Critican lucha antinarco venezolana

CARACAS.- El procedimiento por el que el Gobierno venezolano intercepta aeronaves, presuntamente vinculadas con el narcotráfico, está lleno de incógnitas.

No hay detalles de la nacionalidad de los pilotos, no se sabe si murieron en combate o si fueron obligados a aterrizar y se desconoce la cantidad de droga que transportaban.

Lo único que hay son imágenes de hierros retorcidos y humeantes de los aviones incinerados que son publicadas en redes sociales por los altos jefes militares del país.

De la última de estas aeronaves interceptadas, la número 30 según el Presidente Nicolás Maduro, logró saberse que tenía matrícula mexicana, lo que causó que este país exigiera explicaciones a Venezuela.

Según el Gobierno venezolano, la aeronave ingresó a su espacio aéreo, fue perseguida durante 40 minutos haciendo caso omiso de los llamados de la Fuerza Aérea para luego aterrizar en una pista clandestina.

Allí, en el estado de Apure, fronterizo con Colombia, fue incinerada presuntamente por estar llena de cocaína.

México, en tanto, sostuvo que la información entregada sobre el incidente no revela el contenido de la carga, y que tampoco se tiene información sobre los siete tripulantes que, según registros nacionales, viajaban en ella.

Esa opacidad del Gobierno ha sido cuestionada por los expertos en temas militares vinculados con la Oposición venezolana, a los que sorprende el área geográfica donde supuestamente se realizaron tres de las operaciones.

"Una interceptación nocturna es difícil en el Alto Apure. Ninguna autoridad incinera una evidencia", declaró el General retirado de la aviación Manuel Andara, quien añadió que le parecía un montaje.

El 2 de octubre pasado, Maduro prometió que derribaría los aviones que accedieran a su espacio aéreo y no acataran las instrucciones para aterrizar, basado en una ley de 2012 que le faculta para detener operaciones.

El anuncio se produjo poco después de un escándalo a finales de septiembre, cuando las autoridades francesas incautaron mil 382 kilogramos de cocaína repartidos en 31 maletas en un vuelo de Air France procedente de Caracas.

Según Venezuela, desde 2006, en que expulsó a la Agencia Antinarcóticos estadounidense, han capturado a 110 capos.

Alfredo Meza, Reforma, 11 de noviembre.