Venezuela asegura que desde México se conspira contra el gobierno chavista

El ministro venezolano de Interior, Justicia y Paz, Miguel Rodríguez, afirmó ayer que la protesta del miércoles, que acabó en tragedia, con tres muertos y 66 heridos, “no son de carácter social, sino que forma parte de un plan conspirativo” al que llamó “fiesta mexicana”, constituido, dijo, por “grupos violentos que buscan llevar al país a la guerra civil”.

Según el equivalente venezolano al secretario de Gobernación, “no se trata de un hecho espontáneo, sino que hay una organización que se viene gestando desde hace bastante tiempo para ir conduciendo al país a una salida irracional, inconstitucional y violenta”.

“Desde 2010”. Rodríguez subrayó que el presidente de la organización no gubernamental Humano y Libre, Gustavo Tovar, coordinó una reunión “radical de derecha” que se efectuó en México en octubre de 2010. El encuentro lo financiaron el banquero Eligio Cedeño y el ex subsecretario de Estado de EU adjunto para América Latina, Otto Reich, indicó.

A la reunión acudieron, políticos de la oposición venezolana, como el actual alcalde del municipio caraqueño de El Hatillo, David Smolansky, o el alcalde de San Cristóbal (estado Táchira), Daniel Ceballos, éste último vinculado al ex presidente colombiano Alvaro Uribe, aseguró Rodríguez.

“La reunión se hizo en México y la bautizaron fiesta mexicana, con la finalidad de adiestrar en métodos de desestabilización violenta a un grupo de líderes estudiantiles y de la juventud de movimientos de extrema derecha”, dijo el ministro, que anteriormente encabezó el servicio de inteligencia del Gobierno venezolano.

Rodríguez involucró también en el supuesto plan conspirativo al director de la ONG Observatorio Venezolano de Prisiones, Humberto Prado, al acusarlo de recibir financiación internacional “con la intención de generar ingobernabilidad en las cárceles del país”.

Reiteró, además, que estas organizaciones “manipulan” a los estudiantes que protestan pacíficamente contra el Gobierno para infiltrarlos y “generar actos de caos y de violencia”.

Orden de arresto. Según la versión del ministro del Interior, a esa reunión asistió Gaby Arellano, quien atizó la movilización del miércoles junto al político opositor Leopoldo López, a quien Rodríguez acusó de “pretender incendiar el país”.

El ministro anunció que cursó una orden de detención contra el líder del partido Voluntad Popular, Leopoldo López, quien ha dicho a través de sus voceros que “dará la cara” al país.

Investigar violencia. Mientras Maduro recibió ayer el respaldo de los países del bloque bolivariano —Argentina, Bolivia, Ecuador y Cuba—, que denunciaron los “intentos de desestabilización” por parte de la oposición, la OEA y AI pidieron una investigación de los sangrientos hechos.

Venezolanos residentes en Chile y Colombia se manifestaron frente a las respectivas embajadas de Venezuela en Santiago y Bogotá contra la represión del gobierno de Nicolás Maduro. Por su parte, el exilio venezolano en Florida acusó al presidente de “criminalizar” las marchas.


La Crónica, 14 de febrero.

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