Autonomía y sólo decisiones técnicas, mandato en Ifetel

Uno de los principales temas que el Consejo Rector del Pacto por México abarcó en la reforma de telecomunicaciones es la creación del Instituto Federal de Telecomunicaciones (Ifetel), el cual será autónomo, tendrá la facultad de regular y reordenar a este sector.

Los comisionados de la institución deberán contar con un perfil más técnico que político, con el fin de evitar el reparto de cuotas entre partidos o cercanía con las empresas que deberán regular.

Para ello se creará un comité de evaluación, conformado por los titulares del Banco de México (Banxico), la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El comité deberá enviar sus listas de candidatos  45 días después de la entrada en vigor de la reforma constitucional. Por cada vacante, el Comité de Evaluación enviará al Ejecutivo una lista con un mínimo de tres y un máximo de cinco aspirantes que hayan obtenido las calificaciones aprobatorias más altas. 

El Ejecutivo tiene 10 días naturales para seleccionar de entre esos aspirantes a quienes propondrá para su ratificación al Senado.

INICIATIVAS. La reforma en telecom modificará ocho artículos de la Constitución  y por lo menos  alteraría a una docena de leyes secundarias. En la iniciativa se plasma la intención de reestructurar el nivel de competencia  del sector y proponer un nuevo esquema de participación que impactará directamente a los concesionarios  de televisión abierta y restringida.

Se propone la licitación de dos nuevas cadenas de televisión  abierta a nivel nacional. En el tema de must offer y el must carry, las cableras con bajos recursos  podrán transmitir los contenidos de televisión abierta de manera gratuita. Para transmitir contenidos de canales abiertos, las cableras con recursos económicos tendrán que pagar un porcentaje a Televisa y TV Azteca.

Elizabeth Albarrán, La Crónica, 11 de marzo.