El PRI presentó ayer ante el Instituto Federal Electoral (IFE) una queja contra el Presidente Felipe Calderón por el mensaje que dio la noche del 15 de junio en cadena nacional, defendiendo la estrategia del Gobierno federal sobre seguridad pública y combate al narcotráfico.
Consideró el tricolor que es un promocional que puede incidir en el resultado de los comicios locales del 4 de julio, y niega que se incluye entre las excepciones permitidas por la ley en tiempos electorales.
"(Se solicita) admitir y dar el trámite legal correspondiente a la presente queja o denuncia en contra del C. Felipe Calderón Hinojosa, titular del Gobierno Federal, en la vía del procedimiento especial sancionador.
"(Que) sesione de manera urgente la Comisión de Quejas y Denuncias a efecto de evaluar el hecho que se denuncia por su repercusión en los procesos electorales en curso", señala el recurso del tricolor.
Solicitó al IFE iniciar un procedimiento especial sancionador contra Calderón, y que requiera a las empresas de radio y televisión que difundieron el mensaje, informen quién solicitó esa cadena nacional y cuánto tiempo requirieron.
"La cadena nacional del Presidente Felipe Calderón fue un promocional de 10 minutos con 27 segundos que se vio y/o escuchó en todo el País, para abordar deliberadamente sobre la ejecución de programas sociales en época electoral en 15 entidades federativas", detalla el PRI.
El mensaje gubernamental, agrega, no cumplió con los requisitos previstos en el artículo 62 de la Ley Federal de Radio y Televisión, pues "no hubo ningún anuncio de trascendencia que ameritara cadena nacional".
El tricolor refirió que en su discurso el Presidente Calderón habló del programa de Escuela Segura, y consideró que no tiene ninguna relación con los fines que dice el Gobierno promover con el mensaje, por lo que, añadió la queja, su conducta podría constituir fraude a la ley.
"La difusión de programas sociales disfrazados (a partir de su clara vinculación con el Gobierno federal y la intención de influir en las preferencias electorales) constituye un fraude a la norma constitucional, ya que en cadena nacional se transmiten mensajes que, por su contenido político, ejercen una indebida influencia en el electorado, al realizarse en periodo prohibido en violación a lo preceptuado en el Artículo 41 de la Constitución", sustenta.
Los mensajes en cadena nacional tienen una regulación y finalidad específicas, distintas a la de difusión de programas del Gobierno federal, añade el PRI.
Guadalupe Irízar, Reforma, 23 de junio.
Consideró el tricolor que es un promocional que puede incidir en el resultado de los comicios locales del 4 de julio, y niega que se incluye entre las excepciones permitidas por la ley en tiempos electorales.
"(Se solicita) admitir y dar el trámite legal correspondiente a la presente queja o denuncia en contra del C. Felipe Calderón Hinojosa, titular del Gobierno Federal, en la vía del procedimiento especial sancionador.
"(Que) sesione de manera urgente la Comisión de Quejas y Denuncias a efecto de evaluar el hecho que se denuncia por su repercusión en los procesos electorales en curso", señala el recurso del tricolor.
Solicitó al IFE iniciar un procedimiento especial sancionador contra Calderón, y que requiera a las empresas de radio y televisión que difundieron el mensaje, informen quién solicitó esa cadena nacional y cuánto tiempo requirieron.
"La cadena nacional del Presidente Felipe Calderón fue un promocional de 10 minutos con 27 segundos que se vio y/o escuchó en todo el País, para abordar deliberadamente sobre la ejecución de programas sociales en época electoral en 15 entidades federativas", detalla el PRI.
El mensaje gubernamental, agrega, no cumplió con los requisitos previstos en el artículo 62 de la Ley Federal de Radio y Televisión, pues "no hubo ningún anuncio de trascendencia que ameritara cadena nacional".
El tricolor refirió que en su discurso el Presidente Calderón habló del programa de Escuela Segura, y consideró que no tiene ninguna relación con los fines que dice el Gobierno promover con el mensaje, por lo que, añadió la queja, su conducta podría constituir fraude a la ley.
"La difusión de programas sociales disfrazados (a partir de su clara vinculación con el Gobierno federal y la intención de influir en las preferencias electorales) constituye un fraude a la norma constitucional, ya que en cadena nacional se transmiten mensajes que, por su contenido político, ejercen una indebida influencia en el electorado, al realizarse en periodo prohibido en violación a lo preceptuado en el Artículo 41 de la Constitución", sustenta.
Los mensajes en cadena nacional tienen una regulación y finalidad específicas, distintas a la de difusión de programas del Gobierno federal, añade el PRI.
Guadalupe Irízar, Reforma, 23 de junio.
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