La fracción del PRI en la Cámara de Diputados analiza aún la posibilidad de aprobar el impuesto adicional de 2 por ciento sobre las ventas de bienes y servicios, con excepción de alimentos y medicinas, reconoció Francisco Rojas, coordinador parlamentario de esa bancada.
Según dijo, “la contribución para el combate a la pobreza que propone el gobierno federal aplicaría de forma general, gravando las ventas de todos los bienes y servicios, incluyendo alimentos y medicinas, y en estos últimos el PRI no está de acuerdo, (pero) en los demás temas lo estamos analizando y contrastando con la propuesta económica que presentó el partido”.
Rojas revivió así el nuevo gravamen propuesto en el paquete económico del presidente Felipe Calderón, no obstante el “rotundo no” al aumento de impuestos que él mismo y otros líderes priistas han expresado.
El propio coordinador de los diputados federales del PRI manifestó el pasado jueves un “no definitivo” al impuesto de 2 por ciento en alimentos y medicinas, aunque dos semanas antes, el 11 de septiembre, manifestó su disposición a examinar la propuesta e incluso dijo que no había “nada definitivo” sobre el rechazo a la llamada contribución para el combate a la pobreza.
Apenas un día antes, el 10 de septiembre, Rojas había advertido que su bancada no aprobaría el impuesto de 2 por ciento, “sea cual fuere su nombre”, mientras el grupo parlamentario del tricolor dio a conocer oficialmente un posicionamiento inicial sobre el paquete económico 2010:
“El Presidente de la República recurre al fácil recurso de aumentar los impuestos, proponiendo un nuevo tributo con el que se gravaría el consumo de todos los bienes y servicios, con características que advertimos muy similares a las del IVA”, puntualizaron entonces los priistas, y remarcaron que “la creación y el alza de los impuestos ahondaría la más grave recesión económica que nuestro país ha sufrido en décadas”.
No obstante, el senador priista Manlio Fabio Beltrones declaró solo cuatro días después: “No descalifiquemos a priori cualquiera de las ideas que están puestas sobre la mesa, e incluso, esta sumamente ingeniosa del 2 por ciento sobre el total de cobro, como nuevo impuesto a todos los productos, incluidos alimentos y medicinas”.
Beltrones descalificó por ello las afirmaciones del legislador perredista Carlos Navarrete respecto a que el nuevo impuesto estaba “muerto y enterrado”:
“Hay que evitar posiciones radicales al respecto. Es la hora en la que México nos exige enorme responsabilidad, sobre todo a quienes ocupamos cargos políticos o públicos, porque México está sufriendo las consecuencias de una crisis económica y financiera mundial, pero es el país que más está decreciendo”, reviró el senador del PRI.
La presidenta nacional del PRI, Beatriz Paredes, se ha conducido a su vez por la vía de la ambigüedad, sin establecer una posición a favor o en contra del impuesto contra la pobreza.
Apenas la semana pasada, Paredes reiteró la frase que una y otra vez ha respondido a quienes le piden su opinión sobre el proyecto de ingresos y egresos para el año entrante: “Se está analizando. Todavía no hay definiciones”.
- Claves
“Gobierno incapaz”
• El plan B contra la crisis económica tendrá que salir de la Cámara de Diputados, ante la incapacidad del gobierno de contar con uno, afirmó el líder de la Confederación Nacional Campesina, Cruz López.
• Consideró a Liconsa una “eficaz importadora de leche” y competidora desleal de productores nacionales, y de Diconsa aseguró que incumple con regular los precios de la canasta básica en zonas marginadas.
• En entrevista, López dijo que los legisladores deberán actuar para impulsar el desarrollo de regiones marginadas.
Según dijo, “la contribución para el combate a la pobreza que propone el gobierno federal aplicaría de forma general, gravando las ventas de todos los bienes y servicios, incluyendo alimentos y medicinas, y en estos últimos el PRI no está de acuerdo, (pero) en los demás temas lo estamos analizando y contrastando con la propuesta económica que presentó el partido”.
Rojas revivió así el nuevo gravamen propuesto en el paquete económico del presidente Felipe Calderón, no obstante el “rotundo no” al aumento de impuestos que él mismo y otros líderes priistas han expresado.
El propio coordinador de los diputados federales del PRI manifestó el pasado jueves un “no definitivo” al impuesto de 2 por ciento en alimentos y medicinas, aunque dos semanas antes, el 11 de septiembre, manifestó su disposición a examinar la propuesta e incluso dijo que no había “nada definitivo” sobre el rechazo a la llamada contribución para el combate a la pobreza.
Apenas un día antes, el 10 de septiembre, Rojas había advertido que su bancada no aprobaría el impuesto de 2 por ciento, “sea cual fuere su nombre”, mientras el grupo parlamentario del tricolor dio a conocer oficialmente un posicionamiento inicial sobre el paquete económico 2010:
“El Presidente de la República recurre al fácil recurso de aumentar los impuestos, proponiendo un nuevo tributo con el que se gravaría el consumo de todos los bienes y servicios, con características que advertimos muy similares a las del IVA”, puntualizaron entonces los priistas, y remarcaron que “la creación y el alza de los impuestos ahondaría la más grave recesión económica que nuestro país ha sufrido en décadas”.
No obstante, el senador priista Manlio Fabio Beltrones declaró solo cuatro días después: “No descalifiquemos a priori cualquiera de las ideas que están puestas sobre la mesa, e incluso, esta sumamente ingeniosa del 2 por ciento sobre el total de cobro, como nuevo impuesto a todos los productos, incluidos alimentos y medicinas”.
Beltrones descalificó por ello las afirmaciones del legislador perredista Carlos Navarrete respecto a que el nuevo impuesto estaba “muerto y enterrado”:
“Hay que evitar posiciones radicales al respecto. Es la hora en la que México nos exige enorme responsabilidad, sobre todo a quienes ocupamos cargos políticos o públicos, porque México está sufriendo las consecuencias de una crisis económica y financiera mundial, pero es el país que más está decreciendo”, reviró el senador del PRI.
La presidenta nacional del PRI, Beatriz Paredes, se ha conducido a su vez por la vía de la ambigüedad, sin establecer una posición a favor o en contra del impuesto contra la pobreza.
Apenas la semana pasada, Paredes reiteró la frase que una y otra vez ha respondido a quienes le piden su opinión sobre el proyecto de ingresos y egresos para el año entrante: “Se está analizando. Todavía no hay definiciones”.
- Claves
“Gobierno incapaz”
• El plan B contra la crisis económica tendrá que salir de la Cámara de Diputados, ante la incapacidad del gobierno de contar con uno, afirmó el líder de la Confederación Nacional Campesina, Cruz López.
• Consideró a Liconsa una “eficaz importadora de leche” y competidora desleal de productores nacionales, y de Diconsa aseguró que incumple con regular los precios de la canasta básica en zonas marginadas.
• En entrevista, López dijo que los legisladores deberán actuar para impulsar el desarrollo de regiones marginadas.
Fernando Damián, Milenio, 28 de septiembre.
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