Arropan 12 gobernadores a Eruviel al rendir protesta

Eruviel Ávila rindió protesta como candidato del PRI a la gubernatura del Estado de México en un acto avalado en forma unánime por 623 integrantes del Consejo Político Estatal presentes, de 676, y atestiguado por 12 mandatarios estatales, encabezados por el local Enrique Peña Nieto, así como por líderes partidistas y legisladores.

El ex alcalde de Ecatepec buscó al gobernador para estrecharle la mano y fundirse en un abrazo después de haber hecho esto con el líder nacional priista, Humberto Moreira, quien le había tomado la protesta estatutaria.

En el templete se sumaron los demás gobernadores que acudieron a la sede estatal del PRI, y juntos corearon con centenares de dirigentes y militantes: “¡Vamos a ganar!, ¡Vamos a ganar!”, que se convirtió en “¡Duro!, ¡Duro!”.

Ahí mismo, por separado, también festejaron con Ávila los ex gobernadores mexiquenses Ignacio Pichardo, Emilio Chuayffet, Alfredo del Mazo González y César Camacho.

Moreira había dejado claro en su discurso que Eruviel “es vivo testimonio de que el PRI premia el trabajo y el esfuerzo, de que en el PRI se reconoce la militancia, los resultados y la formación política que da respuestas y soluciones a la gente”.

Con ello daba por cerrado el capítulo de los aspirantes, entre ellos Alfredo del Mazo Maza, primo de Peña Nieto y señalado como el favorito de éste. Otro que fue prospecto, Luis Videgaray, presidió la sesión solemne que dio la formalidad al lanzamiento de Ávila.

Moreira festejó “la unidad del partido”, así como “la madurez de nuestros cuadros políticos del Estado de México, la lealtad al partido y la visión clara de trabajar todos los días por un México más justo. Estamos aquí unidos con Eruviel”.

Y el abanderado priista, quien dijo que su partido le enseñó “a competir y ganar a la buena”, pero sobre todo a escuchar y resolver las necesidades de la gente, hizo cinco compromisos que, como su antecesor, firmará ante notario público, como una de esas obligaciones.

El primero será escuchar a la gente de “todos los rincones” de la entidad; otro, que jamás olvidará sus orígenes y siempre estará del lado de los priistas, “porque finalmente soy uno más de ustedes, no los defraudaré”.

El tercer compromiso es debatir con respeto: “mi convicción, la cual siempre defenderé, no será sinónimo de cerrazón ni de descalificación”, y el otro, “entregaré muy buenos resultados, mis palabras serán hechos”, para lo cual, dijo, seguirá el ejemplo de todos los gobernadores de extracción priista.

El presidente nacional del PRI ensalzó a Ávila como “el mejor reflejo de un PRI renovado y democrático; ha ganado cuatro elecciones en el municipio más poblado del país (Ecatepec) y siempre lo ha hecho escuchando, siempre con humildad. ¡Siempre!”.

Dijo que el hoy candidato a gobernador siempre ha dicho la verdad, “mientras en otros lados siguen diciendo lo mismo que decían hace años. El PRI se ha transformado; hoy el PRI es el partido de los jóvenes, es el partido del futuro”.

Los asistentes

Los gobernadores ocuparon lugares a un costado del presidio. Peña Nieto estuvo flanqueado por la yucateca Ivonne Ortega y el queretano José Calzada.

En esa área estaban también Roberto Borge, de Quintana Roo; Francisco Olvera, Hidalgo; Carlos Lozano, Aguascalientes; César Duarte, Chihuahua; Fernando Toranzo, San Luis Potosí; Javier Duarte, Veracruz; Miguel Alonso, Zacatecas; Fernando Ortega, Campeche, y Jorge Herrera, Durango.

A la toma de protesta también acudieron Jorge Emilio González, presidente del PVEM, y Jorge Kahwagi del Panal.

Toluca. Mauricio Pérez, Milenio, 10 de abril.