VILLAHERMOSA.- La Procuraduría de Chihuahua ha recibido entre tres y cuatro denuncias por presuntas incursiones del Ejército en casas particulares sin contar con órdenes de cateo, informó ayer la titular de la dependencia, Patricia González.
La funcionaria, quien fue entrevistada en la 20 Conferencia Nacional de Procuración de Justicia, hizo un llamado al Ejército para que actúe de manera coordinada con la Procuraduría estatal y respetando los derechos humanos.
"Hemos recibido algunas quejas de ciudadanos, precisamente en los casos donde no se han solicitado estas órdenes de cateo. Le sigo insistiendo que es muy importante que los militares trabajen acotados bajo el enfoque de los derechos humanos y solicitando siempre esas órdenes de cateo.
"Más en Chihuahua, donde lo pueden hacer de manera inmediata con el Ministerio Público, porque nosotros tenemos en nuestra nueva legislación el cateo sin autorización judicial, simplemente que nos justifiquen los motivos de intromisión o allanamiento de un domicilio por razones de seguridad pública", indicó.
Sobre las dos policías detenidas el pasado 2 de abril junto con otros 20 agentes, tras el arranque del Operativo Conjunto Chihuahua, dijo que ellas decidieron presentar una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
"De las dos jóvenes comandantes, (son personal) del nuevo sistema de justicia penal, que ni siquiera tenían nada que ver en cuestiones (de narcotráfico); son personas de fuera que nosotros entrenamos para el nuevo sistema de justicia penal. Ellas sufrieron una revisión, pero ya canalizaron su denuncia a la comisión estatal y a la CNDH", aseguró.
Sobre el resto de los policías, indicó, no se acreditó ministerialmente que hubiesen sido víctimas de abuso de autoridad por parte de los militares, quienes los presentaron ante el Ministerio Público federal.
"Acudieron en calidad de testigos, esa fue la información que nos dieron (los militares), pero desde el momento en que los trasladaron siempre estuve al lado de ellos, para saber cuál iba a ser su situación, y en realidad, los trasladaron a la PGR en calidad de testigos", aseguró.
La Procuradora de Chihuahua eesaltó que los principales problemas son el narcotráfico a gran escala y el narcomenudeo, que han desatado la violencia en la entidad.
La funcionaria, quien fue entrevistada en la 20 Conferencia Nacional de Procuración de Justicia, hizo un llamado al Ejército para que actúe de manera coordinada con la Procuraduría estatal y respetando los derechos humanos.
"Hemos recibido algunas quejas de ciudadanos, precisamente en los casos donde no se han solicitado estas órdenes de cateo. Le sigo insistiendo que es muy importante que los militares trabajen acotados bajo el enfoque de los derechos humanos y solicitando siempre esas órdenes de cateo.
"Más en Chihuahua, donde lo pueden hacer de manera inmediata con el Ministerio Público, porque nosotros tenemos en nuestra nueva legislación el cateo sin autorización judicial, simplemente que nos justifiquen los motivos de intromisión o allanamiento de un domicilio por razones de seguridad pública", indicó.
Sobre las dos policías detenidas el pasado 2 de abril junto con otros 20 agentes, tras el arranque del Operativo Conjunto Chihuahua, dijo que ellas decidieron presentar una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
"De las dos jóvenes comandantes, (son personal) del nuevo sistema de justicia penal, que ni siquiera tenían nada que ver en cuestiones (de narcotráfico); son personas de fuera que nosotros entrenamos para el nuevo sistema de justicia penal. Ellas sufrieron una revisión, pero ya canalizaron su denuncia a la comisión estatal y a la CNDH", aseguró.
Sobre el resto de los policías, indicó, no se acreditó ministerialmente que hubiesen sido víctimas de abuso de autoridad por parte de los militares, quienes los presentaron ante el Ministerio Público federal.
"Acudieron en calidad de testigos, esa fue la información que nos dieron (los militares), pero desde el momento en que los trasladaron siempre estuve al lado de ellos, para saber cuál iba a ser su situación, y en realidad, los trasladaron a la PGR en calidad de testigos", aseguró.
La Procuradora de Chihuahua eesaltó que los principales problemas son el narcotráfico a gran escala y el narcomenudeo, que han desatado la violencia en la entidad.
Nota de Rolando Herrera, enviado, Reforma, 18 de abril.
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