Los presidentes de México y Paraguay, Felipe Calderón y Fernando Lugo, respectivamente, comprometieron a sus gobiernos a trabajar unidos a fin de “rescatar a nuestros países de las garras del crimen organizado”.
Calderón recibió a Lugo en una ceremonia en Los Pinos, con motivo de la visita oficial que realiza el mandatario paraguayo. En reunión privada determinaron instruir a las cancillerías de ambas naciones a que en abril próximo se concrete la primera reunión mixta en materia de lucha antidrogas.
Lugo reconoció el trabajo de Calderón contra este flagelo, al que calificó de “feroz y esquivo” pero que, señaló, será doblegado por los millones de mexicanos que buscan vivir en paz.
El mandatario mexicano aseguró que la transformación de un país no puede ser obra de una persona, de un grupo o de un partido político”, sino que es tarea de generaciones enteras, por ello dijo que su gobierno está decidido a iniciar una nueva etapa de relaciones entre los dos países.
En este encuentro, los presidentes de México y Paraguay firmaron documentos de acuerdos diversos en el que que destaca uno en materia migratoria que determina que desde ayer no se les solicitará visa a los ciudadanos mexicanos que viajen a aquella nación sudamericana. Por su parte. México eliminó el requisito el mes pasado.
Más tarde, ambos mandatarios se reunieron en una comida que el gobierno de México le ofreció a Fernando Lugo en el alcázar del Castillo de Chapultepec, en donde Felipe Calderón expresó su deseo de que “la democracia sirva para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos a través de la solidaridad y la justicia en la vida pública”.
Calderón recibió a Lugo en una ceremonia en Los Pinos, con motivo de la visita oficial que realiza el mandatario paraguayo. En reunión privada determinaron instruir a las cancillerías de ambas naciones a que en abril próximo se concrete la primera reunión mixta en materia de lucha antidrogas.
Lugo reconoció el trabajo de Calderón contra este flagelo, al que calificó de “feroz y esquivo” pero que, señaló, será doblegado por los millones de mexicanos que buscan vivir en paz.
El mandatario mexicano aseguró que la transformación de un país no puede ser obra de una persona, de un grupo o de un partido político”, sino que es tarea de generaciones enteras, por ello dijo que su gobierno está decidido a iniciar una nueva etapa de relaciones entre los dos países.
En este encuentro, los presidentes de México y Paraguay firmaron documentos de acuerdos diversos en el que que destaca uno en materia migratoria que determina que desde ayer no se les solicitará visa a los ciudadanos mexicanos que viajen a aquella nación sudamericana. Por su parte. México eliminó el requisito el mes pasado.
Más tarde, ambos mandatarios se reunieron en una comida que el gobierno de México le ofreció a Fernando Lugo en el alcázar del Castillo de Chapultepec, en donde Felipe Calderón expresó su deseo de que “la democracia sirva para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos a través de la solidaridad y la justicia en la vida pública”.
Sergio Javier Jiménez, El Universal, 4 de noviembre.
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