Las fracciones de PAN y PRD en el Senado entraron ayer en una puja por dictaminar la reforma a Pemex. Por un lado el perredista Graco Ramírez respondió que se tomarán su tiempo porque es falso que PRI tenga acuerdos con Acción Nacional para arrancar la dictaminación el próximo martes. En tanto, los panistas Gustavo Madero, Santiago Creel y Rubén Camarillo retaron a la izquierda a entregar su proyecto, porque el calendario así se pactó desde la convocatoria a los debates.
El pasado lunes, el coordinador panista, Gustavo Madero, dio un ultimátum al PRD y afirmó que si no entrega antes del martes su iniciativa, hay los elementos para comenzar a dictaminar junto con el PRI.
Ayer, Graco Ramírez le respondió que quienes llevan prisa son los panistas, porque el perredismo ha mantenido contacto permanente con el PRI “y le hemos dado garantías de que sí vamos a presentar nuestras iniciativas”.
Sin embargo, aunque anteriormente mencionó que sería en agosto una vez que la conozca, debata y apruebe o rechace el Congreso nacional, ayer el senador dijo que sería a más tardar en septiembre y se habrán de tomar su tiempo para cabildearla, con el fin de llegar unidos con ese proyecto.
“Nos parece innecesario que el PAN amague ahora exigiendo que si no entregamos la iniciativa, ellos van a decidir con el PRI”, lamentó.
A su vez, Rubén Camarillo advirtió que de no alcanzar consensos, las propuestas se pueden dictaminar por separado, “pero para este caso se aplicará la democracia de los votos, es decir, aquellos temas que logren el cincuenta más uno serán los que sean aprobados y los que no lo logren, pues simple y sencillamente no serán aprobados”.
Aunque hace unos días declaró que fue el presidente Felipe Calderón quien se tardó en entregar su iniciativa al Congreso, ayer el presidente del Senado, Santiago Creel, también urgió al PRD a presentar su propuesta o al menos señalar una fecha específica, porque ya se tiene la información necesaria para empezar de inmediato.
En ese sentido, Madero insistió en que el calendario de inicio de dictamen se fijó desde la convocatoria y están todos los ingredientes para que este 5 de agosto inicie la dictaminación.
El pasado lunes, el coordinador panista, Gustavo Madero, dio un ultimátum al PRD y afirmó que si no entrega antes del martes su iniciativa, hay los elementos para comenzar a dictaminar junto con el PRI.
Ayer, Graco Ramírez le respondió que quienes llevan prisa son los panistas, porque el perredismo ha mantenido contacto permanente con el PRI “y le hemos dado garantías de que sí vamos a presentar nuestras iniciativas”.
Sin embargo, aunque anteriormente mencionó que sería en agosto una vez que la conozca, debata y apruebe o rechace el Congreso nacional, ayer el senador dijo que sería a más tardar en septiembre y se habrán de tomar su tiempo para cabildearla, con el fin de llegar unidos con ese proyecto.
“Nos parece innecesario que el PAN amague ahora exigiendo que si no entregamos la iniciativa, ellos van a decidir con el PRI”, lamentó.
A su vez, Rubén Camarillo advirtió que de no alcanzar consensos, las propuestas se pueden dictaminar por separado, “pero para este caso se aplicará la democracia de los votos, es decir, aquellos temas que logren el cincuenta más uno serán los que sean aprobados y los que no lo logren, pues simple y sencillamente no serán aprobados”.
Aunque hace unos días declaró que fue el presidente Felipe Calderón quien se tardó en entregar su iniciativa al Congreso, ayer el presidente del Senado, Santiago Creel, también urgió al PRD a presentar su propuesta o al menos señalar una fecha específica, porque ya se tiene la información necesaria para empezar de inmediato.
En ese sentido, Madero insistió en que el calendario de inicio de dictamen se fijó desde la convocatoria y están todos los ingredientes para que este 5 de agosto inicie la dictaminación.
Angélica Mercado, Milenio, 30 de julio.
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