El secretario de Hacienda Ernesto Cordero Arroyo aseguró anoche que “no existe ninguna posibilidad de que México se descarrile” en 2011, como consecuencia del paquete económico propuesto por el Ejecutivo federal, cuyas proyecciones en materia de crecimiento y gasto son austeras, muy similares a las de este año, e incluso se mantendrá el aumento paulatino a las gasolinas, anunció.
Sin embargo, aclaró que impedir ese “descarrilamiento en la economía mexicana” depende de que todos los actores del país “nos conduzcamos con responsabilidad y prudencia en el manejo de las decisiones que tienen que ver con la Hacienda Pública”.
Reconoció que dicho paquete “no es el que merece el país” –se proyecta un crecimiento del 3.8 por ciento, menor incluso al que podría lograrse este año-, pero garantizó que atiende las prioridades de gasto en infraestructura, seguridad, educación y salud:
Se trata de una propuesta “austera pero realista”, aseveró.
Resaltó que el gobierno federal propone ahorros en el Gasto Público hasta por 20 mil millones de pesos, lo cual, aseguró, es una buena noticia para el país.
Luego de entregar a la Cámara de Diputados dicho paquete–que contiene los Criterios de Política Económica, la iniciativa de Ley de Ingresos y el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación-, Cordero afirmó que la propuesta económica “no está amarrada a pactos políticos” de ninguna especie.
Por ello, pidió al Congreso una discusión “responsable, técnica y apegada a los criterios económicos, financieros y fiscales que demanda la nación”.
Subrayó que se trata de “un paquete sin sorpresas”, ya que no propone el crecimiento ni la aplicación de nuevos impuestos, pero tampoco contempla la reducción de los que hay, ello en abierta referencia a las iniciativas del PRI y PRD para reducir de 16 a 15 por ciento el IVA para 2011.
Al respecto resaltó que por segundo año en esta administración, el gobierno no presenta una miscelánea fiscal, lo que significa que las tasas impositivas no sufrirán modificaciones el año entrante, y sí más bien quedarán eliminados 41 Derechos a fin de simplificar a los contribuyentes diversos trámites fiscales y financieros.
En una breve sesión de preguntas y respuestas, tras depositar los documentos en manos de la Mesa Directiva de la Cámara baja, que encabeza Jorge Carlos Ramírez Marín, del PRI, el responsable de la política económica del país sostuvo que el paquete económico del Ejecutivo responde a una visión de largo plazo.
El funcionario indicó que el gobierno del presidente Felipe Calderón determinó no presentar para 2011 ninguna variante en materia impositiva, debido a que logró mantener un equilibrio y fortaleció las finanzas públicas, de modo que no consideró necesario proponer incremento alguno.
Cordero Arroyo dijo también que los subejercicios del gobierno federal al primer semestre de este año es de apenas 1.4 por ciento, pero no significa que sean recursos que se tengan guardados, sino que seguramente ya fueron reasignados a otras prioridades para la nación.
Sin embargo, aclaró que impedir ese “descarrilamiento en la economía mexicana” depende de que todos los actores del país “nos conduzcamos con responsabilidad y prudencia en el manejo de las decisiones que tienen que ver con la Hacienda Pública”.
Reconoció que dicho paquete “no es el que merece el país” –se proyecta un crecimiento del 3.8 por ciento, menor incluso al que podría lograrse este año-, pero garantizó que atiende las prioridades de gasto en infraestructura, seguridad, educación y salud:
Se trata de una propuesta “austera pero realista”, aseveró.
Resaltó que el gobierno federal propone ahorros en el Gasto Público hasta por 20 mil millones de pesos, lo cual, aseguró, es una buena noticia para el país.
Luego de entregar a la Cámara de Diputados dicho paquete–que contiene los Criterios de Política Económica, la iniciativa de Ley de Ingresos y el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación-, Cordero afirmó que la propuesta económica “no está amarrada a pactos políticos” de ninguna especie.
Por ello, pidió al Congreso una discusión “responsable, técnica y apegada a los criterios económicos, financieros y fiscales que demanda la nación”.
Subrayó que se trata de “un paquete sin sorpresas”, ya que no propone el crecimiento ni la aplicación de nuevos impuestos, pero tampoco contempla la reducción de los que hay, ello en abierta referencia a las iniciativas del PRI y PRD para reducir de 16 a 15 por ciento el IVA para 2011.
Al respecto resaltó que por segundo año en esta administración, el gobierno no presenta una miscelánea fiscal, lo que significa que las tasas impositivas no sufrirán modificaciones el año entrante, y sí más bien quedarán eliminados 41 Derechos a fin de simplificar a los contribuyentes diversos trámites fiscales y financieros.
En una breve sesión de preguntas y respuestas, tras depositar los documentos en manos de la Mesa Directiva de la Cámara baja, que encabeza Jorge Carlos Ramírez Marín, del PRI, el responsable de la política económica del país sostuvo que el paquete económico del Ejecutivo responde a una visión de largo plazo.
El funcionario indicó que el gobierno del presidente Felipe Calderón determinó no presentar para 2011 ninguna variante en materia impositiva, debido a que logró mantener un equilibrio y fortaleció las finanzas públicas, de modo que no consideró necesario proponer incremento alguno.
Cordero Arroyo dijo también que los subejercicios del gobierno federal al primer semestre de este año es de apenas 1.4 por ciento, pero no significa que sean recursos que se tengan guardados, sino que seguramente ya fueron reasignados a otras prioridades para la nación.
Luciano Franco, La Crónica, 9 de septiembre.
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