislatura que coincidió con el periodo de gobierno de Felipe Calderón) así como el Impuesto a los Depósitos en Efectivo conocido como el impuesto IDE.
Desde la perspectiva presidencial “para realmente simplificar el sistema tributario es necesario eliminar los impuestos que lo hacen particularmente costoso y complejo”.
De igual forma, se propone cobrar impuestos sobre las ganancias que las empresas pagan a sus dueños así como las utilidades obtenidas de la Bolsa de valores.
De acuerdo con el Ejecutivo federal, se propone eliminar tres cuartas partes de los tratamientos preferenciales y prácticamente la mitad de los regímenes especiales, sólo se mantendrán los que representan amplios beneficios sociales y los de probada eficacia para apoyar el crecimiento de la economía.
“Con la reforma hacendaria se acabarán los privilegios que no tienen justificación ni razón de ser”, aseguró el presidente Peña Nieto desde el salón Adolfo López Mateos de la residencia oficial de Los Pinos.
En presencia de los integrantes del Pacto por México, la mayoría de gobernadores del país y el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, empresarios, gabinete legal, los líderes del PAN, PRI y PRD, académicos y empresarios, aseguró que se facilitará el pago de los impuestos, por lo que se propone que una nueva Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR) sea sencilla, corta y clara, además de que se reducen los 295 artículos de la ley actual a solo 186.
Peña Nieto expresó que la reforma hacendaria es, también, una reforma que fortalece a Petróleos Mexicanos pues tendrá un nuevo régimen fiscal como el de cualquier otra empresa petrolera del mundo, lo que le permitirá hacer mayores inversiones en favor del desarrollo nacional.
Insistió que su propuesta es responsable, promueve finanzas sanas y el ejercicio eficiente y transparente del gasto, ya que “con ella, se fortalece el manejo responsable de las finanzas públicas como política de Estado al establecerse límites al gasto de la burocracia”.
Se establecerán nuevos mecanismos institucionales para transparentar y asegurar la eficacia del gasto público, especialmente de aquél destinado a educación y salud en las entidades federativas y se fortalece la protección de los derechos de los contribuyentes.
El Jefe del Ejecutivo aseguró que la iniciativa de reforma hacendaria, que envió a la Cámara de Diputados, trae muy buenas noticias para los mexicanos, porque en primer lugar, la reforma hacendaria es una reforma social, con ella se propone reformar los artículos 4 y 123 de la Constitución, para incluir el derecho a una pensión universal y a un seguro de desempleo para los trabajadores formales.
Citó que se sumarán las medidas para garantizar el acceso efectivo a los servicios de salud, mediante la portabilidad de coberturas y la convergencia en la calidad de las instituciones del sector que pondré a consideración del Congreso en los próximos meses.
Aseguró que la reforma se presenta en cumplimiento al compromiso 72 del Pacto por México.
Características
No IVA a alimentos
No tratamientos especiales
Incrementar ISR al 1% más rico de la población
Impuestos a dividendos y capital
Elimina IETU e IDE
Nueva Ley del ISR
Reforma para automatizar trámites del SAT
Regimen de Incorporación fiscal
Regimen de incorporación a la seguridad social
Disminución de cuotas de seguridad social
Impuesto al carbono
Impuesto a los plaguicidas
Impuesto a las bebidas azucaradas
No tratamientos especiales
Incrementar ISR al 1% más rico de la población
Impuestos a dividendos y capital
Elimina IETU e IDE
Nueva Ley del ISR
Reforma para automatizar trámites del SAT
Regimen de Incorporación fiscal
Regimen de incorporación a la seguridad social
Disminución de cuotas de seguridad social
Impuesto al carbono
Impuesto a los plaguicidas
Impuesto a las bebidas azucaradas
Cecilia Téllez Cortés, La Crónica, 9 de septiembre.
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