LA HABANA.- De uniforme verde olivo, con su gorra militar de toda la vida y sin los grados de Comandante en Jefe, el ex Presidente cubano Fidel Castro pronunció ayer en la simbólica escalinata de la Universidad de La Habana su primer discurso multitudinario luego de cuatro años de haber dejado el poder por una enfermedad intestinal.
El acto comenzó a las 7:30 horas ante decenas de miles de estudiantes. De pie, con el sol de frente y tras un atril colocado en la escalinata de la institución, el líder cubano leyó en 45 minutos un alegato por la paz en el que advirtió sobre la urgencia de evitar una guerra nuclear.
"El tiempo que la humanidad dispone para librar esta batalla es increíblemente limitado", afirmó el ex Mandatario, de 84 años, quien desde su regreso a la actividad pública promueve una campaña global de información sobre el riesgo de un conflicto atómico.
En su intervención del 7 de julio, transmitida también por televisión en directo, Fidel insistió en la imperiosa necesidad de persuadir al Presidente estadounidense, Barack Obama, de no involucrarse en una batalla contra Irán, la cual, según él, acabaría en un "holocausto nuclear".
"Le ha correspondido a Cuba la dura tarea de advertir a la humanidad del peligro real que está confrontando, y en esta actividad no debemos desmayarnos", indicó.
"No hay ninguna razón para atacar (a Irán). Tener una planta que produzca energía eléctrica partiendo del uranio no constituye un delito", añadió Fidel en alusión al programa atómico de la república islámica.
El ex gobernante recordó además que Estados Unidos fue el primer país en usar armas nucleares contra otra nación cuando en 1945, al fin de la Segunda Guerra Mundial, bombardeó las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.
Señaló también la dimensión de los efectos que tendría hoy el empleo de este tipo de armamento. Según Fidel, éste reúne en la actualidad un poder destructivo 440 mil veces superior al usado contra Japón.
Durante su intervención, el primer secretario del Partido Comunista ni siquiera mencionó los problemas del país, con lo que mostró, una vez más, que los asuntos internos son responsabilidad del Gobierno que preside su hermano, Raúl Castro.
"Fidel está campana (muy bien). Este hombre tiene una voluntad y una confianza en sí mismo que hace pensar", coincidieron estudiantes consultados por REFORMA al finalizar el acto.
El acto comenzó a las 7:30 horas ante decenas de miles de estudiantes. De pie, con el sol de frente y tras un atril colocado en la escalinata de la institución, el líder cubano leyó en 45 minutos un alegato por la paz en el que advirtió sobre la urgencia de evitar una guerra nuclear.
"El tiempo que la humanidad dispone para librar esta batalla es increíblemente limitado", afirmó el ex Mandatario, de 84 años, quien desde su regreso a la actividad pública promueve una campaña global de información sobre el riesgo de un conflicto atómico.
En su intervención del 7 de julio, transmitida también por televisión en directo, Fidel insistió en la imperiosa necesidad de persuadir al Presidente estadounidense, Barack Obama, de no involucrarse en una batalla contra Irán, la cual, según él, acabaría en un "holocausto nuclear".
"Le ha correspondido a Cuba la dura tarea de advertir a la humanidad del peligro real que está confrontando, y en esta actividad no debemos desmayarnos", indicó.
"No hay ninguna razón para atacar (a Irán). Tener una planta que produzca energía eléctrica partiendo del uranio no constituye un delito", añadió Fidel en alusión al programa atómico de la república islámica.
El ex gobernante recordó además que Estados Unidos fue el primer país en usar armas nucleares contra otra nación cuando en 1945, al fin de la Segunda Guerra Mundial, bombardeó las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.
Señaló también la dimensión de los efectos que tendría hoy el empleo de este tipo de armamento. Según Fidel, éste reúne en la actualidad un poder destructivo 440 mil veces superior al usado contra Japón.
Durante su intervención, el primer secretario del Partido Comunista ni siquiera mencionó los problemas del país, con lo que mostró, una vez más, que los asuntos internos son responsabilidad del Gobierno que preside su hermano, Raúl Castro.
"Fidel está campana (muy bien). Este hombre tiene una voluntad y una confianza en sí mismo que hace pensar", coincidieron estudiantes consultados por REFORMA al finalizar el acto.
Yolanda Martínez corresponsal, Reforma, 4 de septiembre.
0 Responses to "Vuelve Fidel a plaza pública en universidad"
Publicar un comentario