La gratuidad de la educación nunca ha estado en riesgo, afirma Aguirre Rivero

El gobernador Ángel Aguirre Rivero dijo ayer que sólo quienes se colocan una venda en los ojos no pueden entender que la educación tiene que cambiar.

Al rendir su segundo informe de gobierno, en sesión solemne en el Congreso estatal, expresó asimismo su respaldo y solidaridad para que las reformas estructurales del Pacto por México se completen y avancen.

“La Cruzada Nacional contra el Hambre, así como la reforma laboral, en telecomunicaciones  y en particular la reforma educativa, se  sentarán la bases para los cambios en el país”, dijo el mandatario.

En alusión al conflicto magisterial que inició el pasado 25 de febrero, aseguró que la gratuidad de la educación nunca ha estado en riesgo en el país y en particular en Guerrero. 

“Para alentar la violencia se han dedicado a distorsionar esta reforma diciendo que los maestros perderán sus fuentes de trabajo, es todo lo contrario, de lo que se trata es de elevar la calidad de la educación, que se acabe con el ausentismo, con los comisionados y que tengamos maestros mejores preparados”, dijo además Aguirre Rivero.

Luego afirmó que su gobierno ha sido tolerante con la disidencia magisterial, pero advirtió que no permitirán que miles de niños pierdan sus clases.

Por ello, el mandatario hizo un llamado a los dirigentes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (CETEG) a anteponer sus intereses personales a los intereses del estado.

Aguirre Rivero llegó a la sede del Congreso acompañado del subsecretario de Sedesol, Javier Guerrero, representante del presidente Enrique Peña Nieto en el evento, y del presidente del Tribunal Superior de Justicia de Guerrero, Jesús Martínez.

La Crónica, 30 de abril.