El gobierno mantiene su propuesta de buscar una negociación de paz, pero si las guerrillas de las FARC no la desean, entonces recibirán “garrote”, afirmó el sábado el ministro de Defensa de Colombia, Juan Manuel Santos. “Si están dispuestos a sentarse a negociar de veras, de buena fe, no para repetir lo del pasado de sentarse a negociar para tomar oxígeno y continuar agrediendo al pueblo colombiano, el gobierno esta dispuesto a negociar con ellos...pero si las FARC no quieren, les vamos a dar garrote”, dijo Santos.
La orden del gobierno a los mandos militares es “arreciar la presión que les hemos venido haciendo” a los insurgentes, añadió el ministro en un discurso sobre temas de seguridad en una reunión en la localidad de Soacha, a las afueras de Bogotá. “En lugar de aceptar la derrota con dignidad, las FARC desechan a sus propios hombres”, precisó Santos. “Ahí están pintadas: califican de traidores a Gafas y a César. Que califiquen de traidor, entonces, al Mono Jojoy (Jorge Briceño, jefe militar de esa guerrilla) que fue infiltrado por el Ejército”, advirtió el ministro.
Santos celebró también el acuerdo de entendimiento entre el presidente de Colombia, Álvaro Uribe, y su colega de Venezuela, Hugo Chávez, al tiempo que pidió resultados de Caracas en la lucha contra la guerrilla de las FARC. “Que esas palabras que pronunció (Chávez) en contra de las FARC se traduzcan en hechos y que no solamente colaboren, sino que no toleren la presencia de las FARC allá (y) con eso contribuyen a la paz en Colombia”, afirmó.
Mientras, Uribe afirmó ayer que la estrategia del gobierno es aplicar durante las 24 horas del día su llamada política de “seguridad democrática” o de mano dura contra los insurgentes. “Seguridad democrática al amanecer, al mediodía, por la tardecita y a medianoche, y cuando (los rebeldes) quieran diálogo, a cualquier hora” el gobierno está dispuesto, dijo Uribe en declaraciones divulgadas por el oficial canal Institucional.
En su comunicación, las FARC dijeron que fue una “fuga” producto de una “traición” de dos de sus guerrilleros lo que permitió la libertad el 2 de julio de 15 rehenes, entre ellos la ex candidata presidencial colombo-francesa Ingrid Betancourt y tres contratistas estadunidenses.
De otra parte, y en declaraciones a la agencia DPA, la senadora colombiana Piedad Córdoba advirtió que la liberación de Betancourt probablemente sólo suponga un éxito momentáneo para Uribe. Colombia necesita una estrategia mucho más amplia para resolver el conflicto de cuatro décadas con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), dijo la política liberal durante una visita a la capital española, Madrid.
A largo plazo, la única solución al conflicto con las FARC es resolver la profunda desigualdad social de Colombia con una reforma democrática, consideró Córdoba. Colombia “no es un sistema político y social incluyente ni un sistema que permita transformaciones reales del país. Es un país vendido, sin soberanía. (...) Eso no es una democracia”. “Es el momento para convocar a un acuerdo nacional”, consideró la senadora. “No pactos de cúpula”.
La principal condición para lograr la paz con las FARC es el establecimiento de una asamblea constituyente y un gobierno con una voluntad real de llevar a cabo las reformas, añadió.
Ecuador se niega
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ratificó ayer que mantendrá rotas las relaciones con Colombia mientras no “haya un gobierno decente con el cual tratar”, al día siguiente de que su homólogo Álvaro Uribe expresara interés en reconstruir los vínculos, rotos desde marzo.
El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se reunirá hoy en París con la ex rehén colombo-francesa Ingrid Betancourt.
La orden del gobierno a los mandos militares es “arreciar la presión que les hemos venido haciendo” a los insurgentes, añadió el ministro en un discurso sobre temas de seguridad en una reunión en la localidad de Soacha, a las afueras de Bogotá. “En lugar de aceptar la derrota con dignidad, las FARC desechan a sus propios hombres”, precisó Santos. “Ahí están pintadas: califican de traidores a Gafas y a César. Que califiquen de traidor, entonces, al Mono Jojoy (Jorge Briceño, jefe militar de esa guerrilla) que fue infiltrado por el Ejército”, advirtió el ministro.
Santos celebró también el acuerdo de entendimiento entre el presidente de Colombia, Álvaro Uribe, y su colega de Venezuela, Hugo Chávez, al tiempo que pidió resultados de Caracas en la lucha contra la guerrilla de las FARC. “Que esas palabras que pronunció (Chávez) en contra de las FARC se traduzcan en hechos y que no solamente colaboren, sino que no toleren la presencia de las FARC allá (y) con eso contribuyen a la paz en Colombia”, afirmó.
Mientras, Uribe afirmó ayer que la estrategia del gobierno es aplicar durante las 24 horas del día su llamada política de “seguridad democrática” o de mano dura contra los insurgentes. “Seguridad democrática al amanecer, al mediodía, por la tardecita y a medianoche, y cuando (los rebeldes) quieran diálogo, a cualquier hora” el gobierno está dispuesto, dijo Uribe en declaraciones divulgadas por el oficial canal Institucional.
En su comunicación, las FARC dijeron que fue una “fuga” producto de una “traición” de dos de sus guerrilleros lo que permitió la libertad el 2 de julio de 15 rehenes, entre ellos la ex candidata presidencial colombo-francesa Ingrid Betancourt y tres contratistas estadunidenses.
De otra parte, y en declaraciones a la agencia DPA, la senadora colombiana Piedad Córdoba advirtió que la liberación de Betancourt probablemente sólo suponga un éxito momentáneo para Uribe. Colombia necesita una estrategia mucho más amplia para resolver el conflicto de cuatro décadas con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), dijo la política liberal durante una visita a la capital española, Madrid.
A largo plazo, la única solución al conflicto con las FARC es resolver la profunda desigualdad social de Colombia con una reforma democrática, consideró Córdoba. Colombia “no es un sistema político y social incluyente ni un sistema que permita transformaciones reales del país. Es un país vendido, sin soberanía. (...) Eso no es una democracia”. “Es el momento para convocar a un acuerdo nacional”, consideró la senadora. “No pactos de cúpula”.
La principal condición para lograr la paz con las FARC es el establecimiento de una asamblea constituyente y un gobierno con una voluntad real de llevar a cabo las reformas, añadió.
Ecuador se niega
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ratificó ayer que mantendrá rotas las relaciones con Colombia mientras no “haya un gobierno decente con el cual tratar”, al día siguiente de que su homólogo Álvaro Uribe expresara interés en reconstruir los vínculos, rotos desde marzo.
El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se reunirá hoy en París con la ex rehén colombo-francesa Ingrid Betancourt.
Agencias en Bogotá, Milenio, 13 de julio.
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