“Está grave, tiene muchas complicaciones”, declaró Alicia Hernández, una enfermera jubilada, vía telefónica desde Santa Clara, 280 km al este de La Habana, donde el periodista de 48 años se encuentra hospitalizado desde el 11 de marzo.
El médico opositor Ismel Iglesias confirmó que Fariñas está diagnosticado “grave con peligro para la vida” y que las complicaciones que tiene en esta ocasión son “más severas” que otras que ha presentado.
Aunque faltan los resultados de varias pruebas practicadas, hay sospechas que Fariñas tenga “un trombo en el cuello” y “problemas renales, hepáticos y está muy inflamado”, añadió Hernández.
Los médicos del hospital “han mostrado gran preocupación por el estado de salud de Guillermo, se le está checando cada hora”, comentó Iglesias, quien precisó que no obstante la presión arterial está normal.
Fariñas, psicólogo de profesión, inició su ayuno el 24 de febrero pasado, un día después de la muerte del preso opositor Orlando Zapata tras 85 días de huelga de hambre, lo cual desató críticas de Estados Unidos, la Unión Europea y organismos internacionales de derechos humanos.
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