IMAGEN PÚBLICA: Escenarios para visualizar la cuesta de enero. Tercera parte.

Continúa el tema. Los escenarios visualizados son contradictorios, como pudimos percibir desde hace dos semanas y, al parecer, cada quien continúa instalado en su misma posición. Adicionalmente, han surgido problemas entre los empresarios del ramo y la Asociación Nacional de Almacenas y Tiendas Departamentales a raíz del acuerdo que ésta firmó con la Secretaría de Economía. A continuación, los 42 comentarios de seguimiento temático correspondientes a esta semana.

EL CONTEXTO.
Otra falacia con la que comenzó el año es la del tal gasolinazo y tortillazo, que más bien han servido de pretexto para que algunos cuantos especuladores le encajen el diente a los consumidores y para que los ineptos que no hicieron su tarea después de 15 años se tiren al suelo para ver quién los levanta.
El aumento gradual de la gasolina y la entrada en vigor del capítulo agropecuario del TLC no deben ser pretexto para un aumento desmedido de precios.
No se vale que el gran mérito de todos los mexicanos de lograr el abatimiento inflacionario se vaya al caño. México tiene ya una década con inflaciones de un dígito, y lo logró una vez más en 2007 con un crecimiento de precios anual de 3.76%, nivel acorde con la meta del Banco de México, que se mantiene para este 2008.
Es oportunidad de ejercer las prerrogativas del consumidor y no comprar productos y servicios a quienes se quieran pasar de listos aumentando exageradamente los precios.
César Castruita, “Los pasos de los pesos”, Crónica, 12 de enero.

Varios funcionarios del Gobierno del Distrito Federal, incluido el propio Jefe de Gobierno, se han pronunciado en más de una ocasión por los efectos del “gasolinazo”.
Dicen que provocará un alza generalizada de precios y con ello más inflación.
Quizás tengan razón, quizás no.
Pero de lo que no hablan los funcionarios y los militantes del PRD es de los efectos por los aumentos en impuestos y servicios que presta el Gobierno capitalino.
El predial subirá de acuerdo con el comportamiento de la inflación, pero también derivado de una actualización catastral, lo que representa en muchos casos incrementos exorbitantes.
Y ni hablar del agua, de los trámites como bodas y divorcios, de las licencias….
Pepe Grillo, Crónica, 12 de enero.

La gran mayoría de los mexicanos piensa que es una ofensa a su inteligencia el reporte del Banco de México en el sentido de que apenas subió el costo de la vida el año pasado. Los funcionarios del banco central, encabezados por su gobernador, Guillermo Ortiz, tratan de maquillar la realidad. Un abrumador 95 por ciento de 2 mil 708 personas de toda la República que participaron en nuestra encuesta de esta semana opina que el reporte del banco es falso; la inflación fue mayor al 3.76 que reportó.
Enrique Galván Ochoa, “Dinero”, La Jornada, 12 de enero.

La última vez que vi a Dionisio Pérez Jácome —el coordinador de Asesores de la Presidencia de la República—, hace varios meses, me dijo esto: “Se va a poner interesante”, refiriéndose a las políticas públicas que emprendería Felipe Calderón para favorecer la economía, especialidad de Dionisio.
Pues bien, algo está fallando no sólo en Los Pinos sino en todo el equipo de economistas destacados que rodea a Calderón. Ausentes están, al parecer —u olvidaron sus convicciones económicas—, todos, pues el Presidente ha hecho gala de acciones que nos están alejando cada día más de funcionar como una economía de mercado.
Carlos Mota, “Cubículo estratégico”, Milenio, 14 de enero.

La fracción parlamentaria del PAN en la Cámara de Diputados aseguró que "no hay indicadores que puedan sugerir un aumento de precios"...
¡Incluso!, la presidenta de la Comisión de Economía, la guanajuatense Adriana Rodríguez Vizcarra, aseguró que "sí han bajado los precios, como el costo de autos y tarifas aéreas"...
¡Nooo, pues sí!, dicen. Concediéndole un poco (sólo un poco) de razón, digamos que dice la verdad, que no han subido los autos ni las tarifas aéreas, ¡pero!, al grueso de la población, ¿eso le importa?, ¡ésos no son artículos de primera necesidad!, o qué, ¿se van a comer carros y tortas de boletos de aviones?..
Eva Makívar, “La creme de la creme”, El Financiero, 14 de enero.

