Ciudad Victoria, Tamps., 29 de junio. Las líneas de investigación para esclarecer el asesinato de Rodolfo Torre Cantú, candidato a gobernador por la coalición Todos Tamaulipas, abarcan aspectos de carácter criminal, social y entorno político, a partir de la pregunta ¿a quién convino la muerte del abanderado del PRI?, revelaron funcionarios del gobierno federal que participan en las indagatorias.
Una de las bases para considerar cuestiones de carácter político es que Torre Cantú fue el candidato a diputado que obtuvo la mayor cantidad de votos a escala nacional en los comicios federales de julio de 2009, y estaba adelante en todas las encuestas para los comicios del próximo 4 de julio.
La posibilidad de que el ataque lo perpetrara un grupo del crimen organizado se estima en razón de que desde hace un año los cárteles de Los Zetas y del Golfo rompieron sus alianzas y ahora se disputan palmo a palmo el control del tráfico de drogas en la entidad, señalaron las fuentes consultadas.
“Era para los priístas tamaulipecos la esperanza de estar mejor, era quien podía traer la paz y la tranquilidad a la entidad, pero ahora algún grupo del crimen organizado o político ordenó su ejecución, por ello las líneas se extienden a todos sus círculos”, mencionaron los entrevistados, que solicitaron el anonimato.
En tanto, la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas sigue a la espera de que los peritos federales y locales concluyan sus diligencias de “mecánica de hechos” para continuar con la parte de investigación criminal acerca de lo ocurrido en el kilómetro 6.1 de la carretera Ciudad Victoria-Soto la Marina, donde el pasado lunes, al filo de las 10:30 horas, un grupo de hombres armados asesinó a tiros al candidato a gobernador Rodolfo Torre, al diputado local Enrique Blackmore Smer y los escoltas Luis Gerardo Soltero Zubiate, Rubén López Zúñiga y Francisco David López Catache.
Fuentes cercanas a la familia narraron a La Jornada que desde el domingo 26 de junio Rodolfo Torre citó en su casa a las 9 horas a los colaboradores que lo acompañaban en el momento del ataque, y pidió a su amigo José Luis Castillo Gutiérrez (quien le realizaba trabajos en materia de comunicación social) que lo esperara en el aeropuerto Pedro José Méndez, de donde partirían a una reunión con reporteros en Matamoros.
Los familiares indicaron que como siempre, antes de partir a sus giras, el candidato a gobernador pasó a despedirse de su padre, Egidio Torres López.
Minutos después, nueve personas, incluido Rodolfo Torre Cantú, abordaron las dos camionetas llenas de calcomanías con los logotipos del PRI. Salieron de la zona Residencial Campestre y enfilaron hacia el aeropuerto.
Tomaron la carretera que lleva a Soto la Marina, pasaron frente a una gasolinera y el Parque Científico y Tecnológico del gobierno estatal. Metros adelante fueron asesinados. Hasta el cierre de esta edición oficialmente no se conocía la identidad de los agresores y tampoco se había determinado la “mecánica de los hechos”, es decir, la reconstrucción pericial del atentado.
Sin embargo, el que los neumáticos de las camionetas utilizada en la campaña no quedaran marcados en el asfalto ha llamado la atención de los investigadores, ya que aparentemente un grupo de hombres armados hizo detener la marcha de las camionetas sin blindaje y, luego de bajar a los ocupantes, les dispararó a mansalva desde varios ángulos.
El subprocurador Hernán de la Garza Cantú informó que la procuraduría de Tamaulipas está desplegando, junto con el gobierno federal, todas las posibilidades de investigación a su alcance, pero indicó que los avances “no se darán a conocer hasta el momento en que se tengan conclusiones”.
En entrevista, el funcionario rechazó las versiones que señalan que las autoridades ya tenían detenidos vinculados con este caso.
Asimismo se negó a proporcionar información de cuántas personas han rendido declaración en calidad de testigos, toda vez que en las inmediaciones de la zona donde ocurrieron los hechos hay una base de transporte público.
En tanto, fuentes federales indicaron que las pesquisas tienen líneas de investigación de carácter político, social y criminal, y que en ellas participan efectivos del Ejército y la Armada de México, para determinar los móviles que llevaron a cometer el atentado, pues Torre Cantú era el candidato que llevaba la delantera en las preferencias electorales, un hombre muy cercano al gobernador Eugenio Hernández Flores y con gran presencia social.
Torre Cantú se desempeñó cinco años como secretario de Salud antes de convertirse en el candidato a gobernador por la alianza Todos Tamaulipas, integrada por los partidos Revolucionario Institucional, Verde Ecologista de México y Nueva Alianza.
Antes de ello, se desempeñó como director del DIF durante el gobierno de Enrique Cárdenas González; dirigente del PRI en Ciudad Victoria en 2003; fue electo diputado local para el periodo 2005-2007, pero solicitó licencia para ocupar el cargo de secretario de Salud, donde renunció en 2009 para competir a diputado federal, obteniendo 86 mil 805 votos, que lo convirtieron en el primer lugar de votación de los 300 distritos del país.
