Prevé ONU refugiados por cambio climático

Las condiciones de vida de la población en algunos estados del sureste mexicano que habitan muy cerca del mar, podrían verse más afectados por los efectos del cambio climático y desastres naturales anticipó Joan Clos, director Ejecutivo del programa de Naciones Unidas para Asentamientos Humanos (Habitat). "En el sur de México también hay cierta probabilidad en este sentido (aumento en el nivel del mar), porque hay algunas ciudades y estados donde el nivel de vivienda se produce muy cerca del agua", afirmó el también subsecretario general adjunto de Naciones Unidas. En conferencia de prensa para anunciar la conmemoración del Día Mundial del Hábitat que el próximo lunes se celebrará en la ciudad de Aguascalientes, el funcionario estimó que las siguientes dos décadas se tendrán en el mundo un estimado de 200 millones de refugiados ambientales por el incremento en el nivel del mar, además de problemas de sequía y desertificación, sólo en América Latina serán 12 millones. El ex alcalde de Barcelona, señaló que el mensaje que quiere transmitir no es "terrorífico", sino que su objetivo es sensibilizar a todos los agentes urbanos, gobernantes y ciudadanos, además de instituciones sobre el tema del reto de la urbanización. "No deseamos ser tremendistas, sino realistas y pretendemos reflexionar con los gobiernos en medidas para mejorar la situación y no quedarnos sólo con el pánico", afirmó. Acompañado de la subsecretaria de Desarrollo y Ordenamiento Territorial de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Sara Topelson, quien destacó que en México el 73 por ciento de la población es urbana y son las ciudades los mayores emisores de contaminantes, es en ellas donde se puede incidir en estrategias contra el cambio climático. "Nuestras ciudades presentan un gran reto por el fenómeno de expansión con el que han crecido. Disociación entre el crecimiento económico y de la mancha urbana", explicó Clos. En el mundo, dijo, estamos en un proceso de urbanización acelerada con consecuencias económicas y sociales importantes, por lo que es necesario afrontarlo desde un punto de vista global, porque la urbanización está afectando el equilibrio del planeta. "Pero si la urbanización se hace mal, se generan problemas que lejos de mejorar las condiciones sociales y disminuir desigualdades en la población, puede incrementarlas y generar problemas económicos y ambientales", dijo. Este año con el tema de "Ciudades y cambio climático", la ONU estima que las ciudades producen 75 a 80 por ciento de todos los Gases de Efecto Invernadero en el mundo, cuya población se concentra en apenas 2 por ciento del planeta. "Cuando decimos que la población urbana es responsable de estos contaminantes, quiere decir que la mitad de estos gases se producen en la ciudad básicamente por transporte privado, falta de aislamiento de viviendas y polígonos industriales y, lo demás lo generan los ciudadanos, cuando consumimos productos de otros sitios y ahí se emiten los contaminantes", detalló el funcionario. Aparte de contribuir con la emisión de contaminantes, las urbes sufren las consecuencias del cambio climático como sequías, falta de agua e inundaciones. El mensaje de la ONU es desarrollar políticas de adaptación al cambio climático porque ya más del 50 por ciento de la población del mundo vive en ciudades, y se estima que en los próximos 30 años serán 9 millones los habitantes de ciudades en el planeta. "No podemos cerrar los ojos. Exige compromiso político y voluntad de acuerdo entre los diferentes actores urbanos para tomar decisiones. Naciones Unidas propone como medida prioritaria la revalorización de la planificación urbana que es un fenómeno que quedó en el ostracismo", afirmó. Adriana Alatorre, Reforma, 1º de octubre.