El presidente de EU, Barack Obama, espera que se alcance una reforma migratoria en los próximos meses, y cumplir así la promesa con la que convenció al 70 por ciento de los votantes latinos para que lo reeligieran en las elecciones presidenciales de noviembre.
En una reunión celebrada la noche del miércoles en San Francisco, el mandatario demócrata anticipó que “la reforma migratoria es algo que creo que pueden llevarse a cabo durante el próximo par de meses”.
“Yo soy muy optimista y la razón de que soy optimista es porque la gente emitió su opinión a través de las urnas”, dijo.
“Nación de inmigrantes”. Obama destacó que la petición de los latinos fue que “consiguiéramos finalmente arreglar un sistema inoperante de inmigración, y asegurarnos de que ambos queremos una nación de leyes y una nación de inmigrantes”.
El mandatario emitió sus declaraciones en una gira de dos días por California para recaudar fondos para candidatos demócratas al Congreso, con vistas a recuperar la mayoría en la Cámara de Representantes.
Hace dos semanas, el mandatario estadunidense se comprometió en Washington con una delegación de empresarios representantes de Silicon Valley, sede de la alta tecnología estadunidense, a promover una reforma migratoria que fortalezca el sistema de visas para empleados calificados.
Con las armas, pesimista. Por el contrario, Obama se mostró menos optimista con el otro frente de reforma abierto, el de las armas.
“Va a ser más difícil conseguir una mejor legislación para reducir la violencia con armas de fuego a través del Senado y la Cámara de Representantes, algo que muchos de nosotros, creo, queremos ver”.
“Pero aún creo que se puede lograr si la gente es activa y se involucra”, agregó el presidente.
No hay prisas. El optimismo de Obama puede, sin embargo, ser bruscamente frenado por los legisladores republicanos, muchos de los cuales no tienen prisa en pronunciarse.
“Un apresuramiento a legislar, sin considerar completamente todas las opiniones y la participación de todos los senadores sería fatal para el esfuerzo de ganar la confianza pública”, escribió el senador de origen Cubamo Marco Rubio al presidente Obama.
Como reacción a la carta de Rubio, la organización promigrante America´s Voice se preguntó: “¿Qué pasa con Rubio? Primero acepta un camino a la ciudadanía y luego trata de poner frenos a una ley migratoria”.
En una reunión celebrada la noche del miércoles en San Francisco, el mandatario demócrata anticipó que “la reforma migratoria es algo que creo que pueden llevarse a cabo durante el próximo par de meses”.
“Yo soy muy optimista y la razón de que soy optimista es porque la gente emitió su opinión a través de las urnas”, dijo.
“Nación de inmigrantes”. Obama destacó que la petición de los latinos fue que “consiguiéramos finalmente arreglar un sistema inoperante de inmigración, y asegurarnos de que ambos queremos una nación de leyes y una nación de inmigrantes”.
El mandatario emitió sus declaraciones en una gira de dos días por California para recaudar fondos para candidatos demócratas al Congreso, con vistas a recuperar la mayoría en la Cámara de Representantes.
Hace dos semanas, el mandatario estadunidense se comprometió en Washington con una delegación de empresarios representantes de Silicon Valley, sede de la alta tecnología estadunidense, a promover una reforma migratoria que fortalezca el sistema de visas para empleados calificados.
Con las armas, pesimista. Por el contrario, Obama se mostró menos optimista con el otro frente de reforma abierto, el de las armas.
“Va a ser más difícil conseguir una mejor legislación para reducir la violencia con armas de fuego a través del Senado y la Cámara de Representantes, algo que muchos de nosotros, creo, queremos ver”.
“Pero aún creo que se puede lograr si la gente es activa y se involucra”, agregó el presidente.
No hay prisas. El optimismo de Obama puede, sin embargo, ser bruscamente frenado por los legisladores republicanos, muchos de los cuales no tienen prisa en pronunciarse.
“Un apresuramiento a legislar, sin considerar completamente todas las opiniones y la participación de todos los senadores sería fatal para el esfuerzo de ganar la confianza pública”, escribió el senador de origen Cubamo Marco Rubio al presidente Obama.
Como reacción a la carta de Rubio, la organización promigrante America´s Voice se preguntó: “¿Qué pasa con Rubio? Primero acepta un camino a la ciudadanía y luego trata de poner frenos a una ley migratoria”.
Michelle planta espinacas en la Casa Blanca
La primera dama de EU, Michelle Obama, invitó ayer a la Casa Blanca a una veintena de niños de distintas escuelas del país para plantar espinacas y otros vegetales en el huerto que mantiene en uno de los jardines de la residencia.
Esta iniciativa se enmarca en apoyo de la campaña “Let’s Move” (Movámonos), que abandera la mujer de Obama en su cruzada contra la obesidad que afectan a los niños estadunidenses.
Esta iniciativa se enmarca en apoyo de la campaña “Let’s Move” (Movámonos), que abandera la mujer de Obama en su cruzada contra la obesidad que afectan a los niños estadunidenses.
La Crónica, 5 de abril.
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