Pedro Pablo Elizondo, obispo de Cancún, Quintana Roo, pidió que los representantes de los estados y delegaciones participantes en la Cumbre de Cambio Climático no tengan miedo de tomar las medidas necesarias para el bien del planeta.
Congregados con sus feligreses en la explanada del municipio de Benito Juárez, en Cancún, los jerarcas religiosos se tomaron de las manos para orar en conjunto durante más de tres horas a favor de la mitigación del calentamiento global.
El primero en hacer uso del micrófono fue Monseñor Pablo Elizondo, quien pidió a Dios que todos los participante en la COP-16 hagan a un lado “sus intereses mezquinos de grupo y den prioridad al desarrollo de estrategias participativas que lleven a la humanidad a un mundo sostenible y en el que se protejan los recursos naturales”.
“Que sepan mirar más allá de sus intereses como grupo o como naciones para que se logren esos anhelados acuerdos vinculantes…, y no permitas Señor que los recursos estratégicos no sean acaparados por Estados, grupos de poder empresariales a costa de naciones pobres, porque la comunidad internacional tiene el deber imprescindible de encontrar los modos institucionales para ordenar el aprovechamiento de los recursos no renovables”, expresó Pablo Elizondo.
Por su parte, el jerarca de la Iglesia Presbiteriana, Armando Catzin, pidió a los presentes levantar sus manos hacia el cielo y con las palmas expuestas pedir perdón “a nuestro Señor Dios por todo el mal que le hemos hecho a nuestra madre naturaleza”.
“Te pedimos que perdones a la humanidad, a sus gobiernos, a su sociedad y a todos nosotros por todo el mal que le hemos hecho a nuestra agua, a nuestros bosques, a nuestro aire y a los que hoy negocian en la mesa –enviados de las naciones con poder de decisión– a que arriben a acuerdos concretos que trasciendan a la humanidad. Te lo pedimos Señor”, rezó ante los aplausos de católicos, evangelistas, presbiterianos, judíos y de otras grey religiosas que se vistieron de blanco y asistieron a este rezo masivo con biblia y veladoras en mano.
Vigilante aéreo
La Secretaría de Seguridad Pública de Cancún, Quintana Roo, presentó ayer un aeroplano denominado Gavilán, el cual opera a control remoto. Su función será monitorear la seguridad durante la Cumbre sobre el cambio climático, en donde participan representantes de 194 países.
Cancún • Rodolfo Montes, Milenio, 1º de diciembre
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