La Comisión Nacional de los Derechos Humanos denunció que el gobierno mexicano es el único en América Latina sin haber ratificado el convenio 138 de la OIT, elaborado en contra del trabajo infantil, pues fija en 15 años la edad mínima para laborar.
Según el organismo, en nuestro país hay 3.6 millones de niños trabajadores: un millón 100 mil entre cinco y 13 años y 2 millones y medio entre 14 y 17 años.
De entre todos, consideró que los más vulnerables son los menores jornaleros —alrededor de 600 mil a nivel nacional—, “porque trabajan de ocho a 14 horas diarias en condiciones climatológicas extremas, expuestos a pesticidas que ponen en riesgo su salud”.
La indiferencia ante el convenio de la Organización Internacional del Trabajo, apuntó, refleja los rezagos en la materia dentro de territorio mexicano.
En el marco del Día Mundial Contra el Trabajo Infantil —celebrado ayer—, la CNDH pidió a la administración de Felipe Calderón ajustarse a los lineamientos mundiales.
“Proteger la niñez mexicana es un compromiso de todos y la ratificación del convenio fortalecería sus derechos y contribuiría a evitar los casos en que son víctimas de explotación laboral”.
Y añadió: “para la Comisión es inaceptable que a pesar de que la Constitución lo prohíbe, millones de niños trabajen, poniendo en riesgo su desarrollo físico, mental y moral”.
Por eso, anunció que fortalecerá la defensa de los infantes en estas condiciones e impulsará, desde un enfoque multidisciplinario, una campaña nacional con el título “¡No se vale mano pequeña!”.
A la par, firmará convenios encaminados a erradicar esta realidad con gobiernos locales, dependencias estatales, universidades y organizaciones de la sociedad civil.
“El trabajo infantil priva el disfrute de la niñez y obliga a los pequeños a abandonar la escuela de forma prematura”, acusó.
Según el organismo, en nuestro país hay 3.6 millones de niños trabajadores: un millón 100 mil entre cinco y 13 años y 2 millones y medio entre 14 y 17 años.
De entre todos, consideró que los más vulnerables son los menores jornaleros —alrededor de 600 mil a nivel nacional—, “porque trabajan de ocho a 14 horas diarias en condiciones climatológicas extremas, expuestos a pesticidas que ponen en riesgo su salud”.
La indiferencia ante el convenio de la Organización Internacional del Trabajo, apuntó, refleja los rezagos en la materia dentro de territorio mexicano.
En el marco del Día Mundial Contra el Trabajo Infantil —celebrado ayer—, la CNDH pidió a la administración de Felipe Calderón ajustarse a los lineamientos mundiales.
“Proteger la niñez mexicana es un compromiso de todos y la ratificación del convenio fortalecería sus derechos y contribuiría a evitar los casos en que son víctimas de explotación laboral”.
Y añadió: “para la Comisión es inaceptable que a pesar de que la Constitución lo prohíbe, millones de niños trabajen, poniendo en riesgo su desarrollo físico, mental y moral”.
Por eso, anunció que fortalecerá la defensa de los infantes en estas condiciones e impulsará, desde un enfoque multidisciplinario, una campaña nacional con el título “¡No se vale mano pequeña!”.
A la par, firmará convenios encaminados a erradicar esta realidad con gobiernos locales, dependencias estatales, universidades y organizaciones de la sociedad civil.
“El trabajo infantil priva el disfrute de la niñez y obliga a los pequeños a abandonar la escuela de forma prematura”, acusó.
La Crónica, 13 de junio.
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