Por otro lado, en las perspectivas económicas para el año, que como encargado del CEESP presentó Francisco Lelo de Larrea, hubo coincidencia en que toda la polvareda levantada en torno a la inflación, el aumento de precios y la necesidad de revisar el TLC sólo tiene un origen político.
No hay razón, coincidió el CCE en pleno, para hablar de escaladas de precios y mucho menos para reabrir el Tratado de Libre Comercio, que no es el culpable de que el campo se mantenga en el atraso. Por el contrario, los avances que reporta se deben al acuerdo con Estados Unidos y Canadá.
Herminio Rebollo Pinal, “Mesa de negocios”, El Financiero, 14 de enero.

¿Dónde están Dioniosio Pérez Jácome, Luis Téllez, Jesús Reyes Heroles, Eduardo Sojo, Agustín Carstens y hasta Eduardo Pérez Motta y el propio Guillermo Ortiz? ¿Por qué han cedido y no logran convencer a Calderón de no jugar al populismo de la economía mixta setentera?
Carlos Mota, “Cubículo estratégico”, Milenio, 14 de enero

Al respecto, va a resultar interesante ver la política monetaria seguida por el Banco de México, ya que si bien Guillermo Ortiz, gobernador del banco central, comentó que no había un gasolinazo como tal (y tiene razón), también es cierto que se vienen presiones inflacionarias debido a los alimentos. El reto de Ortiz y la junta de gobierno del Banco de México es encontrar una política monetaria que siga combatiendo la inflación, en un año particularmente riesgoso, pero a su vez que no desaliente tanto el crecimiento
José Yuste, “Activo empresarial”, Excélsior, 14 de enero.

Si el gobierno está pecando de soberbia o insensibilidad ante un desgaste real de la economía familiar, y si minimiza los riesgos que representan las presiones externas para la micro y la macroeconomía, el costo será alto para el Presidente y el PAN.
Para abonar a la polarización de este país dividido por razones políticas y sociales, hoy surge una nueva brecha que separa dos percepciones distintas y hasta opuestas sobre la situación económica que vive el país. De un lado está la percepción de la gente de la calle, del ciudadano de a pie, las amas de casa y muchos trabajadores, que recogen y documentan los medios de comunicación, y que hablan de un efecto palpable en el incremento de precios de productos básicos, asociado al efecto del nuevo impuesto a la gasolina; del otro lado está la posición del gobierno, que asegura, casi por decreto, que no hay tales aumentos y que todo es “ruido político y mediático”
Salvador García Soto, “Serpientes y Escaleras”, El Universal, 15 de enero.

Bajo el escenario actual, colocado en la pista el nuevo gravamen a las gasolinas y diesel que abre el camino para un deslizamiento gradual, y pendiente aún la evaluación del impacto del Impuesto Empresarial a Tasa Única, el golpe al sector productivo pareciera brutal.
Y si le seguimos, 16% de incremento salarial colocado en la mesa por el Sindicato Mexicano de Electricistas para la revisión contractual con la Compañía de Luz y Fuerza del Centro prevista para marzo próximo, pareciera representar la pauta para los jaloneos de cada año.
Se diría, pues, que esta vez el gobierno y las cadenas se pusieron de acuerdo para quemar en leña verde a los proveedores… y de pasadita quemar, en este caso en sentido figurado, al pequeño comercio que no está en opción de ofrecer las mismas rebajas.
Alberto Barranco, “Empresa”, El Universal, 15 de enero.

Tanto en los altos niveles de la Secretaría de Hacienda como en el Banco de México se afirma que el llamado gasolinazo, como se bautizó políticamente al efecto inflacionario del nuevo impuesto de 2 centavos mensuales a los precios de la gasolina, simplemente “no existe”. Todo es producto, dicen en el despacho principal de la SHCP, de “presiones políticas” y de una percepción que se ha ido generando a partir de “percepciones” que se difunden y reproducen en los medios.
Así, mientras la señora que va al mercado en Veracruz o en los Altos de Jalisco se queja de que le incrementaron el precio de la tortilla, la leche o de algunas verduras y frutas, los estrategas del secretario de Hacienda afirman que no sólo es falso el aumento de esos precios, sino que aseguran que en algunas tiendas departamentales, de las que firmaron un “pacto de descuentos” con el gobierno federal, el precio de la tortilla está disminuyendo
Salvador García Soto, “Serpientes y Escaleras”, El Universal, 15 de enero.