Una de las bases para considerar cuestiones de carácter político es que Torre Cantú fue el candidato a diputado que obtuvo la mayor cantidad de votos a escala nacional en los comicios federales de julio de 2009, y estaba adelante en todas las encuestas para los comicios del próximo 4 de julio.
La posibilidad de que el ataque lo perpetrara un grupo del crimen organizado se estima en razón de que desde hace un año los cárteles de Los Zetas y del Golfo rompieron sus alianzas y ahora se disputan palmo a palmo el control del tráfico de drogas en la entidad, señalaron las fuentes consultadas.
“Era para los priístas tamaulipecos la esperanza de estar mejor, era quien podía traer la paz y la tranquilidad a la entidad, pero ahora algún grupo del crimen organizado o político ordenó su ejecución, por ello las líneas se extienden a todos sus círculos”, mencionaron los entrevistados, que solicitaron el anonimato.
En tanto, la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas sigue a la espera de que los peritos federales y locales concluyan sus diligencias de “mecánica de hechos” para continuar con la parte de investigación criminal acerca de lo ocurrido en el kilómetro 6.1 de la carretera Ciudad Victoria-Soto la Marina, donde el pasado lunes, al filo de las 10:30 horas, un grupo de hombres armados asesinó a tiros al candidato a gobernador Rodolfo Torre, al diputado local Enrique Blackmore Smer y los escoltas Luis Gerardo Soltero Zubiate, Rubén López Zúñiga y Francisco David López Catache.
Fuentes cercanas a la familia narraron a La Jornada que desde el domingo 26 de junio Rodolfo Torre citó en su casa a las 9 horas a los colaboradores que lo acompañaban en el momento del ataque, y pidió a su amigo José Luis Castillo Gutiérrez (quien le realizaba trabajos en materia de comunicación social) que lo esperara en el aeropuerto Pedro José Méndez, de donde partirían a una reunión con reporteros en Matamoros.
Los familiares indicaron que como siempre, antes de partir a sus giras, el candidato a gobernador pasó a despedirse de su padre, Egidio Torres López.
Minutos después, nueve personas, incluido Rodolfo Torre Cantú, abordaron las dos camionetas llenas de calcomanías con los logotipos del PRI. Salieron de la zona Residencial Campestre y enfilaron hacia el aeropuerto.
Tomaron la carretera que lleva a Soto la Marina, pasaron frente a una gasolinera y el Parque Científico y Tecnológico del gobierno estatal. Metros adelante fueron asesinados. Hasta el cierre de esta edición oficialmente no se conocía la identidad de los agresores y tampoco se había determinado la “mecánica de los hechos”, es decir, la reconstrucción pericial del atentado.
Sin embargo, el que los neumáticos de las camionetas utilizada en la campaña no quedaran marcados en el asfalto ha llamado la atención de los investigadores, ya que aparentemente un grupo de hombres armados hizo detener la marcha de las camionetas sin blindaje y, luego de bajar a los ocupantes, les dispararó a mansalva desde varios ángulos.
El subprocurador Hernán de la Garza Cantú informó que la procuraduría de Tamaulipas está desplegando, junto con el gobierno federal, todas las posibilidades de investigación a su alcance, pero indicó que los avances “no se darán a conocer hasta el momento en que se tengan conclusiones”.
En entrevista, el funcionario rechazó las versiones que señalan que las autoridades ya tenían detenidos vinculados con este caso.
Asimismo se negó a proporcionar información de cuántas personas han rendido declaración en calidad de testigos, toda vez que en las inmediaciones de la zona donde ocurrieron los hechos hay una base de transporte público.
En tanto, fuentes federales indicaron que las pesquisas tienen líneas de investigación de carácter político, social y criminal, y que en ellas participan efectivos del Ejército y la Armada de México, para determinar los móviles que llevaron a cometer el atentado, pues Torre Cantú era el candidato que llevaba la delantera en las preferencias electorales, un hombre muy cercano al gobernador Eugenio Hernández Flores y con gran presencia social.
Torre Cantú se desempeñó cinco años como secretario de Salud antes de convertirse en el candidato a gobernador por la alianza Todos Tamaulipas, integrada por los partidos Revolucionario Institucional, Verde Ecologista de México y Nueva Alianza.
Antes de ello, se desempeñó como director del DIF durante el gobierno de Enrique Cárdenas González; dirigente del PRI en Ciudad Victoria en 2003; fue electo diputado local para el periodo 2005-2007, pero solicitó licencia para ocupar el cargo de secretario de Salud, donde renunció en 2009 para competir a diputado federal, obteniendo 86 mil 805 votos, que lo convirtieron en el primer lugar de votación de los 300 distritos del país.
Gustavo Castillo y Martín Sánchez, La Jornada, 30 de junio.
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