Eliminar tenencia, dilema para los estados

Juan Pablo Arriaga, concesionario de Chrysler en Michoacán, se dice dispuesto a todo para evitar que el cobro de la tenencia en su estado le arrebate clientes en 2012. En los días posteriores al puente del 15 de septiembre, Arriaga estuvo en la Ciudad de México para reunirse con los dirigentes nacionales de su gremio, la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMDA), en su batalla por lograr que Michoacán elimine el cobro de la tenencia, tal como han anunciado que harán Puebla, Estado de México, Coahuila, Guanajuato. A partir de enero de 2012, la tenencia será eliminada como un impuesto federal, pero queda a criterio del ejecutivo y legislativo de cada estado mantener o no su cobro. Desde 2007, el presidente Felipe Calderón Hinojosa promovió la eliminación del impuesto, cuyo importe se transfiere a los estados, pero la medida enfrentó resistencias y se pospuso para diciembre de 2011. Como paso intermedio y para estimular el mercado automotriz golpeado por la crisis, en junio de 2010 Felipe Calderón exentó del pago de la tenencia el primer año a quienes compraran un vehículo nuevo, siempre que el valor de la unidad no fuera mayor a 250 mil pesos. Esa medida culmina en diciembre y en enero entra en vigor la eliminación total del impuesto. Pero algunas autoridades locales dicen que enfrentarán dificultades presupuestales si dejan de percibir el ingreso relativo a la tenencia. La alternativa para concesionarios y armadoras automotrices es que los diputados federales, que discuten el presupuesto de ingresos presentado por el gobierno federal, acepten modificar la iniciativa que les entregó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en el renglón de participaciones federales para restituirle a los estados con recursos de la Federación el dinero que dejarán de recibir por la tenencia. Este año la recaudación federal por este impuesto ascenderá a 17 mil 182.8 millones de pesos, según la Ley de Ingresos para 2011, pero en 2009, antes del estímulo o subsidio decretado por Felipe Calderón para los vehículos de menor precio, se recaudaron 21 mil 50.3 millones de pesos. Sustituyen impuesto Michoacán no es el único estado que hasta ahora ha dicho que mantendrá el cobro de la tenencia. En Nuevo León también se cobra el impuesto a los vehículos nuevos y se les subsidia a los de más de seis años de antigüedad, en tanto que en el Distrito Federal se planea, de acuerdo con versiones no confirmadas por las autoridades, sustituir la tenencia por un impuesto ecológico. Las posturas diferenciadas de los estados respecto del impuesto ya iniciaron, pero se agravarán en 2012, dice Guillermo Rosales, director de relaciones institucionales de AMDA. Un ejemplo es el estado de Coahuila, donde no sólo no se cobra la tenencia sino que además las autoridades locales subsidian el Impuesto Sobre Automóviles Nuevos (ISAN), lo que atrae a consumidores del vecino estado de Nuevo León que sí cobra ambos impuestos, agrega Rosales. En tanto, consumidores de Veracruz, donde se subsidia el impuesto solo a vehículos con precio menor a 230 mil pesos, optan por comprar sus unidades en Puebla, donde no se cobra la tenencia. “Hemos manifestado desde diciembre de 2007 es que este modelo no es el más apropiado”, dice Rosales. Una situación similar podría presentarse en el Distrito Federal, que por concepto de tenencia recibe cada año alrededor de 6 mil millones de pesos. En el caso de que la Cámara de Diputados no acepte modificar el presupuesto de egresos para resarcir a las entidades lo que dejarán de recibir por tenencia y el gobierno de la Ciudad impone un impuesto verde, los capitalinos comprarán sus vehículos en el Estado de México, cuyo gobernador entrante Eruviel Ávila prometió como candidato eliminar la tenencia (aunque no hay ningún documento que oficialice esa decisión), dice Erasto Ensástiga, presidente de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Los impuestos verdes en otros países los pagan los dueños de los vehículos más viejos y eso mismo podría comenzar a discutirse en las próximas semanas en la capital del país pues no será fácil que el Congreso de la Unión acepte restituir a los estados lo que pierden con la eliminación de la tenencia, estima el diputado local, quien agrega que la decisión del Cámara de Diputados en este tema podría conocerse a mediados de octubre. En Jalisco, otro de los mayores mercados automotrices, el gobierno local ha expresado la intención de mantener el impuesto, sin embargo el Congreso local votó negativamente la iniciativa y, por tanto, hasta ahora no se considera su pago para 2012, dice Rosales. El desorden provocado por la eliminación de la tenencia refleja las debilidades del sistema fiscal del país, que es centralizado en lo relativo a los ingresos pero descentralizado en el gasto y que ante cualquier cambio deja a las finanzas públicas ante el vacío, dice Miguel González, especialista en finanzas públicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). La tenencia nació mal, como un impuesto en teoría temporal para solventar los gastos por los Juegos Olímpicos de 1968, y muere mal, con medidas discordantes sólo para salir del paso y sin una revisión del modelo federalista que dé a los estados fuentes propias de recaudación, agrega el académico. La AMDA espera que la Comisión Nacional de Gobernadores (CONAGO) impulse su propuesta ante los diputados federales. La propuesta de eliminar la tenencia en todas las entidades federativas y restituir a los estados el importe lo que recibían por ese impuesto lleva tiempo que se discute con los secretarios de finanzas de los estados, pero es la conjugación de condiciones económicas y políticas las podrían permitir que en los próximos meses o semanas se construya una corriente mayoritaria a favor de esa iniciativa, señala Rosales. “No podríamos anticipar si tendrá o no éxito, estamos trabajando en eso y hay gobernadores que van en esa misma línea”, aclara. Ante la falta de tiempo hace una revisión a fondo del sistema fiscal, si el Congreso toma una decisión respecto de la tenencia a escala nacional es posible que sea según la conveniencia de los grupos políticos, aunque también es probable que deje las cosas como están, dice González, de la UNAM. “El tema es espinoso por ser 2012 un año electoral pues el impuesto podrá ser usado para señalar a quienes tienen su cobro”, anticipa. Concesionarios buscan alternativa En tanto, los concesionarios buscan salidas alternas. Para evitar que el traslado de sus clientes a comprar sus vehículos a otro estado del país afecte su negocio, Arriaga se dice dispuesto a crear un domicilio fiscal en un estado en donde no se cobre la tenencia y matricular ahí los vehículos comprados por sus clientes michoacanos. “No dejaremos ir ni un solo cliente”, señala enfático quien es también presidente de AMDA en el estado. Según el empresario, Michoacán obtiene por concepto de tenencia 500 millones de pesos, de un presupuesto total de 45 mil millones. Las autoridades michoacanas no atendieron la petición de información sobre este tema. Las ventas automotrices van en aumento en el país, si bien aún no recuperan el volumen que tenían antes de la crisis. En el periodo enero-agosto se vendieron más de 667 mil unidades, 11.5% más que en el mismo lapso de 2010, pero casi 20% debajo de lo vendido en los primeros ocho meses de 2007, el mejor año en tiempos recientes. AMDA no prevé una baja en las ventas en 2012 en el caso de que algunos estados mantengan la tenencia y otros la eliminen, pero sí anticipa distorsiones a escala regional. “No prevemos una variación ni hacia arriba ni hacia abajo en el total de vehículos vendidos en México (…) la eliminación de la tenencia tendrá un efecto neutro, lo que nos preocupa es la distorsión regional”, concluye Rosales. Zacarías Rosales, El Universal, 3 de octubre.