Encara Maduro año decisivo

CARACAS.- Sin el capital político y proverbial carisma de su predecesor, el Presidente venezolano, Nicolás Maduro, tiene el reto de saldar las deudas que dejó pendientes el ex Mandatario Hugo Chávez.
Algunos analistas dudan que Maduro tenga la fortaleza de lograrlo, no obstante, no ponen en duda que tratará de llegar tan lejos como la realidad económica del país se lo permita.
"Desde la Oposición me subestimaron, dijeron: 'no, Maduro es un inexperto, no se atreve'.
"Pero lo que han visto es poco para lo que vamos a hacer", advirtió el Presidente luego de recibir a finales del mes pasado poderes especiales para emitir leyes por decreto durante un año.
Ello con el propósito de combatir lo que denomina una "guerra económica" desatada por sus opositores para desestabilizar su Gobierno.
Sus palabras son para tomarlas en serio, ya que en apenas dos décadas pasó de un humilde chofer de autobús a Presidente del Congreso, Canciller, y finalmente heredero político de Chávez.
En sus primeros ocho meses al mando, Maduro ha embestido contra sus adversarios logrando contrarrestarlos, pero el próximo año deberá lidiar con una galopante inflación y escasez de productos básicos.
Ante esta problemática, Maduró ha acentuado los controles en la compra y venta de divisas e importaciones, y comenzó a aplicar inspecciones forzosas a comercios para combatir la especulación.
Inclusive a empezado a tantear las aguas políticas para un posible aumento en el precio de la gasolina, el cual se ha mantenido en 5 centavos por galón desde hace 20 años.
"Los inventarios han ido disminuyendo y no se están reponiendo porque los empresarios no tienen confianza para invertir'', dijo Jorge Roig, presidente de Fedecámaras, el mayor gremio empresarial del país.
El Banco Central Venezolano se ha retrasado en publicar las cifras sobre la inflación, con lo cual, según el economista Luis Oliveros, se ve mermada la credibilidad de la institución.
Algunos analistas creen que se dirige a un mayor control social, el cual conlleva a suprimir las libertades individuales.
Además está el tema de la inseguridad, que preocupa a los venezolanos.
Tarea pendiente
Nicolás Maduro debe lidiar con problemas que datan del Gobierno de su predecesor, Hugo Chávez.
· Combatir la inflación del 54.3 por ciento y la escasez de productos como la leche, el aceite y el papel higiénico.
· Reducir la inseguridad reflejada en la tasa de 55 homicidios por cada 100 mil habitantes
· Recuperar la confianza de los empresarios y reducir el subsidio al combustible que le cuesta anualmente al Gobierno 12 mil 500 millones de dólares.

Reforma, 23 de diciembre.

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