Poco antes de la caída de Constantinopla, la discusión era cuántos ángeles podrían caber en la cabeza de un alfiler, y no la manera en que los otomanos avanzaban con gran fuerza sobre el último resquicio del Imperio Romano de Oriente.
Pues parecería que el espíritu de estas discusiones ha regresado y, peor aún, que se ha consolidado entre economistas y cúpulas empresariales. Se ha desatado un gran debate en torno a si las medidas que ha tomado el gobierno de Felipe Calderón para contener las amenazas inflacionarias (que tienen un carácter político) son acciones populistas y, por tanto, un regreso al pasado.
Lo cierto es que el aumento en la gasolina difícilmente podría justificar la presión de precios que algunos han tratado de inflar con plena intención política. Lo mismo se han sumado perredistas que algunos otros quienes creen que el fracaso de México es su triunfo. Quienes quieren ver una crisis económica para “cambiar el modelo económico”, cualquier cosa que eso quiera decir.
David Páramo, “Personajes de renombre”, Excélsior, 15 de enero.

Sobre todo cuando insultan la pulcra inteligencia con algunos divertidos datos que no hacen sentido y que son una absoluta simulación ante un evidente desmadre desencadenado por el célebre chisguete fiscal que comenzó siendo vendido por Agustín Carstens —a quien el cargo le está quedando grande y pretende flotar en la nube doce (mientras su jefe está más allá de la veinte) para hacer un aterrizaje forzoso (that is) en el 2009 como el posible sucesor de Guillermo Ortiz en el BM— en círculos financieros internacionales para recaudar cerca del 2 por ciento del PIB (unos doscientos mil millones), y gracias al magnífico trueque y el oficio político de Felipe con el PRI, hoy apenas acaricia la cifra de los 58 mil millones de pesos.
Espléndido.
Marcela Gómez Zalce, “A puerta cerrada”, Milenio, 15 de enero.

Es como si la realidad se percibiera distinto desde el piso micro de la calle y el mercado de la esquina, que desde las alturas de la macroeconomía. Lo que para el sector oficial son “inexistentes presiones inflacionarias”, para los ciudadanos son “aumentos reales” que impactan su economía diaria y que escapan, en muchos casos, a los débiles o inoperantes controles gubernamentales.
Tan optimista se ve el panorama desde el lado oficial, que en el caso de la recesión que pronostican muchos analistas en la economía de Estados Unidos, y que impactará incluso las proyecciones de crecimiento de la economía nacional, todavía no es tomada como un hecho por las autoridades financieras. Habrá que esperar, dicen, a que en unos 30 ó 45 días se defina bien el panorama en la principal economía del planeta, para fijar la estrategia con la que México enfrentará una eventual contracción, que en Hacienda aún se resisten a llamar recesión
Salvador García Soto, “Serpientes y Escaleras”, El Universal, 15 de enero.

Es cierto que un debilitamiento en el crecimiento de la economía genera un menor crecimiento de los precios (inflación) por la sencilla razón de que se contrae la demanda (el consumo); sin embargo, en esta ocasión el origen principal de las presiones inflacionarias está focalizado fuera de las fronteras del país y nada se puede hacer para contenerlas en términos de mercado.
Ante este panorama inminente, el gobierno de Felipe Calderón ha optado por implementar medidas temporales: 1. Mayor gasto público para responder políticamente a los reclamos, vía subsidios, y para impulsar el consumo en algunos sectores, vía creación de infraestructura, 2. Aceleración del ejercicio del gasto público para responder rápidamente a la caída que muestra la economía, 3. Acuerdos con comerciantes y productores para mantener o disminuir precios básicos, y 4. El lanzamiento de una estrategia de difusión y propaganda en relación con las políticas de precios, a la defensa del TLC y a las virtudes de las reformas energética y laboral que vienen, para contener a sus críticos.
Calderón y sus economistas dejan la impresión que se ofrecen respuestas temporales, sostenidas con dinero público, a problemas de fondo que no se enfrentan con seriedad. Es el caso de la situación del campo o de los retos que impone un TLC II del que ni siquiera se habla y menos aún se hace.
Samuel García, “El Observador”, Milenio, 15 de enero.

Ante las presiones de precios el gobierno básicamente ha establecido una batería de acciones correctas desde el punto de vista económico. Usar parte de los buenos resultados del FARAC no sólo para disminuir el precio de algunas carreteras, sino para que no se registrara la corrección inflacionaria de todos los años.
La disminución del precio de la energía eléctrica en horas pico. Una demanda antigua del sector empresarial, la cual tiene como objetivo mejorar la productividad y evitar que haya pretextos para el aumento de precios.
El que el gobierno haya coordinado con la ANTAD un programa de rebajas de precios sin que hubiera subsidios y, más aún, en el cual sólo se empaquetaron las ofertas que tradicionalmente hacen las empresas y sus proveedores, hay quienes lo quieren ver como un regreso al pasado como si intrínsecamente fuera malo.
David Páramo, “Personajes de renombre”, Excélsior, 15 de enero.

