Los líderes nacionales del PRD y el PSD, Guadalupe Acosta y Jorge Carlos Díaz Cuervo, respectivamente, firmaron ayer una agenda mínima de 62 puntos que ambos partidos consideran como base para una plataforma electoral conjunta con miras a los comicios federales de 2009, en una coalición parcial “tentativamente para 200 distritos electorales” que se suscribirá entre el 10 y el 15 de diciembre próximo.
Los temas consensuados fueron discutidos en siete foros que entre julio y noviembre realizaron el Instituto de Estudios de la Revolución Democrática y la Fundación Social Demócrata.
Entre los diversos temas acordados, el PRD y el PSD se plantean como primer compromiso del Estado con la sociedad y para la izquierda moderna, “el imperativo categórico de acabar con la delincuencia organizada”.
Ambas organizaciones políticas señalaron que además de las medidas jurídicas o institucionales requeridas, el combate estructural al crimen organizado necesita la generación de empleos estables, la reducción de la pobreza y la ampliación de oportunidades de acceso a la alimentación, la educación, la salud y vivienda digna, lucha que tiene que incluir la participación colectiva de la población.
En un acto conjunto de perredistas y social demócratas, precedido de un encuentro informal entre los dirigentes de esos partidos, con la presencia de José Narro, líder de la disidencia del PT, se dio a conocer el documento que señala el objetivo también de discutir y analizar “la posibilidad de regular la mariguana y de otras drogas”.
Esto obedece a que la clandestinidad en la que se trafican los estupefacientes “genera hoy los más altos niveles de violencia en la historia reciente de México”.
En la agenda mínima denominada 62 puntos de Encuentro, se considera también el impulso de una reforma al juicio de amparo, a fin de suprimir el principio de relatividad de las sentencias “para que éstas sean de carácter general y no se aplique únicamente en los quejosos que lo promuevan”, para que todos sean beneficiados por la resolución.
Los temas consensuados fueron discutidos en siete foros que entre julio y noviembre realizaron el Instituto de Estudios de la Revolución Democrática y la Fundación Social Demócrata.
Entre los diversos temas acordados, el PRD y el PSD se plantean como primer compromiso del Estado con la sociedad y para la izquierda moderna, “el imperativo categórico de acabar con la delincuencia organizada”.
Ambas organizaciones políticas señalaron que además de las medidas jurídicas o institucionales requeridas, el combate estructural al crimen organizado necesita la generación de empleos estables, la reducción de la pobreza y la ampliación de oportunidades de acceso a la alimentación, la educación, la salud y vivienda digna, lucha que tiene que incluir la participación colectiva de la población.
En un acto conjunto de perredistas y social demócratas, precedido de un encuentro informal entre los dirigentes de esos partidos, con la presencia de José Narro, líder de la disidencia del PT, se dio a conocer el documento que señala el objetivo también de discutir y analizar “la posibilidad de regular la mariguana y de otras drogas”.
Esto obedece a que la clandestinidad en la que se trafican los estupefacientes “genera hoy los más altos niveles de violencia en la historia reciente de México”.
En la agenda mínima denominada 62 puntos de Encuentro, se considera también el impulso de una reforma al juicio de amparo, a fin de suprimir el principio de relatividad de las sentencias “para que éstas sean de carácter general y no se aplique únicamente en los quejosos que lo promuevan”, para que todos sean beneficiados por la resolución.
Mauricio Pérez, Milenio, 27 de septiembre.
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