PARÍS. Los gobiernos de España, Suiza y Francia pusieron en marcha una misión humanitaria en Colombia para prestar atención médica a la colombo-francesa Ingrid Betancourt, cuyo estado de salud es grave tras permanecer secuestrada por las FARC por casi seis años.
La Presidencia francesa se limitó a anunciar en un comunicado que "una misión humanitaria de los tres facilitadores, España, Francia y Suiza, ha comenzado en enlace con las autoridades concernientes".
La decisión de enviar una misión a Colombia fue anunciada en París por el presidente francés, Nicolas Sarkozy en un video.
En la grabación, Sarkozy lanzó un nuevo llamado al jefe de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Manuel Marulanda, para que libere "inmediatamente" a la rehén, en cautiverio desde el 23 de febrero del 2002, que estaría en "peligro de muerte inminente".
El inicio de esta misión se produce cuando persisten numerosas interrogantes sobre sus posibilidades de éxito y sobre la actitud que asumirá frente a ésta la guerrilla colombiana.
El martes, después de hablar telefónicamente con Sarkozy, el presidente colombiano Álvaro Uribe se declaró dispuesto a "suspender las operaciones militares" en las zonas a las que quiera dirigirse la misión francesa.
En peligro de muerte.
Por su parte el hijo Betancourt, Lorenzo Delloye, declaró desde Francia que su madre está en peligro de morir en las próximas horas si no se le realiza una transfusión sanguínea de emergencia.
"En la selva colombiana, una mujer, mi madre, se dirige hacia la muerte. Sufre hepatitis B y una enfermedad de la piel que necesita una transfusión sanguínea en las próximas horas" para salvarle la vida, dijo el joven en conferencia de prensa.
Delloye, de 18 años, lanzó un nuevo llamado a las FARC y al Presidente colombiano para posibilitar la liberación de su madre, secuestrada desde el 2002.
"Comandante Marulanda, el mundo le está mirando. Usted debe decidir si quiere quedar para siempre como un criminal de guerra o si quiere entrar en los libros como un hombre", agregó.
El hijo de la rehén comentó que es muy posible que su madre esté en huelga de hambre desde hace más de un mes y se niegue a tomar medicamentos, pero recalcó que ese gesto no es para dejarse morir porque haya perdido las ganas de vivir, sino que es para colocar a las FARC y a Uribe ante su "responsabilidad ante la historia".
La Presidencia francesa se limitó a anunciar en un comunicado que "una misión humanitaria de los tres facilitadores, España, Francia y Suiza, ha comenzado en enlace con las autoridades concernientes".
La decisión de enviar una misión a Colombia fue anunciada en París por el presidente francés, Nicolas Sarkozy en un video.
En la grabación, Sarkozy lanzó un nuevo llamado al jefe de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Manuel Marulanda, para que libere "inmediatamente" a la rehén, en cautiverio desde el 23 de febrero del 2002, que estaría en "peligro de muerte inminente".
El inicio de esta misión se produce cuando persisten numerosas interrogantes sobre sus posibilidades de éxito y sobre la actitud que asumirá frente a ésta la guerrilla colombiana.
El martes, después de hablar telefónicamente con Sarkozy, el presidente colombiano Álvaro Uribe se declaró dispuesto a "suspender las operaciones militares" en las zonas a las que quiera dirigirse la misión francesa.
En peligro de muerte.
Por su parte el hijo Betancourt, Lorenzo Delloye, declaró desde Francia que su madre está en peligro de morir en las próximas horas si no se le realiza una transfusión sanguínea de emergencia.
"En la selva colombiana, una mujer, mi madre, se dirige hacia la muerte. Sufre hepatitis B y una enfermedad de la piel que necesita una transfusión sanguínea en las próximas horas" para salvarle la vida, dijo el joven en conferencia de prensa.
Delloye, de 18 años, lanzó un nuevo llamado a las FARC y al Presidente colombiano para posibilitar la liberación de su madre, secuestrada desde el 2002.
"Comandante Marulanda, el mundo le está mirando. Usted debe decidir si quiere quedar para siempre como un criminal de guerra o si quiere entrar en los libros como un hombre", agregó.
El hijo de la rehén comentó que es muy posible que su madre esté en huelga de hambre desde hace más de un mes y se niegue a tomar medicamentos, pero recalcó que ese gesto no es para dejarse morir porque haya perdido las ganas de vivir, sino que es para colocar a las FARC y a Uribe ante su "responsabilidad ante la historia".
Nota de AFP y Notimex, El Economista, 3 de abril.
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