¿Cuál de los dos sectores peca de optimista o de pesimista desbordado?
Si la gente que denuncia aumentos y afirma sentir ya en el bolsillo familiar los efectos de incrementos abusivos de comerciantes está exagerando y cayó en una “psicosis de precios”, ya se verá. Pero si el gobierno está pecando de soberbia o insensibilidad ante un desgaste real de la economía familiar, y si minimiza los riesgos que representan las presiones externas para la micro y la macroeconomía, el costo será alto; no sólo enfrentarán las dificultades de una sacudida económica sino los reclamos y presiones populares que repercutirían directamente en los planes políticos del presidente Felipe Calderón y el PAN para los estratégicos comicios intermedios del 2009.
Salvador García Soto, “Serpientes y Escaleras”, El Universal, 15 de enero.

Independientemente de que no hay ninguna relación con los pactos de finales de los ochenta, las medidas que se toman en contra de la inflación son correctas, pues no sólo es el impuesto más injusto y lesivo para la población, sino que genera graves distorsiones económicas que dañan principalmente a los más pobres.
Estar discutiendo que si las medidas que está tomando Banco de México de manera coordinada con la administración de Calderón son de corte populista o no, es caer en la trampa de los seguidores de la izquierda irracional de discutir todo en términos de etiquetas. Lo que se debe analizar es si las medidas son correctas o no.
Lo cierto es que los precios han aumentado mucho menos que la expectativa, la inflación sigue bajo control en buena medida porque la ANTAD ha servido como un formador de precios dentro de la economía de mercado.
Aun cuando es difícil suponer qué hubiera pasado de no haberse tomado estas medidas, es fácil suponer que la inflación estaría en niveles muchísimo más elevados. Hay quienes tratan de escamotear este éxito como si fuera menor. Sin embargo, la realidad es que aquellos que quieren establecer todas las políticas a favor de los que menos tienen deberían comprender que mientras la inflación se encuentre en los menores niveles, hay mayores posibilidades de éxito económico.
David Páramo, “Personajes de renombre”, Excélsior, 15 de enero.

Legisladores del PRD, el PT, Convergencia y Alternativa, a quienes podría sumarse el priista José Murat, acudirán la mañana de este jueves a la Suprema Corte de Justicia, para interponer una acción de inconstitucionalidad contra el impopular gasolinazo. Allí serán recibidos por el mismísimo presidente de la Suprema Corte, Guillermo Ortiz Mayagoitia.
Francisco Garfias, “Arsenal”, Excélsior, 17 de enero.

LA ANTAD.
Felipe Calderón está jugando con fuego. En el afán de apaciguar políticamente el discurso de la izquierda perredista, el Presidente decidió desde la crisis de la tortilla meter la mano en la economía, validando con ello el discurso de la oposición, en el sentido de que por decreto se pueden manipular los precios.
Los ejemplos abundan: pacto para la tortilla; retraso en la entrada en vigor de impuestos a la gasolina; ayuda a los damnificados de Tabasco; congelamiento del peaje carretero; y, la semana pasada, pacto con la ANTAD y Wal Mart para bajar los precios de productos en los autoservicios. Con estas acciones Calderón nos recuerda, casi, a las economías centralmente planificadas, como las de la ex URSS.
Pero el riesgo de quemarse no ha sido medido por el Presidente. Al haber legitimado la intromisión selectiva del gobierno en el sistema de precios, quien quita que en 2009 o 2010 suba brutal y mundialmente el precio del acero, el trigo o el algodón, insumos básicos de productos masivos. ¿Qué haría?
Carlos Mota, “Cubículo estratégico”, Milenio, 14 de enero

A pesar de la mayor competencia en el comercio detallista, el crecimiento real de las ventas de las cadenas asociadas a la ANTAD, que comanda Vicente Yáñez, el año pasado fue de 8.9 por ciento a unidades totales, pero medido mismas tiendas tuvo un retroceso marginal de menos 0.2 por ciento. Las explicaciones son varias, y van desde el hecho de que diciembre pasado tuvo un viernes menos que en 2006 hasta las luces amarillas de cierta saturación del crédito. En el caso de autoservicios se dio un alza de apenas 0.1 por ciento, en tanto que para cadenas departamentales la caída fue de 2.8 por ciento.
Rogelio Varela, “Corporativo”, El Financiero, 15 de enero.

