Critican mayor déficit para 2012

La decisión de los legisladores de aumentar el déficit del Gobierno federal de 0.2 a 0.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) para 2012 fue considerada por especialistas como una salida fácil que pondrá presión a las finanzas públicas. "Creo que sí, definitivamente fue una salida fácil. "Para poder hacerse llegar de mayores recursos, en lugar de meterle más presión a la dinámica de recaudación, se van por mayor déficit", advirtió Héctor Moreno, investigador del departamento de Derecho y Políticas Públicas del Tec de Monterrey. El nuevo déficit que se aprobó ayer en la Cámara de Diputados impondrá una carga no sólo para este año, sino para los siguientes, indicó. Ayer, los legisladores realizaron diversas modificaciones a las variables macroeconómicas de la Ley de Ingresos, entre ellas, el déficit público, que elevaron de 0.2 por ciento del PIB planteado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) a 0.4 por ciento. Dicha modificación representa la posibilidad al Gobierno federal de adquirir obligaciones hasta por 74 mil millones de pesos en el ejercicio fiscal del próximo año. Para Moreno, los legisladores modificaron el déficit, en primer lugar, por tratarse de un año electoral y para poder utilizar mayores recursos públicos, y segundo, por la presión de las entidades federativas. Una posible solución para tener un mayor gasto sin tener que recurrir al endeudamiento sería una mayor recaudación, pero cambios fiscales importantes en un año electoral es algo que en la política mexicana está descartado, subrayó. Emiliano Shea, especialista en Finanzas Públicas del Centro de Investigación para el Desarrollo (CIDAC), destacó que al no haber una justificación clara para aumentar el déficit por parte de los diputados, se podría concluir que buscaban mayores recursos, que podrían ser para uso discrecional. "Simplemente aumentar por aumentar en un año electoral es una movida que lo que permite son más recursos para su uso discrecional", enfatizó. Shea agregó que la falta de transparencia en el manejo de gran parte de los recursos públicos en el País complica aún más el panorama y levanta dudas sobre el uso correcto de la deuda que el Gobierno federal podrá adquirir el próximo año. Armando Chacón, director de Investigación del Instituto Mexicano para la Competitividad, destacó que el tema de la transparencia y la rendición de cuentas no se puede dejar de lado, independientemente del nivel de déficit aprobado por el Congreso. Gonzalo Soto, Reforma, 21 de octubre.