Gobiernos de Cuba y Venezuela sellan nueva era de colaboración


Los presidentes de Cuba, Raúl Castro, y de Venezuela, Nicolás Maduro, se reunieron este sábado en La Habana para revisar y ratificar su “alianza estratégica”, en una nueva etapa, con la firma de acuerdos de cooperación en materia de salud, educación, cultura, deportes, economía y energía.
Maduro, quien llegó a la capital cubana la noche del viernes, fue recibido en el aeropuerto por el canciller Bruno Rodríguez. Su visita tuvo como propósito participar en la instalación de la décimo tercera reunión de la Comisión Intergubernamental Cuba- Venezuela, con el fin de fortalecer los lazos de colaboración, como anticipó previamente durante una gira por la región occidental venezolana de Zulia.
La comisión mixta sesionó bajo la dirección del ministro venezolano de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, y del titular cubano de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Isidoro Malmierca. Se trata de una “alianza estratégica” creada hace 12 años por sus predecesores, Fidel Castro y el fallecido Hugo Chávez, que en 2012 sumó 47 programas con un valor total de mil 600 millones de dólares.
La tarde de este sábado el mandatario venezolano fue objeto de una recepción oficial en el Palacio de la Revolución con su anfitrión Raúl Castro, con quien sostuvo en seguida conversaciones oficiales en el mismo recinto. Durante la pasada campaña presidencial Maduro prometió que se mantendría “firme” junto a Cuba y que reforzaría la relación bilateral.
Asimismo, Maduro dijo haberse reunido 5 horas con Fidel Castro y que estuvieron “recordando al gigante”, en alusión a Chávez. “Siempre optimistas con la marcha de la revolución latinoamericana”, añadió en su cuenta de Twitter, y apuntó que con Fidel visitaron a algunos de los 50 mil venezolanos con dolencias graves que están siendo atendidos por médicos de la isla.
Acompañado por el canciller Rodríguez, Maduro rindió homenaje al héroe nacional cubano José Martí en la Plaza de la Revolución. Destacó que Fidel Castro y Hugo Chávez “construyeron esta relación que va más allá de una alianza estratégica, porque es de hermanos”. Calificó al líder de la revolución cubana de “gigante, vinculado con las grandes causas de la humanidad en los últimos 70 años”.
Cuba es el segundo país que visita Maduro tras ser electo con un corto margen (50.66 por ciento contra 49.07), el pasado 14 de abril, en unos comicios impugnados por el candidato opositor Henrique Capriles, quien critica al gobierno su relación político-económica con La Habana. El 19 de abril Maduro viajó a Perú para una reunión de la Unión de Naciones Sudamericanas, donde obtuvo su respaldo.
“Mañana vamos a firmar los acuerdos de la nueva etapa de cooperación para ratificar la alianza estratégica con el gobierno socialista de Cuba”, aseveró Maduro poco antes de viajar a la isla. Este día afirmó a la prensa que “la revolución cubana ha sido un faro de dignidad, independencia y socialismo para la región y el mundo”.
Los ejes fundamentales de esa cooperación bilateral son la venta a Cuba de unos 130 mil barriles diarios de petróleo en condiciones preferenciales de pago y el trabajo en Venezuela de unos 45 mil colaboradores cubanos, fundamentalmente médicos, paramédicos, instructores deportivos y asesores en diversos planes sociales.
La venta de servicios médicos y especializados es la principal fuente de ingresos de la isla, superando 6 mil millones de dólares anuales, que proceden fundamentalmente de Venezuela.
La alianza fomentada por Hugo Chávez y Fidel Castro en octubre de 2000 fue fundamental para la economía de la isla, sumida en una fuerte crisis desde la desaparición de la antigua Unión Soviética y del llamado bloque socialista europeo, a principios de los años 90, sus principales aliados de la época.
Venezuela se convirtió desde entonces en el principal aliado político y económico de La Habana, con relaciones comerciales que ya en 2010, según los datos más recientes publicados por La Habana, constituían cerca de 40 por ciento del comercio exterior de Cuba.
Pero la cooperación se extendió a diversas ramas, entre ellas la petroquímica. Ambos países administran una refinería en Cienfuegos, centro-sur de Cuba, donde desarrollan un polo industrial.
Los programas desarrollados también incluyeron la atención médica en la isla de más de 70 mil venezolanos enfermos y más de 676 mil cirugías oftalmológicas practicadas en los dos países a venezolanos, dentro de la Operación Milagro.
Al cierre de esta edición se informó que con la clausura de la reunión mixta concluía la agenda en el Palacio de las Convenciones, tras lo cual Maduro y su comitiva regresarían a Caracas la noche del sábado.
En la capital venezolana, el opositor Henrique Capriles insistió en su alegato de que Maduro viajó a Cuba para recibir “instrucciones de su jefe”, argumento que ya ha esgrimido en otras ocasiones. El opositor, quien mantiene sus acusaciones de “ilegitimidad” del mandatario, durante la campaña electoral de comienzos de abril solía acusarlo de ser el “candidato” de La Habana.
Arrestan a líder opositorLa dirigencia del opositor partido venezolano Voluntad Popular denunció que fue arrestado uno de sus integrantes, el ex general Antonio Rivero, luego de que el gobierno difundió un video en el que éste presuntamente organizaba a estudiantes en protestas poselectorales. Aseveró que se trata de “una detención ilegal, injustificada e ilegítima”.
La fiscalía confirmó el arresto de Rivero y dijo que será presentado en las próximas horas ante “un tribunal de control, por su presunta vinculación con hechos de violencia ocurridos recientemente en el país”. Las protestas después de los comicios dejaron nueve muertos y decenas de heridos, y las autoridades responsabilizan de esos hechos a líderes opositores.
Rivero, quien en el pasado tuvo buenas relaciones con el chavismo, rompió al denunciar la presencia de militares cubanos en las fuerzas armadas de Venezuela. A la fecha sigue pendiente un juicio en su contra, desde que fue imputado en agosto de 2010 por delitos de “ultraje” a las fuerzas armadas y revelación de informaciones castrenses secretas.
En tanto, el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela llamó a los trabajadores a marchar el primero de mayo en respaldo al proceso revolucionario y en rechazo a lo que calificó de “violencia instigada por la derecha”. El diputado Darío Vivas enfatizó que esta será la primera vez que marcharán sin la presencia del líder bolivariano Hugo Chávez, a quien rendirán homenaje.
En Quito, el presidente ecuatoriano Rafael Correa comentó que existe una campaña para deslegitimar las elecciones en Venezuela y a su presidente, Nicolás Maduro. Señaló que los “conspiradores de siempre” están detrás de una campaña publicitaria en ese sentido, sobre la base de que el triunfo de Maduro fue estrecho y apostando al desgaste del gobierno y su desestabilización.

La Jornada, 28 de abril.

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