Que en la Antad, que preside Vicente Yañez, no ha habido quien levante la mano para inscribirse en el padrón de distribuidores de gas LP, en virtud del nuevo reglamento sobre ese energético. Que sólo Wal-Mart, que preside Ernesto Vega Velasco y dirige Eduardo Solórzano, ya lo hizo. Por eso el equipo de Eduardo Sojo convocará a la Antad en breve para que ésta le entre.
Marco Antonio Mares, “Ricos y poderosos”, Crónica, 15 de enero.

Ideológicamente se cree que el programa de ANTAD va contra el libre comercio, amén de que se regresa a políticas que se utilizaron a principios de los 90 frente a una sociedad que ya rebasó por mucho esos esquemas.
Además, porque Economía y ANTAD se saltaron incluso al CMHN que encabeza Claudio X. González, en donde la mayoría de sus integrantes son industriales.
Se cree que ANTAD “hizo caravana con sombrero ajeno”, pues los descuentos finalmente los generarán los proveedores, sobre todo los más pequeños que son los que tienen menos capacidad de gestión frente a Wal-Mart de Eduardo Solórzano o Soriana de Ricardo Martín Bringas que son los más grandes.
Frente a ANTAD hay un resentimiento previo, puesto que el año pasado también unilateralmente establecieron con Economía su propio pacto para las tortillas y luego en la refriega relacionada con el IETU empujaron una deducción de inventarios del 0.5 por ciento.
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, El Universal, 15 de enero.

Lo que pasa es que la firma del "Programa de Apoyo Familiar" por parte de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales habría sido la gota que derramó el vaso en la muy añeja disputa no sólo entre comerciantes e industriales sino también entre los productores agropecuarios, el comercio organizado y los grandes consorcios comerciales.
Más allá de la beligerancia con la que se ha expresado el dirigente nacional de la Concamin, Ismael Plascencia, que, a diferencia de otras batallas, en ésta sí tiene la razón y ejerce un liderazgo genuino, en la realidad el compromiso hecho por la ANTAD, que comanda Vicente Yáñez, con la Secretaría de Economía pasó por alto cualquier concertación y siguió el camino fácil de amarrar los términos con el último eslabón de la cadena "y ahí te arreglas después con los proveedores".
Herminio Rebollo Pinal, “Mesa de negocios”, El Financiero, 16 de enero.

Son buenas las rebajas que benefician al consumidor, pero no se vale imponerlas.
Y las cúpulas empresariales acusan de chantaje a las tiendas de la ANTAD.
Dicen que no las consultaron para operar rebajas por 60 días.
Y que los costos se los trasladarán a los productores, bajo la amenaza de no comprarles su producto.
Las rebajas siguen, y el enojo también.
Pepe Grillo, Crónica, 16 de enero.

El tejido fino de la campaña de descuentos en los supermercados –programa Apoyo Familiar 2008– presenta feos agujeros. Por un lado, no convence a los consumidores. Algunos dicen que el programa es un engaño porque los supermercados retiquetaron los precios en diciembre para resarcirse anticipadamente de los descuentos que ofrecerían en enero. Pero no es todo: los proveedores se quejan de que la ANTAD –la asociación de los supermercados– se los está llevando al baile, porque son ellos los que absorben los descuentos. En otras palabras, los supermercados se quieren lucir con sombrero ajeno. La discusión ya llegó a un plano de confrontación entre el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales, Ismael Plascencia, y el de la ANTAD, Vicente Yáñez Solloa. En medio se encuentra el secretario de Economía, swami Eduardo Sojo. Fue un cuento chino el que le platicó a Felipe Calderón cuando le dijo que el programa es “todo un éxito”.
Enrique Galván Ochoa, “Dinero”, La Jornada, 16 de enero.

Todo parece indicar que será el martes cuando el secretario de Economía, Eduardo Sojo, convoque a los directores de las grandes tiendas de autoservicio y a los dirigentes de las cámaras industriales para que se pongan de acuerdo en la mecánica para que funcione el programa Apoyo Familiar 2008. Así lo acordaron en la junta realizada en la SE, en donde se buscó poner fin a la polémica desatada. En paralelo, el dirigente de Concamin, Ismael Plascencia, charló ya con el nuevo presidente de la ANTAD, José Manuel Sánchez Moreno, de Soriana, para aterrizar las cosas. Aseguran que fue un encuentro cordial. La realidad es que el diferendo por los descuentos ofrecidos por ANTAD fue la gota que derramó el vaso tras una serie de desencuentros entre comerciantes e industriales. Un ejemplo es que el comité de prácticas comerciales tiene dos años dialogando sin llegar a nada. Como es lógico, los industriales reclaman el respaldo de su cúpula y ésta tiene que responder. Por lo que se dijo el miércoles en la comisión ejecutiva del CCE, aparentemente las diferencias han sido sobre todo con el presidente ejecutivo de ANTAD, Vicente Yáñez, expresidente de Canacintra. Empero, todo apunta a que la sangre no llegará al río Herminio Rebollo Pinal, “Mesa de negocios”, El Financiero, 18 de enero.

LA PERSPECTIVA DE LOS ORGANISMOS EMPRESARIALES.
Ante el consejo encabezado por Armando Paredes, el presidente de la Concamin, Ismael Plascencia, así como una decena de industriales y productores agropecuarios de todo el país, afiliados al CNA, pusieron el grito en el cielo: 1) Para el programa de la ANTAD no fueron consultados los industriales y los productores agropecuarios. 2) Para el abaratamiento de los precios, el gran comercio quiere pasar la factura a los productores, mismos que no están dispuestos a pagar calenturas que no provocaron. 3) El sector empresarial está en contra de que frente a las contingencias económicas se recurra a controles de precios. No se puede hacer costumbre que la respuesta sea el populismo.
Herminio Rebollo Pinal, “Mesa de negocios”, El Financiero, 14 de enero.

EL VIERNES FUE la primera reunión del año en el CCE que preside Armando Paredes. El tema del “Programa de Apoyo Familiar 2008” que ANTAD suscribió con Economía de Eduardo Sojo ocupó unos 40 minutos de una junta programada para hora y media. A la agrupación que lleva Vicente Yánez le llovió fuerte puesto que se le acusó de sumarse a una medida de carácter populista. El plan de reducción de precios fue catalogado como un regreso al pasado con la única diferencia de que ANTAD y el gobierno no consultaron a los industriales y al rubro agropecuario, que son de donde provendrá el esfuerzo. Como será que ni Concanaco de Luis Antonio Mahbub, ni Canaco de Lorenzo Ysasi entraron en la defensa de los autoservicios. En los cuestionamientos además del CNA que lleva Jaime Yesaki estuvieron también muy activos Concamin de Ismael Plascencia y Canacintra de Miguel Marón
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, El Universal, 14 de enero.

Lo peor de todo es que el presidente ejecutivo de la ANTAD, Vicente Yáñez, no asistió, por lo que fue Eugenio Carrión, vicepresidente de las tiendas departamentales y de autoservicio, quien intentó explicar lo sucedido y las causas del compromiso firmado el jueves. Nunca lo logró.
Aparentemente todo quedó en que se sentarán a platicar productores y comerciantes, así como con el secretario de Economía, Eduardo Sojo. Pero el mal sabor de boca nadie se los quita.
Herminio Rebollo Pinal, “Mesa de negocios”, El Financiero, 14 de enero

Armando Paredes, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), quien seguramente será reelecto para un segundo periodo al frente del organismo en marzo próximo, tendrá que demostrar que tiene dotes de malabarista para frenar la división al interior del CCE por el gran enojo de la Concamin, la Canacintra y el Consejo Nacional Agropecuario en contra de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) por el "Pacto Reloaded" que se lanzó la semana pasada para bajar los precios de 300 artículos básicos.
La ANTAD no tiene voto en el proceso de reelección en el CCE, pero sí lo tienen el CNA, que preside Jaime Yesaki y la Concamin, que encabeza Ismael Plascencia, quien es el más enojado porque los proveedores ni siquiera fueron consultados.
Maricarmen Cortés, “Desde el piso de remates”, El Economista, 15 de enero.

LE PLATICABA DEL disgusto que ocasionó al interior del CCE que preside Armando Paredes, el “Programa de Apoyo Familiar 2008” que concertó ANTAD con Economía de Eduardo Sojo. / La semana pasada, primero el miércoles en petit comité y luego el viernes en presencia de los 70 representantes del CCE, se cuestionó seriamente a la agrupación que lleva Vicente Yáñez. / En la primera junta hasta palabras altisonantes y calificativos se produjeron contra la tiendas de autoservicio y departamentales, al grado de que para el viernes Yáñez optó por dejar la responsabilidad a Eugenio Carrión, su segundo de abordo. / Las puntualizaciones más cortantes provinieron de Concamin que lleva Ismael Plascencia y el CNA de Jaime Yesaki. Incluso, Concanaco de Luis Antonio Mahbub y Canaco de Lorenzo Ysasi ni siquiera metieron las manos para defender a la ANTAD.
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, El Universal, 15 de enero.

Más allá del episodio anecdótico: la catarata de gritos y sombrerazos que consumió más de la mitad de la reunión mañanera del viernes pasado del pleno del CCE, la ira industrial contra las cadenas de autoservicio rebota en el gobierno.
La representación de la Concamin ante la cúpula de cúpulas culpó abiertamente a la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD), de tenderle la cama a la permanencia en el cargo del secretario de Economía, Eduardo Sojo.
La manzana de la discordia, como usted sabe, es la puesta en escena del Programa de Apoyo a la Economía Familiar que lanzó hace unos días el organismo, utilizando como punta de lanza a la cadena líder, Wal-Mart.
De acuerdo a la percepción de los industriales, aunque la medida tiene disfraz de pacto entre los sectores, ésta se recarga, toda, en el sacrificio de uno solo.
Ni el gobierno ni las cadenas, y en una de esas ni los trabajadores, ponen en la mesa un ápice.
Te compro a tanto, diría la conminatoria a los proveedores, bajo el clásico lo tomas o lo dejas.
Caravana, pues, con sombrero ajeno.
Alberto Barranco, “Empresa”, El Universal, 15 de enero.

Después de las reuniones del CCE el miércoles y el viernes pasado, en la que tanto Yesaki, como Plascencia hicieron público su enojo, Armando Paredes inició ya la labor "cicatriz", tratando de solucionar en la práctica las quejas que se presenten por el programa de descuento a los precios.
Sin embargo, la relación entre la ANTAD y los proveedores nunca ha sido fácil y han surgido ya voces en el sector industrial que pretenden reactivar la iniciativa de ley para regular la relación entre comercios y proveedores, que se frenó con una especie de acuerdo de sanas prácticas, que según la Concamin, no sirve para nada.
Maricarmen Cortés, “Desde el piso de remates”, El Economista, 15 de enero

Ahora que la gritería (“Estamos hablando, diría, rojo de rabia, el presidente de la Concamín, Ismael Plascencia, de una suerte de extorsión: O me rebajas o no te compro; o me aceptas las devoluciones o no te compro”), representa la gota que derramó el vaso en la de suyo traumática relación entre industriales y el gran comercio. Y si nos apuran otro poquito, entre el éste y el pequeño.
El primer nubarrón surgió al empecinamiento del Banco de México en utilizar a las cadenas como una suerte de inspectores de precios para evitar que se rebasara la meta de inflación prevista para el año pasado.
El mecanismo es tan simple como apretar las tuercas a los proveedores.
Más allá, la ira del sector productivo se volcó contra la ANTAD por haber negociado con el Congreso por la libre el tratamiento fiscal que se le daría este año a las empresas por acumulación de inventarios, lo que al final del día propició un incremento en la tasa del IETU.
Alberto Barranco, “Empresa”, El Universal, 15 de enero

Justo uno de los puntos que ahora se buscan empujar es justo normar geográficamente las zonas en donde los autoservicios se puedan establecer.
En países como España se promulgó una ley parecida con la intención de proteger al pequeño comercio. Y es que se cree que el gran comercio termina por fulminar a los chicos.
Entre los promotores de este nuevo intento para empujar esa ley están Concamin, CNA e incluso Concanaco.
Así que el programa ANTAD amenaza con tener secuelas más profundas. Habrá que ver.
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, El Universal, 15 de enero.

La revelación de la maniobra provocó la primera gritería contra las cadenas en el seno del pleno del Consejo Coordinador Empresarial. / Lo inaudito del caso es que el presidente ejecutivo del organismo, Vicente Yáñez, lo había sido antes de la Canacintra, es decir cambió de chaqueta para convertirse en verdugo de los intereses que defendió. / El tercer episodio llegó con cargo a Gigante, quien tras pactar su venta a la cadena Soriana decidió llevarse una tajada adicional pagando descuentos unilaterales en un margen de 20% a 40% para las mercancías que estaban en inventario. / La maniobra la frenó, a medias, la presión de las Cámaras industriales, con énfasis en la textil, del vestido y la propia cúpula. / Industriales contra el gran comercio. Grietas en la cúpula empresarial.
Alberto Barranco, “Empresa”, El Universal, 15 de enero

Los argumentos que aparecerán hoy en la comisión ejecutiva son, entre otros:
1) La industria y los productores agropecuarios insistirán en que no fueron consultados sobre el compromiso de rebajas y no aumento de precio en 51 categorías. No se vale pasar la factura al productor y hacer caravana con sombrero ajeno.
2) La industria querrá cobrar aquí también los recientes movimientos del gran comercio (Gigante-Soriana) en los que, para agilizar la operación de salida de Gigante se quiso obligar a los proveedores a aceptar pagos menores a los adeudos originales.
3) El problema para ANTAD es que sus lógicos aliados, Concanaco y Canaco, representantes del comercio organizado, en este caso aprovecharán para ponerse de perfil y cobrar así el eterno desplazamiento y rivalidad de influencia ante las autoridades. Esto por no recordar la tesis de que atrás de cada nueva tienda de una cadena comercial, desaparecen o se pone en riesgo a decenas o cientos de pequeños establecimientos.
4) También existen versiones en el sentido de que la ANTAD estaba obligada a pagar al gobierno los favores que le hizo en las negociaciones del IETU, donde el manejo de inventarios desdibujó muchas de las negociaciones del propio CCE.
Así, los de ANTAD van a necesitar un muy buen abogado para enfrentar los cargos que están sobre la mesa.
Herminio Rebollo Pinal, “Mesa de negocios”, El Financiero, 16 de enero.

Y AYER POR la tarde miembros del CCE que encabeza Armando Paredes estuvieron en Economía para entrevistarse con Eduardo Sojo y aclarar lo del Programa de Apoyo Familiar 2008 que se firmó con ANTAD de Vicente Yánez. Organismos como Concamín de Ismael Plascencia, CNA de Jaime Yesaki y la propia Concanaco de Luis Antonio Mahbub han puesto el grito en el cielo. Parece que se firmó la pipa de la paz
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, El Universal, 16 de enero.

Concamin, Careintra y Consejo Nacional Agropecuario piden una ley de prácticas, porque consideran que el estado actual de las cosas les perjudica. Se quejan de abusos de las grandes cadenas comerciales y piden la intervención de las autoridades. El tema de ahora es el programa de descuentos; a finales del año pasado fueron los aranceles a los productos chinos y, en enero de 2007, el precio de las tortillas. ANTAD argumenta que no hace falta una ley porque existe un convenio de concertación de prácticas comerciales, que se firmó en mayo de 2006. Es preferible la autorregulación que abrir la puerta a la intervención del gobierno, consideran los grandes comerciantes.
El convenio no satisface a los representantes industriales y agropecuarios. Una de sus limitaciones es que no incluye sanciones por incumplimiento. Se quejan de que los grandes comercios han hecho valer su fuerza e impuesto condiciones onerosas a sus proveedores: plazos de pago demasiado largos, devoluciones injustificadas y obligación de contribuir en determinadas promociones.
Luis Miguel González, “Caja Fuerte”, Milenio, 17 de enero.

LE PLATICABA DE la reunión que hubo este miércoles en Economía entre Eduardo Sojo y el CCE que preside Armando Paredes para dirimir las diferencias en torno al Programa de Apoyo Familiar 2008. Estuvieron casi todos, Claudio X. González del CMHN, Enrique Castillo por la ABM, José Morales de AMIS, Valentín Díez Morodo del Comce, Ismael Plascencia de Concamin, Jaime Yesaki del CNA y Luis Antonio Mahbub de Concanaco. Faltaron Miguel Marón de Canacintra y Lorenzo Ysasi de Canaco. Aunque la intención era firmar la pipa de la paz, aún habrá que esperar. Sojo pidió el apoyo de la IP al esfuerzo suscrito con ANTAD que dirige Vicente Yáñez. Sin embargo los del CCE pidieron antes establecer acuerdos con las tiendas de autoservicio, puesto que al final de cuentas la industria pagará los platos rotos del plan de descuentos de aquí a marzo. El martes habría otra reunión para avanzar en el espinoso expediente, aunque se espera que antes haya contactos con la propia ANTAD y los industriales representados por Plascencia Núñez. El encuentro sería con el flamante presidente de ANTAD, José Manuel Sánchez, responsable comercial de Soriana. Por lo pronto tanto Concamin como CNA y Concanaco abandonaron el comité que hace 2 años se formó para que la industria negociara con los autoservicios las políticas de descuento, precios y en general de comercialización que éstas fijan a sus proveedores. Esto en función de lo que se pactó entonces al suavizar la Ley de Prácticas Comerciales. Ahora el CCE busca con los diputados empujar una propuesta más dura que norme el accionar de los miembros de ANTAD. Así que como ve, a este expediente le sobra cuerda
Alberto Aguilar, “Nombres, nombres y nombres”, El Universal, 18 de enero.

Tras reiterar su inconformidad con abusos de comerciantes con pretexto de ayudar a los consumidores –pues los costos se cargan a productores– la Confederación de Cámaras Industriales informó que inició pláticas con la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales y con la Secretaría de Economía, para conciliar intereses y favorecer la economía familiar…
Miguel Ángel Rivera, “Clase Política”, Reforma, 18 de enero.